¿Perdonar?

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Alisa

Al abrir los ojos y verme en una cama de hospital, con dos enfermera al lado, mi corazón había latido tan fuerte, que tuvieron que tranquilizarme. ¿Que había pasado? ¿Donde estaban ellos?

-¡ Alex! ¡jorge! ¿donde están? - me incorporo para preguntar  y la chica trata de tranquilizarme. Siento mi mejilla arder y me la toco, mis labios están un poco hinchado, y recordé el golpe que me había dado Alex. ¿por que alex?

-Usted fue herida por un joven, y en este momento todo esta bien, lo tienen en la policía.

-¿Policia? No, no pueden. Debo buscarlos.

-¡Tranquila!

-Yo estoy bien, dejenme en paz.

Salí de allí quitándome el suero y ellos trataban de detenerme.

-¡Hija!- mi madre había llegado con mi padre. Lo que faltaba.

-¡Mamá estoy bien! Debo buscar a jorge.

-¿Que jorge?

-No importa, Alex  y él están preso .

-¡Alex te dió un golpe! - exclama papá enojado.

-¡no papá! Alex le iba a dar a Jorge y el golpe lo recibí yo cuando jorge lo esquivó.

-¡¿Quien diablo es Jorge?!- preguntan los dos a la vez y estallo en furia.

-No importa. Debo irme.

Corrí de allí y me seguían, pero alcancé un taxi.

-hija...

-Papá por favor, te ruego que pague la fianza o hable con tu amigo el militar.

- esta bien, pero debes explicarnos.

-si, lo prometo.

El auto manejó con rapidez hasta la comisaría, y cuando llegó pagué con los tres dolares que tenía en el bolsillo. Bajé y corrí hasta la oficina.

Luego de que todo se resolviera, pude verlos salir. Me sentí tan mal, tanto Alex como Jorge estaban marcado. alex tenía un ojo morado y la boca con una cortada, y jorge... ¡wao! Jorge estaba peor, tenía dos hematomas en cada mejilla, moretones por los ojos y su boca. Me sentí tan mal de verlos tan vulnerables. Los dos chicos que son tan importante en mi vida, hoy estaban heridos.

Pero estaba furiosa con alex, por sus insultos y su manera de hacer todo. Debía ponerlo de castigo.

-¡Alisa!- dijeron  los dos a la vez.  caminé hasta ellos,  pero Alex me esperaba a mi, y yo terminé ignorándolo por abrazar a jorge.

-¡oh Alisa! Cuanto siento esto- me  susurraba abrazandome.

-¡Lo siento tanto jorge! - le susurro.

-¡Alisa! - Exclama alex y me alejo de Jorge.

- No me hables alex, hice esto por ayudarte, pero...- mis ojos se llenaron de lágrimas - me has lastimado. ¡vamos Jorge!

Con el dolor de mi alma me había marchado. Me dolía a morir porque de verdad lo quiero, él no tiene la menor idea de cuanto lo adoro. Siempre ha sido mi amigo, mi protector, mi todo. Pero es tan complicado. Alex debería aprender de una buena vez por toda, que hay cosas mas importante en la vida.

.
.

Jorge me trajo a casa, bajamos del taxi y me tomó de la mano.

-Este ha sido un día horrible. Me siento tan cansado- susurra en un hilo de voz.

-vete
a la casa a descansar. Yo haré lo mismo- dije. Él  me toma del mentón y me obliga a mirarlo.

-Me gustas más que ayer, pero meno que mañana - y fruncí el ceño.

-¿Que significa?

-Que ayer me gustaba menos que hoy, pero hoy me gustas menos que mañana, puesto que mañana me gustarás más. - aquello hizo que me sonrojara y bajé la mirada.

-gracias.

Y me besó lentamente provocando miles de sensaciones, pero.... No dejaba de pensar en alex, me preocupaba su estado.

-¿Nos veremos después?

-Si.

Después de ese incidente papá me dijo que tomara un reposo de una semana y yo estaba tan enojada que no quería ir a la universidad. tenía un moretón  enorme y me hacía ver horrible.

Vi un mensaje de alex y decidí abrirlo.

Alex❤:
Perdón Alisa :'(
√√

¿Alisa?
√√

¡mierda la he cagado! Sé que te di un golpe pero no fue mi intención. Perdón perdón perdón :c  D': 
√√

No me dejes en visto por favor. Me ganaré tu perdón. Ya verás.
√√

Y se desconectó.

.
.

-¡Mamá! Si Alex viene, dile que no estoy o que me he muerto. No quiero ver a nadie ¿okey?

-Esta bien Hills.

Me encerré en mi habitación y me dormí.

.
.

Amanecí y bajé hasta la sala, pero mis padres no estaban ni mi hermana, ya se habían marchado media hora ante. Entonces tengo casa sola.

Desayuné, vi la tv, jugué play, subí y bajé la escalera,  y ni así sabia que hacer.

Alex me había dejado veinte llamadas perdidas la cual no contesté.



Una jodida semanas encerrada, y no encontraba que hacer. Jorge si queria verme pero se lo prohibi, estaba horrible ya que el moretón se había esparcido por mi mejilla.

De Alex no supe nada, mi madre dijo que la primera vez que vino le prohibieron regresar para que tomara descanso; orden que el cumplió.

Hoy, domingo, me encontraba súper aburrida, así que busqué un tutorial de como ocultar el maldito moretón. empecé cada pasos hasta que luego de una hora, pude ocultarlo. Me puse un vestido gris corto, de los que me regaló Alex, y unas sandalias negras. ¿Que haría? Ni idea, no quería seguir aquí.


Cuando todo estaba listo para yo irme no sé a donde, una jodida lluvia había caído.

¡muy bien suerte! Me quedé mirando por la ventana, y una tristeza me rondó. Extrañaba a Alex y a Jorge, esos dos idiotas son mi adoraciones. Supongo que Alex debía estar bastante ocupado con su nuevo trabajo de entrenador que no tenía tiempo de insistir, pero bueno, así son todos.


Cuando la lluvia había pasado,  tocaron el timbre y no tenía ganas de abrir, pero estaba sola con mi hermana y mis padres estaban en una reunión de trabajo. Así que me levanté y abrí la puerta.



-¡Alex!- exclamé al verlo mojándose y el agua cayendo sobre él. en su mano llevaba un ramo de... ¿ rosas de papel?

Que romántico.

-¿Me perdonas?- me extrañé de ver el agua cayéndole pero no estaba lloviendo detras de él.

Suspiré y lo miré seria.

- No sé, como que eso de ser romántico no se te da en nada.

-Perdon, quise que fuera perfecto. - soltó la manguera que hacia que cayera agua en su cabeza y no evité reirme. - no llovía y tuve que tirarme agua así como la peliculas cursis, y también no habían rosas hoy domingo, y tuve que ingeniármela- hizo puchero.

¿Lo perdono?

Enseñame a seducir © Terminado (Libro1)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora