Los miro, como siempre, y aunque quiero evitarlo también lo miro a él. Sé dónde lo ubicaron y también sé muy bien cómo se ve. Aunque no quiera, mi vista se detiene por un momento sobre ese rostro y después sigo girando sobre el escenario. Es mi momento de hacerlos creer, crecer y dar lo mejor, es hora de transformar lo que es su realidad en su gloria. Los miro, me acerco el micrófono y les hablo:
"Queridísimos jóvenes, representantes de las zonas, ejemplos frente al futuro y responsables de hacer prosperar en el planeta Beta a la nueva humanidad. Siempre es un honor recibirlos en las Competiciones Anuales. Hoy comienza el hecho histórico que los definirá para el resto de sus vidas. Ya sea que resulten ganadores o no, son los campeones de su generación.
"La gran mayoría de los chicos que tienen su edad no estuvieron a la altura física de llegar adonde están ustedes ahora, por ese motivo ya pueden considerarse lo mejor de lo mejor, porque lo son. Este mundo exige la excelencia, no hace falta que se los aclare, ya que ustedes vivencian día a día los obstáculos que presenta este planeta y su clima postatómico. La supervivencia es increíblemente complicada, nuestro medioambiente también, las condiciones climáticas superlativamente hostiles y cambiantes, la esperanza de vida mínima y nunca superable hasta el momento, más allá de los innumerables esfuerzos que realizan día a día los especialistas médicos del Sector Cero.
"Jamás en este sector nos consideramos superiores a ustedes, pero por un motivo genético y hereditario que hasta el día de hoy nos resulta imposible de explicar, como ya saben, porque nosotros también tenemos nuestras limitaciones, nuestra vida, la de los habitantes del Sector, se extiende más que la de ustedes en este planeta. Debido a ello nos sentimos, desde el Sector, los responsables de reclutar a la elite de habitantes de las zonas para que sean ustedes, los mejores, aquellos encargados de poblar el nuevo planeta, de llevar allí a la humanidad hacia un destino menos catastrófico que el que nos dejaron los antepasados de este planeta en el que nos tocó nacer.
"Beta fue poblado desde sus inicios, como saben, con los ganadores de cada una de las competencias. Ese planeta nuevo, casi virgen, al que un cuarto de ustedes llegará en un lapso de tiempo breve, presenta condiciones de vida muchísimo más favorables que las del nuestro. No por ello la vida allí es pura simpleza. Desde hace casi dos siglos y medio se está preparando ese planeta porque, como ya saben también, al nuestro le faltan unos miles de años para volver a ser lo que era antes del Desastre, si es que ello es posible. Es por ese motivo que se realiza su entrenamiento a lo largo de toda su vida y que sólo llegarán a destino los más aptos de los mejores: porque la tecnología desarrollada al día de hoy así nos lo permite y porque se necesita de una aptitud física suprema para que puedan sobrevivir allí y, a su vez, mejorar ese ambiente para los futuros habitantes. Condiciones de gravedad que no cualquiera podría soportar por mucho tiempo, un medioambiente muy diferente del nuestro que requiere de unas condiciones de excelentísima capacidad de adaptación, pero un mundo en el que el aire y la lluvia no son perjudiciales... un mundo en el que cada porción de superficie debe ser habitada por aquél que merezca... no, mejor dicho, que pueda aprovechar al máximo de esa parcela que le es encomendada.
"Este trabajo que realizamos desde el Sector Cero y la preparación que realizan los jóvenes de las zonas (y los mayores que los reproducen y crían) para ganarse su lugar en el nuevo mundo es llevado adelante en beneficio de la posteridad: desde el Sector no consideramos que sea justo que ninguno de nosotros disfrute de ese nuevo planeta, ya que tenemos por genética la posibilidad de tener una larga vida en éste y ustedes serán los encargados de dejar ese planeta listo, junto con sus antecesores de competencias pasadas y sus sucesores, de las futuras, para que allí se pueda instalar la nueva humanidad. Beta no es el desierto violento que era en las primeras visitas (en los principios de nuestros años posteriores al Desastre Atómico), tan parecido a lo que es nuestro actual planeta, pero tampoco es lo que supo ser nuestro planeta Alfa antes del Desastre Atómico. Es un mundo en preparación, no para su supervivencia, sino para la supervivencia y desarrollo de nuestra especie. Es un proyecto a futuro y una gran responsabilidad para ustedes. Por ese motivo se requiere de una incuestionable aptitud para ello.
"No quiero aburrirlos explicándoles aquello que les explicaron durante toda su educación, pero todo confluye y se justifica en este momento tan único de sus vidas, por ello me tomo la libertad de repetírselos por última vez. Que estén aquí no es casualidad, que sean ustedes no es casualidad, lo que deben hacer no es casualidad, es la supervivencia de nuestra especie, sé que llevarán esa responsabilidad adelante con honor y con la pureza y consciencia que son necesarios, para ello fue todo su entrenamiento.
"Todos los datos de los avances que se conocen sobre el futuro hogar de una cuarta parte de ustedes los recibimos de nuestros aviadores, los únicos que ocupan un lugar en la nave que los dejará en el planeta Beta y que, luego, volverán a Alfa. Lamentablemente, nuestra tecnología y la generada en Beta aún no pueden traernos registros visibles del planeta nuevo, porque algo interfiere en las señales y mecanismos de las grabadoras y filmadoras, pero los ojos de esos aviadores son más que suficientes. Además, ellos traen consigo cartas y diarios que son enviados por los ganadores de Competiciones pasadas, es decir, por los actuales habitantes de Beta, a sus familias y amigos.
"Les espera un mundo arduo pero maravilloso, un espacio en el que podremos vivir cuando algún día el suelo que estamos pisando ya no nos pueda albergar, otro suelo más vivo en el que la humanidad podrá sobrevivir sin importar lo que suceda aquí. Espero no llenarlos de presión sino de confianza y esperanza para que tanto los que ganen como los que no lo hagan estén orgullosos de los últimos pasos que realizarán en este suelo. Sé que darán lo mejor de cada uno como individuos, como grupos zonales y como la generación a la que representan cuando estén en la nave. Hoy me toca a mí, como desde hace tantos años, ser el que habla y se despide ante ustedes; tengo la esperanza de que en algún momento sea alguno de ustedes el que dé una charla como ésta, pero de bienvenida, cuando la humanidad definitivamente se instale en Beta.
"Ahora, a prepararse que estamos próximos a la apertura. El mayor de los éxitos para ustedes, queridos jóvenes, sé que no nos van a defraudar".
Al finalizar, puedo no mirarlo a la cara, evitar cualquier indicio de conocimiento o debilidad de mi parte... por primera vez siento debilidad o creo que eso es lo que siento.

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Algo parecido a la lluvia
Science-FictionEn un futuro lejano, distópico y post-apocalíptico, el mundo presenta un clima arbitrario y peligroso y, en él, la sociedad se encuentra organizada de un modo muy diferente al de nuestros días, dividida en cinco comunidades separadas. Un grupo reduc...