-Hola. -Dije avergonzada.
La chica rubia me saludó con la cabeza, sonriendo como sin ganas y se levantó.
-Os dejo solos. Voy a tomar algo. Hasta luego, Cal.
-Hasta luego.Me despedí de ella con una mueca y fui hacia donde estaba Calum. Me senté a su lado. Y lo miré. Tenía los codos apoyados en las rodillas dobladas y no se estaba riendo. Estaba guapo tan serio pero su sonrisa me gusta más.
-Creía que no bebías. -Me dijo mirando el vaso que llevaba en la mano. Yo lo tiré al cesped.
-Y no bebo. Me lo han encasquetado antes. -frunció los labios y asintió. Parecía enfadado. Aunque nunca lo había visto enfadado. -¿Te he chafado el plan?- Le pregunté, refiriéndome a la chica.
-¿Qué? ¡No! Es Holly, es la novia de Ash. ¿En qué estabas pensando? -Bufó y sacudió la cabeza como si estuviera indignado. -¿Y tú qué? ¿Por qué no te estás liando con Dan? -Lo miré boquiabierta e hice el amago de hablar pero no me dejó- Sí, sí, te he visto bailando con él, habéis hecho muy buenas migas. - Se levantó y elevó el tono de voz un poco- Puedo darte su número, si quieres.Me agarré con los dedos índice y pulgar el tabique de la nariz y reprimí una sonrisa. Después me levanté y me acerqué a él con los brazos cruzados.
-Estás celoso.
-¡¿Cómo no voy a estar celoso?! Me dijiste que te llamara Daniela, tardaste una semana en llamarme por mi nombre, a mi me dices que no bebes y el te da ron miel y lo aceptas. Yo me he esforzado para que me pongas esa sonrisa. Y a él es lo primero que le has hecho. Está claro que te gusta.-Clarísimo. -Dije irónica. -Pareces que solo ves lo que te da la gana, Calum.
Él le dio un par de patadas a las piedras del suelo con los brazos cruzados y mordiéndose el interior del labio.
-Soy un gafe. Dime, ¿qué tenéis las mujeres contra mi? ¿Tanta cara de mejor amigo tengo?
-Fuiste tu el que dijiste que solo éramos amigos. Ayer, lo dijiste ayer.
-Y es verdad. Es lo que soy. No lo que quiero ser.Me acerqué unos pasos más hasta que mis brazos cruzaron chocaron con su estómago y tenía que doblar el cuello hacia arriba para poder mirarlo a los ojos.
-No quiero que seas mi amigo.- Le dije con apenas voz.
Calum alargó las manos por mi cintura hasta que ambas se encontraron en mi columna vertebral. Me acerqué más a él chocando nuestras rodillas y agarrándolo del cuello. Estábamos tan cerca que podía admirar como se ensanchaba su pecho al respirar. Nos miramos fijamente a los ojos y segundos después me puse de puntillas, acaricié su labio inferior con él mío y vi como Calum cerraba los ojos. Su boca invadió la mía. Nos besamos. Al principio, lento, después, con desesperación, como luchando por separar la distancia inexistente entre nosotros.
Posiblemente escribiría sobre eso más tarde.
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Dandelion - Calum Hood
Fiksi PenggemarPasaba el rato soplando dientes de león hasta que Calum llegó a mi vida.