Amor en tiempos de Libertad #Editando

Sorpresas a la orden del día Pt.3

El cielo se tintó de negro y miles de estrellas lo escarcharon dándole brillo, la luna estaba llena esa noche y brillaba tan espléndida como siempre, una noche hermosa aunque algo fría. Erick y yo habíamos estado dando vueltas por los alrededores, el tiempo corría demasiado rápido con él y eso era bueno en cierta forma, decidimos tomarnos unas fotos instantáneas para recordar el momento, hasta ahora todo iba bien.

-Recibí un mensaje de Dante- soltó mientras caminábamos, me sorprendió escuchar el nombre del Rubio aunque traté de disimular mi reacción y seguir caminando para evitar que Erick se sintiera mal.

-¿Que te dijo?- dudé con interés aunque tratando de disimularlo, me extrañaba que yo no hubiese recibido nada, tal vez era parte de su loca idea de hacerme salir con el moreno.

-Los abogados de su padre lograron retirar la demanda.

-Eso es genial, ¿Como lo hicieron?- Alina me había demandado por daños u perjuicios, no podía salir de la ciudad y Denia presentarme ante un tribunal para defenderme, al menos hasta antes de ese mensaje. Estaba feliz y tranquila de haber salido de todo airosa aun así algo no me terminaba de cuadrar.

-Supongo que ellos sabrán, la cosa es que eso no es todo lo que dice el mensaje- sabía que debía haber un pero, me detuve para poder escuchar con atención, estaba tan nerviosa que no podía pensar en nada que no fuese Alina, ¿Por qué hacía estas cosas?

-¿Que más decía?

-Dante cree que debes retirar la orden de alejamiento y alegar que todo fue una confusión.

-¿¡Que!? ¿Eso dijeron los abogados? ¿Acaso ellos saben que Alina destruyó mi casa? Esa chica es peligrosa, no puedo retirar la orden- en un principio no quería colocarla pero ahora me parecía necesaria.

-No, los abogados no creen eso.

-¿Entonces? No lo entiendo.

-Bri, Dante quiere que retires la demanda, me escribió en el mensaje que te lo pidiera como un favor personal- Erick nunca mentía así que no valía la pena dudar de sus palabras, ahora sólo no entendía porque Dante quería que quitara la orden de alejamiento, él había estado en mi departamento y sabía que su ex había contratado gente para que me hiciese daño o lo que sea.
-No lo haré- dije sin mirar a Erick, sólo pensaba en las razones que Dante tenía para hacerme una petición tan fiera de lugar. -No lo haré- repetí está vez con más decisión en mi voz, tal vez ya se había resuelto lo de la demanda pero eso no significaba que Alina dejará de atosigar. -Puedes decirle que no lo haré, ni siquiera porque él me lo pida, es imposible Erick, esa chica me odia, quien sabe que pueda pasar más adelante- el silencio de Erick se sentía como una desaprobación, ¿Él también pensaba que debía retirar la demanda? -Quiero irme ya- suspire tratando de calmarme ya no quería estar allí.

-Bri relajate, no debes hacer nada que no quieras- el moreno intentó calmarme colocando su mano en mi hombro, lo impedí antes de siquiera llegará a tocarme, pude ver que se sintió mal por mi reacción pero debía entender, estaba molesta.

-Dame una explicación razonable Erick, es obvio que tu también piensas que debo retirar la orden. ¿Es que acaso no entienden el miedo que sentí?

-No importa lo quenyo crea sino lo que tú consideres necesario. Pero quiero que seas sincera contigo mismo Bri, esa orden de alejamiento quedara en el expediente de Alina, eso puede dañar su autor profesional, además se sincera contigo misma, no estás molesta por quitar la orden, estas molesta porque Dante te lo pidió y porque ella es su Ex. No entiendo en realidad que es lo que le ven a ese rubio, pero tú eres mejor que ambos, eres mejor que todos Bri, no tienes que actuar como Alina llevada por los celos.