Capítulo 17

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-¡Alex! ¡Oh por Dios! ¿Cómo estas, mi niña?- salió Nessy de la casa con sus brazos abiertos.

-Bien.- contesté.

Me estrujó entre sus brazos y después me soltó.

-¿Cómo se te ocurre irte así cómo así? ¡Pudo haberte pasado algo!- me regañó.

-Estoy bien. No pasó nada.-

Entramos a la casa y me llevaron hasta la sala.

-¿Qué fuiste a hacer a la casa de plata?- preguntó David algo alterado.

-¿Los niños?- pregunté.

-Están jugando arriba.- contestó Sue cerrando las puertas del living.

Todos me miraban esperando una respuesta.

-Fui porque hace un mes que vengo teniendo sueños raros...-

-¿"Raros"? en qué sentido.- pregunto Josh, mate de Ámbar.

-Siempre sueño que los matan...- miré mis manos y estas temblaban.-... a todos.- dije en un hilo de voz.

Gale se acercó a mí y me abrazó. Era lo que más necesitaba, un abrazo de él, sentir su calor y cariño.

-¿Quiénes?- preguntó Eric.

-Yo... no.... No lo sé.- mi voz salía entrecortada y sentía un nudo en la garganta que no me dejaba hablar.- Siempre veo al mismo tipo que intentó matarme hace meses.- dije finalmente.

-¿El de ojos verdes?- preguntó Hannah, a lo que asentí.

-¿Es por eso que siempre te despiertas tan temprano?- preguntó Gale. Volví a asentir.

-Creo que ya sé lo que intentaron hacer.- interrumpió Nessy entrando al living. Todos, inclusive yo, la miramos expectantes.- Ten cariño, tomate esto, te hará sentir mejor.- dijo tendiéndome una taza de chocolate.- Ya sé que no te gusta, pero debes tomarlo.- dijo al ver mi cara de asco. Tomé un sorbo y pude sentir cómo su calor me reconfortaba.- Bien. Ahora, lo que ese vampiro hizo fue meterse en tu cabeza.-

-¿Qué? ¿Cómo?- pregunté.

-Nos contaste que él te mostró una visión ¿No?-

-Así es.-

-Eso le bastó para hacerlo.-

Todos quedamos sin entender lo que Nessy decía.

-¿Podrías explicarte, abuela?- pidió Ámbar.

Nessy resopló como si no fuera tan difícil de entender.

-Él no es un vampiro común...-

-Es un híbrido.- susurró Josh con la mirada perdida.- ¡Eso es!- exclamó levantándose de la silla.- Se metió en tu cabeza, te mostró todas esas cosas que tu llamas "pesadillas" para que no pudieras dormir y por lo que ví, también estabas perdiendo el apetito ¿No es así?- preguntó a lo que asentí.- Te debilitó, mentalmente y físicamente, y aprovechó que saliste para atacarte.-

-No lo podría haber explicado mejor.- contesto Nessy.- Pero lo que no entiendo es... ¿Qué hacías en la casa de plata?- preguntó con el ceño fruncido.

-Me sentía desprotegida y quise ir por algunos elementos que me serian de mucha ayuda.- contesté.

-¿Qué clase de híbrido es, mamá?- preguntó David.

-Brujo y vampiro.- contestó ella.

Todos quedaron helados, excepto yo. Sabía todo sobre ellos y lo que más necesitaba era tener una mente impermeable y ya sabía cómo hacerlo.

-Lo que no entiendo es ¿por qué se las tomó conmigo?-

-En la visión te viste a ti misma matando a una chica ¿no?- preguntó Nessy.

-Si.-

-Tal vez era alguien especial para ese monstruo.-

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Refregué mis ojos, que comenzaban a cerrarse. Miré la hora y eran la una de la mañana.

-Deberías ir a descansar.- dijo Gale depositando un beso en mi mejilla.

Bajé mi vista y traté de ahuyentar esa idea que se veía tan tentadora.

-Nada malo va a pasarte.- volvió a decir.

-Adelántate tú. En un minuto subo.- dije con una débil sonrisa.

-¿Lo prometes?-

-Lo prometo.- esbocé una pequeña sonrisa verdadera.

-Te amo.- dijo, besó mi frente y salió de la biblioteca.

Me quedé unos minutos más con el libro de "Híbridos. Vol. II". Y cuando me disponía a dejar la biblioteca, mi celular comenzó a sonar.

― Diga.- contesté sentándome de nuevo en el sofá

― Hola, Alex. Soy james.-

― ¿James? ¿Qué haces llamándome tan tarde?-

― Estuve pensando que tal vez podríamos salir a tomar un café y hablar, como en los viejos tiempo ¿Qué te parece?-

Miré mi pierna y....

― Me parece genial, pero por ahora no. No creo que sea conveniente que salga así con la pierna lastimada.

― Está bien. Cuando quieras, llámame y nos juntamos.-

― Por supuesto. Gracias James.-

― Que descanses.- se despidió y cortó.

Me quedé unos minutos más con el celular en la mano mirándolo y escuchando mi propia respiración.

Hace unos años atrás jamás imaginé que todo esto me pasaría. ¿Ser una Murdok? Eso no estaba en mis planes, mucho menos ser la Luna de una manada. Pero aquí estoy, luchando por mantener a los que quiero con vida.

Un ruido en la ventana hizo que saltara del sofá. Caminé hasta ella y no había nada, solo una rama que se había desprendido del gran abedul de Nessy.

Me alejé de la ventana despacio, giré sobre mis talones y salí de la biblioteca, no sin antes darle una última mirada a la ventana.

Subí las escaleras hasta llegar a nuestro cuarto, me recosté al lado de Gale pensando en todo lo que tendría que hacer cuando mi pierna sane.

-¿Cómo te sientes?- susurró Gale, medio dormido.

-Bien... creo.-

-Cuando te recuperes vamos a ir a la casa de plata a buscar todas tus armas.-

-Es... en serio.- pregunté perpleja.

-Sí. Pero te vamos a acompañar.-

-Está bien.- acepté.

-Lamento... lo de hoy a la mañana.-

-¿Disculpa?- pregunté, ya que no lo estaba prestando atención a él sino a la ventana.

-Cuando te ví con Eric.-

-Ah, eso. Olvídalo.-

-¿Por qué no estas molesta?-

-Porque ya me acostumbré a tu personalidad. Estuve con una bestia antes de ti, ya estoy curada de espanto. ¡Ojo! Que eso no quiere decir que la acepte.-

Él soltó un pesado suspiro y me abrazó, procurando no tocar la herida.

Dulce Destino [Terminada]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora