-¿Cómo hacen para diferenciarlos?- les pregunté a los gemelos, quienes me miraron divertidos.
-Tom.-
-Cris.-
Se presentaron.
-No es cierto.- dijo Dann, mirándolos con desaprobación.- Tu eres Tom y tú eres Cris.-
-¿Cómo te diste cuenta?- preguntó Tom.
-Por sus caras.- aclaró Dann.
-Eres muy listo.- bufó Cris.
-Mira, Cris, Tiene un M107 BARRETT semi-automático.- exclamó Tom, señalando al francotirador.
-¿Cómo te diste cuenta?- le pregunté en un susurro a Dann refiriéndome a la verdadera identidad de los gemelos.
-Tom tiene una pequeña cicatriz en su mejilla derecha, es muy minúscula, pero si los observas con atención te darás cuenta.- susurró mirando a los gemelos que miraban el francotirador.
-Escuchen...- dije llamando la atención de mis dos hermanos.-... estuve mirando el cuaderno que me diste.- mire a Dann y éste asintió.- Cayó una foto y en el dorso había una inscripción...- traté de recordar el nombre de la mujer.-... de una mujer que decía ser mi madrina.-
-¿Rachel?- preguntó Dann, a lo que asentí.
-Sí, es tu madrina. Pero hace mucho tiempo que no la veo, creo que desde que papá y mamá me dejaron en la casa del abuelo.- habló John.
-¿Jamás trató de contactarse con ustedes?- pregunté y ambos negaron.
-Creemos que no está viva.- me respondió John.- Lo lamento, Alex.-
-Está bien.- susurré mirando hacia la ventana.
En ese momento mi celular comenzó a sonar. Miré la pantalla y su nombre saltó en ella.
-"Gale" ¿Es tu esposo?- preguntó Dann mirando el celular.- ¿El de ojos grises?-
-Si.- corrí el dedo por la pantalla ignorando su llamada.
-¡Ohhh! ¡Chica mala!- exclamó feliz mi hermano.
-Es un idiota.- dije guardando el celular, pero este comenzó a sonar nuevamente.
-E insistente.- masculló él.
Cuando ví la pantalla ví que era Ámbar.
-Linda chica ¿quién es?- preguntó mirando el celular.
-Mi cuñada y no, no está disponible.- dije y ví como su cara de enamorado se iba desvaneciendo.
-Igual me gustan las pelirrojas y de preferencia que no sea una loba.-
-Idiota.- dije entre risas.
― Hola.- contesté.
― ¡Amor! ¿Dónde estás?- la voz de Ámbar salió más grave de lo normal.
― ¿Gale?-
― Sí. ¿Por qué ignoraste mi llamada?-
― Quiero estar sola un momento. ¿de acuerdo?- Gale ya empezaba a irritarme.
No pude escuchar nada más, solo la estática y su respiración.
― Está bien.- dijo finalmente.- Cualquier cosa llámame.-
No le respondí y corté la llamada.
-¿Problemas en el paraíso?- preguntó John.
-Sí, no lo sé.-
-Esto es raro, jamás me ví a mi mismo hablando con mi hermana sobre corazones rotos. Creo que lo que un hermano mayor trata de hacer es romperle la cara al imbécil que le rompe el corazón ¿no?- preguntó y yo asentí.
Miré la hora en mi reloj de muñeca y ví que había pasado tres horas en la casa junto a mis hermanos y sus amigos.
-Tengo que irme.- dije levantándome de mi silla.- Pueden quedarse pero por favor no hagan tanto lío. Si la manada se entera que aquí hay gente van a empezar a hacerme estúpidas preguntas.- les pedí.- Y no toquen nada, esto va para ustedes dos, Tom y Chris.- dije señalándolos y mirándolos severamente.
Salí de la casa y caminé tranquilamente por el bosque con las manos en los bolsillos. Pasé por el lago y le dí una ligera mirada al manzano, hace mucho que no degustaba uno de sus frutos.
-Veo que saliste a dar un paseo.- Fred salió de atrás de un árbol, bloqueándome el paso hacia la mansión.
-¿Qué quieres?- mascullé.
-Hablar contigo, cuando entraste quise acercarme pero saliste de nuevo. Salí detrás de ti pero corrías con tanta velocidad que te perdí de vista.-
Pasé por su lado chocando fuertemente su hombro.
-Bien, creo que no te agrado mucho ¿a qué no?- preguntó pero lo ignoré completamente.- Bien, creo que en esta conversación solo hablaré yo. ¿Te acuerdas que esta mañana yo te hablaba de Gale pero el idiota de Eric entró y nos interrumpió? Bueno, quiero retomar esa charla. Te contaba que Gale tuvo una novia a la que le entregó todo su amor, la familia adoraba a la pareja, pero como en todo cuento de hadas tuvo que ocurrir un horrible hecho, la familia de la novia de Gale tuvo que volver a su país natal, Grecia. Ambos sufrieron mucho...-
-¿A dónde quieres llegar con todo esto?- pregunté, rechinando los dientes.
-Shhhhhh... espera al final.- me contestó.- Cuando la chica partió, ellos hicieron un juramento de sangre.-
-¿Juramento de sangre?-
-Sip, que consistía en que cuando se volvieran a ver tratarían de reavivar su amor.- lo miré extrañada.- A puesto a que te estas preguntando quien es esa chica ¿no?-
En realidad no me lo estaba preguntado, ya lo sabía...
-Es Jade, mi hermana mayor.-
Salí corriendo hacia la mansión pero sentí que me jalaban del pelo.
-No puedo dejarte ir. Lo siento pero debo sacarte del mapa.- repuso él con una sonrisa.
Levanté mi rodilla y lo golpeé fuertemente en sus bajos.
-¡Maldita perra!- masculló con ambas manos en su miembro mientras caía de rodillas sobre la nieve.
-La perra es tu hermana.- dije estampándole un puñetazo en la quijada.
Lo dejé tirado y corrí hacia la mansión, cuando abrí la puerta me encontré con Nessy.
-Gale ¿dónde está?- le pregunté.
-No lo sé. ¿Pasó algo malo?- preguntó, pero la ignoré y atravesé la sala a grandes zancadas hasta llegar a la cocina.
Cuando entré no me encontré con la mejor de las imágenes.
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Chan!! Los dejo con la intriga..... ¬¬