Estaba haciendo la cena cuando en un descuido mi cuchillo zafó y me corté el dedo índice.
-Carajo.- susurré y fuí al lavabo para limpiarme el dedo.
-Estás distraída.- dijo Gale detrás de mí.
Volteé y traía con él un botiquín de emergencia.
-Por supuesto que no.- chillé.
-Estas a la defensiva. Haber.- dijo sentándose en una de las bancas.-... déjame ayudarte con eso.- tomó mí dedo y comenzó a desinfectarlo.
-Puedo hacerlo sola, cariño.- hablé dulcemente.
-Ya lo sé, pero me siento como un inútil sin hacer nada por ti.-
-¿De qué hablas?-
-De que eres realmente buena en todo lo que haces, cuidas a los niños, cuando ellos se lastiman o sufren por algo siempre estás ahí para aliviar su dolor, cocinas de maravilla, peleas de maravilla y....- se acercó a mí oído.-... haces el amor de maravilla.- susurró en el.
Golpeé su hombro fuertemente y ambos comenzamos a reír.
-Pero, ya en serio ¿Qué te tiene tan preocupada?-
-La aparición de Louis y ese chico.-
-Estas a salvo aquí.- dijo él tomándome por los hombros.
-No quiero que nadie salga herido por mí culpa.-
-Nadie va a salir herido.-
-¿Y los niños?-
-Ellos van a estar bien.- tomó mí mentón y me obligó a que lo mirara.- Todos vamos a estar bien.- dicho eso me besó en los labios.
Era increíble cómo me ponía este hombre con tan solo tocarme. De algo estaba segura y era en que él, además de dar los mejores besos del mundo, era el verdadero amor de mí vida.
-Te amo.- nos dijimos los dos cuando nos separamos.
Él me ayudo a terminar de hacer la cena y cuando nos sentamos a comer podía sentir que algo le preocupaba a Amy.
Miré a Tyler quien nos contaba emocionado todas las cosas que había encontrado en el bosque con su tía Hannah.Hannah y Tyler eran todos unos rastreadores, ella lo llevaba al bosque y recolectaban toda clase de insectos, los cuales después disecaban y los ponían en un gran libro que tenía Hannah.
A Amy, por su parte, eso le aburría, ella prefería jugar a la lucha o entrenar con su arco.
Ambos eran niños de acción pero a Tyler le interesaba la naturaleza.
-Algo le preocupa a Amy.- dije mientras lavaba los platos.
Los niños ya se habían ido a sus cuartos.
-Deberías hablar con ella.-
-¿Por qué yo? Tú también eres su padre.-
-Pero tú tienes más tacto con ello, además ella es una chica y ya sabes...-
-Solo tiene seis años.- exclamé.
-Ya lo sé, pero tú eres más sensible.- iba a protestar pero él me interrumpió.- Recuerda quien es la bestia entre nosotros dos.- dijo él levantando su mano.
-Podrías ser una bestia con corazón.- dije lanzándole la esponja a la cara.
-Eso no duele.- se burló.- ¡Auch! Eso sí.- exclamó ante el puñetazo que le proporcioné a su brazo.
Subí las escaleras hasta llegar al cuarto de Amy.
-Hola, cariño.-
-Hola, ma.- dijo ella bajando el libro que estaba mirando.
-¿Podemos hablar?- pregunté y ella asintió.- ¿Te pasa algo? Es decir ¿Estas molesta conmigo o con papá o con tu hermano?-
-No.- respondió ella.
-Sabes que puedes contarme lo que sea. Porque además de ser tu madre también soy tu amiga. Puedes confiar en mí.-
-Cuando estábamos en el súper, hoy, me sentía rara.-
-"Rara" ¿en qué sentido? ¿Descompuesta? ¿Mareada? ¿Triste?- pregunté y ella negó con la cabeza.
-Tenía muchas ganas de llorar y quería que papá estuviera ahí conmigo.-
-¿Extrañabas a papá?-
-No, porque sabía que lo volvería a ver. Pero tenía mucho miedo.-
-Por eso no soltabas a tu hermano.-
-Quería que él me protegiera.-
-Linda.- dije poniéndome a su lado y abrazándola.- Yo estaba allí, sabes que jamás permitiría que te hagan daño.-
-Ya lo sé. Por eso después me tranquilice.- dijo mirándome a los ojos.
Sus ojos grises, iguales a los de su hermano, que a su vez son iguales a los de Gale. Estos niños no tienen nada de mí, solo mis habilidades para la lucha, pero fuera de eso son idénticos a Gale, los dos.
-¿Qué te parece si mañana salimos a entrenar con nuestros arcos al bosque? Y después vamos visitar a los abuelos.-
-Me encantaría, mamá.- contestó ella con una reluciente sonrisa.
-Descansa, cariño.- dije besando su frente.- No olvides que te amamos.-
-Ya lo sé, me lo repiten todo el tiempo.- dijo riéndose levemente.
-Es para que se te grabe en la cabeza.-
Sonreímos las dos y salí de su cuarto.
Sentí unas grandes manos en mi cintura cuando iba por el pasillo.-¿Cómo salió eso?- preguntó Gale en mi oído.
-Muy bien y no gracias a ti.- traté de sonar molesta.
-¿Qué te parece si arreglamos este asunto en el cuarto?- dijo volteándome para verlo a la cara.
Sus ojos grises estaban un poco oscuros.
-Tal vez. Aunque estoy muy cansada para hablar.- dije soltándome de su agarre y caminando a nuestro cuarto.
-Vas a cambiar de opinión, linda.- dijo él tomándome de la cintura y poniéndome en su hombro.
Me dejó en el suelo, cerró la puerta con seguro y comenzó a besarme dulcemente mientras nos dirigíamos a la cama.
-Te amo.- susurró, mirándome a los ojos.
Agarré su cara y lo acerqué nuevamente a mí.
-----------------------------------------------
Louis en multimedia.
******************************
Comenten y voten si les gusto. =*