La Cripta de Thresh Vol.2

Parte 201: Orgullo de Rakkor

NOTA: Está serie es una continuación de "La Cripta de Thresh", serie que Wattpad no me permitió terminar entera y que por ello divido en dos volúmenes. 

Arff.... ¿sigo vivo? ¿Cómo es eso posible? La lanza me atravesó....

Estás vivo porque yo lo he querido así...

Me prometiste que la cuidarías... me prometiste que no la dejarías sola...

Te lo prometí y el Protector nunca rompe una promesa...

El artesano de la guerra le había pedido que defendiera a Cassiopeia de la Venganza, la Sangrienta que se había encargado de dejarle en ese estado.

Así mismo este ente era el Protector, el único Sangriento que no pensaba en destruir a Thresh. Fue él quien señaló a la lamia, deslizándose a gran velocidad.

Ahí está ella... sana y salva...

"Cassiopeia... qué haces..."

"¡Pantheon!"

"Vengan... Venganza...."

El carcelero apareció acompañado de la hacedora de viudas, momento en que el gladiador se desmayó por las heridas causadas por su enemiga.

Cuando despertó estaba en una habitación de enfermería. Delante suya una figura de fuego sentada en una de las sillas, aparentemente dormido y con los brazos cruzados.

"¿Brand?" - se extrañó al verlo

"Inssisstió en quedarsse" - le habló Cassiopeia - "Inclusso amenazó a los médicoss"

"¿Les amenazó?"

"Fue basstante divertido de ver..."

"He de suponer que mis heridas no eran tan graves"

A su lado se encontraba una silla con su peto de hierro, su yelmo y capa.

"Dijeron que era un milagro que ssiguierass vivo"

"Los dioses me tienen bajo su ala"

"No sseass tan idiota..."

La serpiente le miraba cruzada de brazos con enfado, frialdad y un cumulo de emociones negativas hacía él. Obviamente estaba muy molesta.

"Tal vez sea por mi fuerza de volun..."

"¿Por qué lo hicisste?" - le preguntó finalmente

"No podía permitir que murieses, no me lo hubiera perdonado"

"¿Por qué? Ssoy una lamia que intentó...."

"Cassiopeia, ya hemos hablado de estos temas antes"

"........"

La atmósfera estaba cargada de una tensión enorme, mezclada con tristeza.

"Te dije que pensaba sobre ti... sobre que fueras un "monstruo" y lo que hiciste... sobre todo lo que hemos pasado..."

"Esstúpido, no deberíass ssacrificarte...."

"¿Por la mujer a quien amo?" - le interrumpió en seco

Cassiopeia ya había visto una especie de confesión suya en el momento en que la besó, pero este impacto fue algo más grande de lo que esperaba.

"Soy un Rakkor pero... no soy un soldado sin mente o sentimientos..."

"......."

"Al final del día soy tan humano como cualquier otro... como tu..."

"Y tuss ssentimientoss ¿Cuanto tardarán en irsse?"

"Tal vez cuando me entierren en Targon..."

"¿Y ssi no loss acepto?" - preguntó intrigada

"Volveré a Rakkor, aunque eso signifique no desposarme jamás" - le dijo mientras se levantaba - "Y espero que con tu perdón por lo ocurrido recientemente"

"No piensso perdonarte" - le dijo fríamente

Su orgullo estaba manchados. Ahora Pantheon solamente pensaba en que haría con su vida ahora que no merecía ser el aspecto de la guerra...

"Porque yo también... te... aprecio"

"¿Aprecio? ¿En qué momento he dicho eso?"

"¡Pero ssi lo hass dicho tu! ¡Esstúpido!"

"Yo he dicho que te amo, no que te apre... espera, no puedes admitirlo"

"¡Por ssupuessto que no puedo! ¡Ess demassiado denigrante para mi decir algo assí!"

"Pero lo piensas...."

"¡Claro que lo piensso! ¡¿Nunca presstass...."

Pantheon la agarró de su cintura de serpiente y la acercó lo suficiente para darle un apasionado beso, esta vez con una mayor calidez y entusiasmo que la anterior.

La lamia también parecía sentirlos pues por primera vez en mucho tiempo pudo esbozar una pequeña sonrisa mientras le devolvía el beso.

"Tu sonrisa, hacía tiempo que no la veía..."

"Quizáss no tenía motivoss para mosstrarla antess..."

Ahora que ella no está sola... podré protegeros...