Parte 318: Clases de oscuridad

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Un hechicero conocido como el Oscuro apareció en las calles de Zaun, buscando atraer la atención de Thresh y derrotando en el proceso a Ekko.

El nigromante acabó apareciendo junto a su esposa, con intenciones hostiles. No obstante el humano parecía mucho más calmado que ellos.

"Llevaba mucho tiempo esperando conocerte, Thresh"

"¿Tantas ganas tenías de encontrar a la muerte?"

"Thresh, querido, déjame disfrutar un poco a mi también"

"Seguro que disfrutas mucho de tus carnicerías, pero este cetro y mis habilidades de magia dicen lo contrario"

"¿Crees que puedes derrotarme?" - preguntó extrañado

"No, pienso que puedo divertirme un poco"

"Ese tipo raro me cae bien" - comentó Evelynn

"Piénsalo, he vencido a un chrononiño y a una diosa en una sola tarde..."

"Bueno, yo no soy un niño y tampoco una ninfa..."

El fantasma de negro lanzó su hoz y cadena contra el hechicero, quien simplemente se limitó a esquivarlo con la misma facilidad que la Linterna.

"Esta vez no, niño malabares"

"¿Mmm? ¿Otra..."

La hoz se enganchó en una farola, momento en que Evelynn se subió a la cadena y corrió hacia el hechicero. Este sin prisas tocó la cadena.

"¿Te suena lo que es la Tensión Eléctrica?"

"¿Ha dicho eléctrica?" - repitió la diablesa

"Jejeje...."

Una descarga de electricidad azul recorrió la cadena hasta llegar a la campeona, que fue derribada y cayó al suelo.

"Hay varios campeones a los que he estado observando"

"¿Algo que hayas aprendido de mi?"

"No hay nada en ti que me interese, al menos en habili...."

Pero el brujo fue golpeado por un puñetazo a gran velocidad propiciado por Evelynn, mientras Thresh avanzaba con su propia cadena.

"Yo tengo un marido..." - dijo reincorporándose

"Arff... buen golpe..."

"Cállate de una vez"

"¿Acaso he logrado irritar a la Hacedora de Viudas?"

El carcelero llegó e intentó golpearle con su arma, solo para ser detenido por un hechizo de Barrera que le detuvo.

"Te noto un poco agresivo... y eso me gusta"

"La gente como tu me saca de mis casillas"

"¿Porque daño a gente? Señor carcelero"

"No, porque estás haciendo mi trabajo" - dijo fríamente

Thresh volvió a golpear la barrera, pero esta vez fue destruida, no por el espectro sino por las Púas de Odio que había usado Evelynn.

"Mira por los dos lados"

"Aún tengo más trucos" - aseguró usando su cetro

En una intensa luz amarilla, el humano se colocó detrás del nigromante.

"¡Prender!" - gritó mientras tocaba a Thresh

"¡Arrrghhh!"

"¡Thresh!"

El carcelero estaba ardiendo, aunque eso no era realmente un problema para el muerto viviente, que se dio la vuelta y agarró a su oponente de las cadenas de su chaqueta.

"Voy a destriparte...."

"¿No quieres que hable de la Linterna?"

"¿Cómo has dicho?"

"La Linterna... ¿no quieres saber de él?"

Esto hizo que el Emisario del Mal dudara por un momento, mirando de reojo a su mujer.

"¿Por qué crees que no he usado mi truquito del tiempo?"

"¿Qué sabes de la Linterna?"

"Si quieres saberlo tendrás que llevarme a la cárcel o algo, no aquí"

"¡¿Te crees que estás en posición para negociar o algo?! ¡¿Y para qué quieres una cárcel?!"

"Obviamente es para protegerme de ti, al menos de momento"

"¿Y por qué no mejor matarte y desgarrar tu alma?"

"Puedes intentarlo, pero soy paciente y mi voluntad alta..."

El brujo lanzó su cetro al Abrazo Agónico, quien se extrañó por este acto, ya que parecía ser la fuente de sus principales poderes.

"¿Hay trato entonces?"

"Evelynn, ¿cual es la prisión más cercana?"

"Está la cárcel de Piltover y también las minas de Zaun"

"Tienes suerte, chaval, escoge rápido"

Probablemente no se notaba por la máscara, pero el Oscuro estaba sonriendo.

La Cripta de Thresh Vol.2Donde viven las historias. Descúbrelo ahora