La Cripta de Thresh Vol.2

Parte 319: Interrogatorio

Nuestra historia comienza extrañamente en la comisaría de Piltover, la cual está vacía salvo por un puñado de campeones. Vi, Viktor, Thresh y Evelynn.

La agente de Piltover y el científico supremo estaban tras la ventana de la sala de interrogatorios, hablando sobre lo raro que es la situación.

"¿Están activadas las cámaras? Quisiera quedarme con una grabación"

"Aprendí de la peor manera que siempre lo están"

"Perfecto..."

"No puedo creer que te las apañases para que todos se fueran" - comentó Vi

"Solo tuve que contactar con Nautilus... un poco de caos, ya sabes"

"¿Ya sabes? Después yo me llevo la bronca"

"Es la única manera de que ese hechicero hable, y además puedes apresarlo, el porcentaje de sucesos está convenientemente a tu favor"

"Convenientemente a tu favor..." - replicó con voz aguda

"Escuchemos qué tiene que decir este tipo"

Mientras tanto el carcelero y su mujer se encontraban frente a un brujo que carecía de su cetro, esposado por voluntad propia.

"Dime, ¿cuál es tu verdadero nombre?"

"Una vez tuve el nombre de Orson, antes de decidirme por el de Oscuro"

"Orson, bastante feo..."

"Lo siento, diablesa, pero en eso discrepo..."

"¿Y qué te traes con la Linterna?"

"Hay que tener amistad entre nosotros, ¿no?" - reveló con un tono de humor - "Después de todo la familia es importante..."

"La familia da asco" - gruñó el nigromante

"No, tu familia daba asco, la mía no"

El esqueleto notó que era la primera vez que ese tipo que se hacía llamar el Oscuro parecía enfadado y no con un tono de humor.

"Aunque parezca mentira tu y yo nos conocemos, Thresh"

"Recordaría haber visto a un tipo que viste igual que Veigar" - intervino Evelynn

"He dicho Thresh, no succubo de segunda"

"Vigila lo que dices" - le amenazó el espectro con su hoz por delante

"Qué encanto... te haces el duro, pero el primero en defenderla..."

"Estás tentando a tu suerte, incluso cuando te inventas cosas como que nos conocemos"

"Pero es cierto, realmente los dos nos conocemos, aunque de una forma indirecta"

"¿Sangriento? ¿espíritu?"

"Invocador, yo antaño fui un invocador"

"¿Tu eras un invocador? Eso... explica cosas..."

Si, realmente explicaba por qué conocía las habilidades de ciertos campeones y por qué sabía tanto de ellos, incluidos sus movimientos.

"Te estuve observando por mucho tiempo, a ti, a Kha'Zix, a Kennen, Viktor, Brand, Veigar, Karthus, Blitzcrank... y la lista sigue"

"¿Por qué un invocador iba a usar la magia para causar el caos?"

"En realidad todo se resume en la familia..."

Esa era una palabra que el nigromante tenía en muy poca estima, sobretodo por lo ocurrido durante ese año.

"Te he hecho una pregunta, ¿no vas a responderme?"

"Cierto.. ¿por qué causar el caos? las respuestas pueden ser tan relativas..."

"Sé más directo o te quedas manco"

"Digamos que... es por la misma razón por la que Nautilus está distrayendo a la policía de Piltover en estos momentos"

"Distrayen... maldito humano de..."

El carcelero salió de la habitación para ir a hablar con el heraldo de las máquinas.

"Thresh, lo que ha dicho el Oscuro..."

"¡Esa maldita Linterna está en la academia!"

"¿Por qué iba a estar allí?"

"Porque es un invocador, ya lo has oído, estará allí"

"Pero... algo no encaja..."

"Ni lo sé ni me importa, pero quiero verlo muerto" - dijo con enfado

El doctor apretó un par de botones de su brazo mecánico y abrió un portal que conectaba con la habitación del nigromante.

"No le mates, lo quiero vivo"

"¿Vivo? ¿Para qué lo quieres vivo?"

"Eso no te incumbe" - le contestó en seco - "Pero te he ayudado con el Oscuro y ha viajar hasta allí, así que lo quiero vivo"

"Maldito loco... como quieras..."

El carcelero y Evelynn cruzaron el portal para llegar a su habitación. Desde ahí pudieron ver a la Linterna a través de la ventana, esperándoles.