Parte 364: Recuerdos de otra vida

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El carcelero de las almas perdidas se encontraba caminando por el pasillo, hablando con Pantheon... o más bien teniendo que escuchar lo que él hablaba...

Y es que el nigromante no soportaba a este tipo de mortales que le trataban como si fuera un camarada de toda la vida. Para eso estaban los Emisarios del Mal.

"Y ahora mismo es mi prometida"

"Eso es... curioso... cuanto menos"

"¿Por ser Cassiopeia?" - preguntó el gladiador

"No, no es por Cas... si, es porque es Cassiopeia"

"Me llene de orgullo cuando aceptó la propuesta"

"Por favor ni se te ocurra involucrarme en vuestra unión"

"Tranquilo, aunque parece ser que quiere esperar unos años..."

"Si te sirve de algo yo me casé una vez y... fue realmente horrible..."

"Tu eres un nigromante oscuro y horrible, así que debió de ser algo bueno"

"¿Qué? ¡No! lo digo en serio, fue horrible de forma negativa"

"Seguro que no fue tan mala experiencia"

"........"

"¿Thresh? Thresh, ¿ocurre algo?"

El esqueleto de negro se detuvo y se quedó mirando al artesano de la guerra, agarró con fuerza su cadena de hierro y pareció murmullar algo.

"Mira, yo acababa de convertirme en un nigromante cuando Evelynn preparó nuestra boda... a mis propias espaldas..."

"Tal vez quería sorprenderte"

"Me llevó a una cripta rodeada por cuervos negros que nos miraban fijamente..."

"Podría haber sido casuali..."

"En lugar de una alfombra roja había una alfombra negra llena de charcos de sangre y un líquido morado que no puedo recordar que era..."

"........"

"Y encima estaba todo lo demás..."

El guerrero se cruzó de brazos mirando al carcelero, que parecía estar teniendo algún mal recuerdo que no quería volver a traer.

"Había cuadros cubiertos de llamas en las paredes y un montón de cadáveres en trajes negros ocupando todos los asientos..."

"¿Estaban descompuestos o eran esqueletos?"

"Estaban descompuestos y el cura era también un cadáver sin cabeza..."

"Podría haber sido... ¿peor?"

"Había una especie de vidriera con la imagen del Rey Arruinado al fondo y una especie de cántico que parecía venir de... los muertos"

"Inquietante..."

"Y mientras yo iba con mis atuendos negros, Evelynn iba completamente desnuda..."

"¿Desnuda al completo? ¿Sin tan siquiera sus sombras?"

"Simplemente no daré detalles algunas acerca de eso..." - puntuó el nigromante - "Luego nos persiguió una turba enfurecida"

"Realmente no creo que eso me vaya a suceder"

"No, no es una advertencia sobre tu posible y futura boda"

"¿Entonces de qué es?"

"Una advertencia de que no invites a Evelynn a la boda"

"Eso es... bastante sensato de hecho..."

Ambos campeones se acabaron separando, con el espectro pensando en aquel espeluznante día que parecía haber ocurrido ayer.

Llegó a su habitación para ver a su mujer peinándose, recordando haberla visto cada día desde aquel entonces... aunque con otro color.

"¿Pasa algo? Cariño" - preguntó la diablesa

"Vengo de hablar con el Rakkor"

"¿Te ha contado lo de su compromiso? Me puse muy emocionada, casi siento como si hubiera dado un pequeño empujoncito a esa pareja..."

"Lo que tu digas..."

La mujer se levantó y miró su aspecto en el reflejo de la ventana. Thresh agarró su hoz y la lanzó contra ella, enrollándola alrededor de su cintura.

"Thresh, ¿qué pretendes hacer con eso?"

"Espera y verás..."

El nigromante tiró de la cadena, haciendo que la mujer cayera literalmente a sus brazos.

"Mmm... hacía tiempo que no te ponías romántico..."

"Hablar con el Rakkor me acordé de nuestra boda"

"Oh... qué romántico..."

Ambos jinetes de las sombras comenzaron un baile lento en plena oscuridad.

"Pensé que no te gustó nuestra boda"

"Efectivamente... pero siempre hubo una parte que me gustó"

"¿En serio? ¿y de cual se trataba?"

"La parte del baile siempre me gustó..."

La Cripta de Thresh Vol.2Donde viven las historias. Descúbrelo ahora