Stay - Larry Stylinson [M-PREG]

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-Sí te creo. -sonreí, pues sabía que esto alegraría a mi amigo y no mentía. Le creía totalmente a Niall, todo lo que me dijo: pruebas, sus tan profundas y sentimentales palabras y la forma en que sus ojos me delataban por no creerle. Absolutamente todo me hizo reaccionar de repente. Los síntomas que yo tenía eran fuera de lo común respecto a una enfermedad normal, pues éstos sólo se presentaban en más y menos que en una mujer embarazada.

Al principio, no lo tomé bien. Es más, me dio mucho miedo empezar a creer que estaba embarazado. Muchas dudas invadían mi cabeza, preguntas a las que Niall tenía las respuestas. No fue fácil, pero me propuse a comenzar a superarlo y aceptarlo. Aceptar que estoy embarazado, porque Niall no mentía, porque yo creía en él, porque yo estaba pasando por cambios y efectos difíciles, y sobre todo, porque yo sentía que era cierto. Mi corazón me decía que había otro corazón latiendo junto a él, un extraño y pequeño ser creciendo dentro de mí.

Niall decidió llevarnos al KFC, pues a parte de que moría de hambre, quería festejar mi embarazo. Yo también quería festejar, pero Niall estaba muy entusiasmado, demasiado, y yo era el que estaba embarazado aquí.

-¿Y CÓMO SE LLAMARÁ? ¿QUÉ CREES QUE SEA? -gritaba de la emoción, ya hasta mis oídos me dolían.

-Calma, Niall. No sé.

-PONLE NIALL. -exclamó y a continuación aplaudió.

-No. Jamás en tus más salvajes sueños. -estaba totalmente equivocado si creía que mi bebé se llamaría Niall. Suficiente con este rubio.

-ENTONCES OJALÁ QUE SEAN QUINTILLIZOS!!! -ahora sí estaba emocionado.

-QUINTILLIZOS? NO! ESTÁS LOCO? ME QUIERES MATAR EN PLENO PARTO. -Niall estaba enfermo, ¿cómo se le ocurría quintillizos?

-¿Cómo vas a morir? Si nacerá(n) por cesárea. -me miró con cara de "qué bruto eres!". -¿O cómo crees que ibas a dar a luz?

Me sonrrojé ante mi ignorancia. Era cierto.

-No, olvídalo. Sigue hablando tus estupideces, ¿cómo querías que se llamara?

-A QUIÉN CREES QUE SE PARESCA? A TI? -me examinó con la mirada, observando cada uno de mis rasgos.

-Pues... ni modo. ¿O creías que se parecerá a ti? Pff. -reí mucho. Niall ahora me miraba feo por mi desagradable chiste.

-Grosero.

-Deja de hablar y maneja que por tu culpa terminaremos atropellados.

Niall ya le faltaba poco por llegar. Estacionó el auto y por lo visto, había bastante gente. No los culpaba, el pollo en el KFC era el mejor y era un antojo inevitable almorzar ahí. Entramos y fuimos directamente a hacer la fila para pedir nuestras órdenes. Podía sentir el pecador aroma de la comida y el freír del pollo. Se escuchaba el coro de personas hablar mientras disfrutaban, ya se de una deliciosa hamburguesa, o un par de presas de jugoso pollo. La fila por suerte estaba corta y no nos hizo esperar mucho.

-Buenas tardes, ¿qué desea usted ordenar? -gentilmente fuimos atendidos por una señorita.

-Buenas tardes. -saludé cortesmente. -Me daría por favor un popcorn chicken (trozitos de pollo con forma de palomitas) y unas papas. -volteé a ver a Niall y éste me murmuró lo que quería pedir. -Junto a un Wrap, papas y dos sodas de fresa.

-De acuerdo, son 26.54 $. -la señorita tecleó en su caja y recibió el dinero que Niall de su cartera sacó.

Pasamos a lado y nuestras órdenes estaban listas. Tomamos las dos bandejas llenas de comida nada saludable y tomamos asiento.