Bucky había dejado a Cassie en la escuela, y luego se dirigió al hospital. Quería ver a su prometido. Una enfermera lo guió a la habitación para luego él entrar y ella cerró la puerta, dejándole la privacidad necesaria. Se acercó a él y le dejó un ramo de rosas al lado de la camilla.
—Hola, cariño... —Dijo el castaño.— Te traje unas rosas. Sé cuánto te gustan las blancas, así que... pensé que te gustarían.
Bucky tomó una de las sillas y la colocó cerca de su futuro esposo, para luego sentarse.
—Cassie está algo preocupada por ti, pero sigue estando feliz, lo cual me ayuda a mí a sentirme mejor. ¿Sabes? Me llamó "papá". Juro que fui la persona más feliz del planeta en ese momento...
Bucky miraba sus ojos. Deseaba tanto que se abrieran y mostraran ese vivo color azul. Tomó su mano y la besó. Empezó a sentirse culpable de nuevo, sollozando un poco.
—Steve, corazón... Te ruego que despiertes. No sabes lo mal que me siento sin ti, mi amor. No soporto esto, todo es mi culpa. Si yo jamás te hubiera molestado, ni siquiera estarías aquí. Perdóname. Perdóname por lastimarte tanto, por herirte, todo es culpa mía. Tú me sacaste de esa mierda de vida que llevaba y sin ti, estoy perdido. Nadie me amará como tú. Eres el único que me ama a pesar de todos mis errores, y si tengo que alejarme de ti, lo haré con tal de que seas feliz, amor mío. No quiero verte así y otra vez he pensado que estás mucho mejor sin mí. Te amo. Tú y Cassidy son mi motivación. Quiero mejorar cada día más por ti y por ella, pero... por más que traté no puedo escapar de mi pasado, de... lo que hice. —Bucky dejaba que sus lágrimas bajaran por sus mejillas, mientras besaba su mano. El agua salada humedecía la mano de Steve.— Cariño, despierta, por favor. Te amo. Te necesito.
Bucky se quedó con su mano, acariciándola y dándole pequeños besos, mientras mantenía sus ojos cerrados. Deseaba verlo abrir sus bellos ojos.
Después de una hora, Bucky creyó que era mejor dejarlo descansar. Besó su frente y sonrió.
—Te amo, mi amor. Descansa.
Bucky tomó su mochila, pero una de las cremalleras estaba abierta, y todo el contenido cayó al suelo. Mientras recogía lo que había en el suelo, Steve lentamente abría sus ojos. Le tomó un par de segundos asimilar que estaba bien. Miró a su lado derecho. Estaba una ventana que daba un vistazo hacia afuera, una mañana algo soleada. También estaba un dibujo de Cassie que decía “Te amo, papá”. Luego, miró a su izquierda y vio a su novio cerrando su mochila. Cuando Bucky se la puso en su hombro y se dirigía a la puerta, Steve lo detuvo.
—James... —Bucky escuchó el pequeño susurro. Vio el rostro de Steve y soltó de inmediato su mochila al suelo. Corrió y lo llenó de suaves besos en su cara.
—¡Stevie! Amor mío... —Lo cubrió con sus brazos como pudo. Steve sonrió.— ¡Estás bien!
—¿Y Cassie? ¿Dónde está ella?
—Está a salvo. Está en la escuela.
—¿Qué... me sucedió?
—Te dispararon y... caíste inconsciente.
—Oh... Ya lo recuerdo.
—Perdóname, bebé.
—¿De qué hablas, mi amor?
—Todo es culpa mía.
—Claro que no lo es.
—Sí lo es... Yo... Sólo perdóname.
—No voy a perdonarte por algo que tú no hiciste.
—Sí lo hice yo. Ese sujeto era uno de los que buscaba vengarse por los que mataron a su familia.
ESTÁS LEYENDO
Leannán.
Short StoryLeannán. { Irish } m. Lover. Steve es un padre soltero y amoroso que se hizo cargo él solo de su hija, Cassidy Rogers, cuando su novia y él se separaron al momento de que ella nació. No ha tenido ningún problema mayor a la hora de cuidarla y darle...