Leannán.

Capítulo 48

Era sábado. Bucky estaba en la cocina, lavando algunos platos. Steve iba a ver televisión, pero miró al castaño y sonrió, para luego acercarse.

—Hola, hermoso. —Dijo besando su mejilla.

—Hola~

—Iba a ver una película. ¿Vienes?

—Seguro, sólo termino esto y voy.

—¿O quieres hacer algo más interesante? —El rubio tomó su cintura y se apegó a él. Bucky rió.

—¿Más interesante? ¿Como qué, Rogers? —Se hizo un poco para atrás, pegándose a él también.

—Tú sabes a qué me refiero, amor. —El castaño sonrió.

—En la noche, ¿sí?

—Está bien. Te espero en el sofá, entonces.

—Ok.

Steve fue a sentarse al sofá, pero miraba a Bucky desde él. Se quedó observándolo un gran rato, como cuando te enamoras por primera vez. Sonrió y silenció la televisión. Solo mirarlo lavando trastes lo hacía feliz, le hacía ver lo mucho que estaba enamorado de él.
Después de unos minutos, Bucky se volteó al terminar y vio que Steve lo miraba como chica adolescente suspirando por su amor platónico.

—Bicho raro. —Rió el castaño.

—¿Qué?

—¿Desde cuándo me estás mirando?

—Desde que me senté aquí.

—¿Y por qué? —Bufó y se sentó a su lado.

—¿Acaso no puedo mirarte? —Se acercó a James y lo abrazó, recostando su cabeza en su hombro.

—Sí, sí puedes. —Dijo abrazándolo y tomando el control remoto subiéndole el volumen a la televisión.

Después de un rato viendo películas, Bucky tuvo hambre. Se levantó, tomó sus llaves y algo de dinero.

—Amor, iré a comprar algo de comer. ¿Tú quieres?

—Eh... No, creo que estoy bien. Gracias, bebé.

—Ok.

El castaño salió rápidamente a comprar algo de comer, porque tenía bastante hambre. Cerca de su casa, vio que abrieron un taquería mexicana. El aroma lo atrapó y se dirigió allá. Pidió dos tacos grandes y esperó a que le dieran su orden.

Mientras, Steve recibió un mensaje. Era Cassidy.

“Hola, papi. Estamos en el penúltimo tour. 😊”

Adjuntó una foto con su mejor amiga, Miles y Ned. El rubio sonrió.

“Me alegra que te estés divirtiendo, amor. Te extraño mucho. ❤”

“Yo también los extraño mucho. Bye, te hablo luego. 😊❤”

“Cuídate, cariño.”

Después de bloquear su celular, escuchó la puerta. Se levantó para ir a ver qué había traído de comer.

—¿Tan rápido?

—Hay un nueva taquería aquí cerca. —Sacó una bolsa y puso la comida en un plato.

—Oh... Eso se ve muy rico.

—¿Eso crees? —Dijo sarcástico. Sabía que él iba a querer.

—Sí... Lástima que no te pedí. —Suspira y saca el otro taco.