Leannán.

Capítulo 20

—Mamá...

—Dime, Stevie...

—¿Podrías venir a la casa un momento? Tengo que hablarte de algo muy importante.

—Sí, claro amor. Iré en la tarde.

—Gracias, ma.

Steve y Bucky ya tenían casi un año de estar juntos, pero Steve no le había mencionado nada a su madre y se sentía mal por no haberlo hecho.

En la tarde, su mamá llegó a la casa de Steve. Cassie le dio la bienvenida.

—¡Hola, abue! No sabía que vendrías...

—¿Cómo estás, cariño?

—Bien, ¿y tú?

—Bien, gracias.

—Papá está en el comedor.

—Está bien... Gracias.

Sarah se dirigió al comedor y sonrió al ver a Steve.

—Hola, cariño.

—Hola, ma. —Steve besó la mejilla de su madre y sonrió.— ¿Quieres algo de comer?

—Pues, si tienes algo ya preparado, está bien. —Steve le sirvió una taza de café junto con un bol de galletas.

—Aquí tienes, mamá. —Steve se sentó en una silla frente a su madre.

—¿De qué tenías que hablarme, Stevie?

—Pues, ¿te acuerdas que había estado saliendo con... alguien?

—Sí, cariño.

—Bueno, hace casi un año somos... novios.

—¿En serio? ¿Por qué no me dijiste?

—Ah... —Steve rió nervioso.— Quería asegurarme de que fuera algo serio. No quería presentarte a alguien de un par de meses.

—Oh, entiendo. ¿Y Cassie qué dice sobre el tema?

—Ella dice que está de acuerdo en que salgamos, y ambos se llevan muy bien juntos. Cassie dice que ya parecemos una familia.

—Me alegro mucho por ti, Steve.

—Vendrá en un par de horas, cuando termine de trabajar.

—Oh, entonces sí la podré conocer~ —Steve no hallaba como decirle que era un hombre.

—M-Mamá...

—Dime.

—Él está muy emocionado por conocerte también... —Sarah se extrañó, pensó que Steve había cometido un error.

—¿"Él"?

—Ehm... Sí, él. —Ella se sorprendió, esperaba de todo menos eso. Solo miró a su hijo y Steve solo miraba hacia abajo.

—¿Es... un hombre?

—S-Sí, ma...

—¿Eres...?

—N-No, no lo soy...

—¿Entonces cómo-...

—No lo sé... Solo... Solo sucedió, ni siquiera sé cómo.

—Cariño...

—Él es muy bueno, y Cassie lo quiere mucho. Él ha resultado ser alguien muy especial para nosotros y en verdad desearía que le dieras una oportunidad para que lo conozcas. Quisiera en verdad que él tenga tu aprobación. Quisiera que me apoyaras, mamá... —Sarah se quedó callada y miró a su hijo.