Escuela Chaos

51| E-123 Omega

SHADOW

Han pasado treinta y cinco días desde que Rouge me encomendó rastrear a un tal Infinite y aún no tengo resultados favorables. Tampoco se registran anomalías en ninguna parte de Central City, o eso es lo que dice mi computadora desde Hidro City.

¿Que qué hice luego de lo ocurrido en Chemical Plant? Es una historia algo complicada. Todos se fueron en la casa rodante de Tails y volvieron a sus respectivos hogares. Yo me hice cargo de Scourge, Fiona y el Team Babylon; los arrojé dentro de una celda en una comisaría y me prometieron que ya no causarían problemas. Meses más tarde, los pajarracos fueron liberados y Fiona the Fox logró salir con la excusa de que quería terminar la escuela. La pusieron bajo la custodia de Rouge y la dejaron ir.

Volviendo a mi historia, decidí quedarme en mi ciudad natal y buscar a mi antiguo equipo. Encontré una de las viejas entradas al cuartel: ingresé y me recibieron de una forma no muy agradable. Me echaron en cara todo lo que había sucedido dos años atrás, pero me perdonaron al ver que traía conmigo las siete Chaos Emeralds. Me aceptaron nuevamente en la primera legión del Legado Chaos y volví a mis viejos hábitos: pero las cosas habían cambiado un poco.

Una agencia militar de nombre G.U.N (una abreviación de Guardian Units of Nation) había "tomado" esta especie de secta y, mediante la fuerza, los habían obligado a formar parte de ellos. El Legado Chaos ahora es una subdivisión de la agencia militar: sigue existiendo pero pertenece a algo mucho más grande.

Fue una gran sorpresa cuando me contaron todo esto ni bien volví. Resulta que para aprobar un nuevo miembro, el comandante Abraham Tower debe conocerlo primero. Así que cuando fui entrevistado por este señor, tuve que relatarle toda mi historia; desde mi nacimiento hasta lo que ocurrió en Chemical Plant. Tuve que omitir algunos detalles como el hecho de que Silver viene del futuro, mi relación con Amy y los demás, y mi historia con Sonic. El faker me dejó bien en claro que no quería volver a involucrarse en ninguna agencia nunca más, así que no hablé de él porque sino lo irían a buscar. Terminé de contarle mi historia y el comandante me admitió al instante. Sin embargo, no en el puesto de la primera legión del Legado Chaos. Decidió que trabajaría como uno de los agentes de G.U.N de tiempo completo.

  Y aquí estoy, sentado en una pacífica oficina frente a un escritorio, sin nada que hacer. El lugar es pequeño: consta de un dos sillas enfrentadas con un escritorio de madera en el medio, una computadora muy moderna sobre él y cajones con armas y otros objetos de oficina, como lapiceras, anotadores, calendarios, etc. Las paredes son de un gris oscuro similar al color del suelo y en el techo hay dos focos de luz que iluminan la oficina. En el escritorio se encuentra un pequeño botón que al presionarlo hace que mi cama aparezca. Mi rutina se basa en estar aquí durante todos los santos días, cumpliendo encargos de mi jefe y a veces investigando por mi cuenta.

  Unos golpes en mi puerta hacen que me sobresalte.

—Adelante —digo.

  Rouge ingresa con una pequeña sonrisa y me saluda. Luego, toma asiento frente a mí.

—¿Cómo has estado? —pregunta, cruzándose de piernas.

—Como siempre —respondo secamente.

—¿Alguna noticia de Infinite?

—Nada. Es como si no existiera.

—Si necesitas que me infiltre en la base de datos del comandante, solo tienes que pedírmelo —dice con un tono despreocupado.

—Intentaré hacerlo con mis métodos, pero lo tendré en cuenta —respondo—. ¿A qué has venido?

—Solicitan tu presencia en el cuartel general.

  Ingresamos al cuartel general cinco minutos más tarde. Es bastante amplio, en el centro tiene una mesa redonda muy grande con sillas cómodas junto a ella, y en las pareces hay diversos hologramas con estadísticas, títulos de diarios y cámaras. No hay nadie además de nosotros y el comandante, un hombre alto de pelo canoso, con un ojo verde y el otro rojo. Se encuentra de pie en una de las esquinas de la habitación junto a un robot algo más pequeño que él.

—Bienvenido, Shadow the Hedgehog. Rouge the Bat —asiente hacia la murciélago en forma de saludo—. Gracias por venir. Tomen asiento, por favor.

  Obedecemos sus indicaciones y el nos imita, solo que sentándose frente a nosotros.

—Los he convocado a ambos a esta reunión debido a que quiero presentarles algo. Omega, acércate.

  El robot que estaba junto a él se acerca a la mesa. Su cuerpo tiene tonalidades negras, rojas y amarillas. Sus brazos son extensos.

—Este es E-123 Omega. Es uno de los muchos robots que encontramos en la guarida del fallecido doctor Robotnik luego de allanarla. Es altamente funcional: posee diversas armas y conoce varias técnicas de combate, además de que tiene inteligencia artificial. Como hemos entregado algunos robots a trabajadores de la agencia, queríamos darles este a ustedes, para que lo compartan. Será de gran ayuda si le permiten.

  Rouge y yo intercambiamos miradas asombrados.

—Muchas gracias, señor Tower, por tenernos en cuenta —agradece ella—. Cuidaremos de él.

—Cuento con ello. Y Shadow, te he asignado una nueva misión. Fíjate en tu correo cuando llegues a tu oficina.

  Nos despedimos del comandante y volvimos a mi oficina junto a nuestro nuevo compañero.

—Omega dormirá contigo —establece Rouge. Luego, me lanza un beso y se marcha.

  Antes de que pudiera protestar, el robot emite algunos sonidos extraños.

—Analizando estructura. Reconociendo ubicación. Estableciendo lugar como refugio —dice con su voz robótica y gruño en mis adentros.

—Hmph. Se ve que estoy obligado a llevarme bien contigo.

—Tú eres Shadow the Hedgehog. Erizo macho. Aproximadamente cincuenta años, sin embargo, aparenta de dieciocho. Forma de vida definitiva —vuelve a hablar.

—Si, si. Lo que digas —lo ignoro mientras tomo asiento frente a mi escritorio, dispuesto a ver el trabajo que me encargaron.

—Causante de la catástrofe de Hidro City... —continúa hablando.

—Ya cállate, maldita sea —le ordeno, fulminándolo con la mirada. El parece captar el mensaje.

  Encuentro el archivo enviado por el comandante y lo abro. Es una noticia reciente: en el título se lee "Fuga de Prison Island". Mi respiración se corta varios segundos al ver la imagen del artículo.

  Scourge the Hedgehog se había escapado, y mi misión es atraparlo.