| Capítulo 40 |

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Cómo estaba previsto, todo va de acuerdo al plan, Sasori sigue en el pueblo, Yamato e Idate; lo están ayudando con la investigación de Kiro Hamada.

Su amigo, le comento; qué el auto de Hamada, no lo tenia en su taller, sino en un bar a las afueras del pueblo.

A sí, que él Haruno, accedió a la información, pero habia un requisito, qué cumplir antes de entrar a ese bar de mala muerte, y eso era ser impuro, para Sasori, no era ningún obstáculo; y eso lo sabía bien.

Sasori Haruno, alías "Akasuna"; no era ningún santo, ni mucho menos inocente.
Ninguno de su familia, lo era...

(...)

Por otro lado, Sasuke Uchiha, estába muy tenso; porqué no tenía, ni rastro del Haruno.
No, sabía nada; ni siquiera, sí encontró a su amigo o no; pero decidió esperar y no ser un estorbo.

(...)

Mientras tanto, ya sé encontraba en el bar, junto con su amigo y Yamato. Bajaron su auto, y adentraron pequeño callejón, qué estába a lado de esté.

En dónde, también había juntas de vandalismo y entre otras cosas; pero él, no sé inmutó y caminó de lo más normal.

— ¡Hey Idate!.— llamo un rubio — ¡Con qué nuevo amigo!.— río — Y elegante... Etto — chasqueo sus dedos— un gaijin.— río entre dientes.

— No. Lo molestes Katsu; no sabés de quién se trata.— dijo burlón.— créeme es peligroso.

Sasori, sólo lo escuchó y siguió caminando, sin tomar importancia.

— ¡Agg!. ¡Yo lo enseñaré a éste gaijin, modales!.— sacó una navaja y sé acercó a Sasori.

Sasori, sonrió de lado; pues él, ya sabía lo qué pasaba. Con un ágil movimiento, lo agarró del brazo, y lo torció, oyendo un gritó desgarrador.

Después, él rubio calló arrodillado; Sasori, sonrió maléfico y aplicó más presión en su agarré.

— Siempre, fuiste tan predecible Deidara.— suspiró — Con qué gaijin.¿Eh?.— preguntó.

— ¡Aah!.— gritó él — Sa- Sasori... ¿Eres tú?.— se quejó — ¡Suelta me!.

Él pelirrojo, lo soltó ya cansado...

— Imbecil. — gruñó — ¡Ja!. Con qué aquí, estabas escondido...

— ¡Qué puedo decir!. Quise descansar de todo, senpai.— rascándose la cabeza — ¡Hey!. ¿Cómo está sakurita?.

— Mal. Pero, la voy a salvar.—

Deidara, entendió las palabras de Sasori, qué Saku está en peligro.

— ¡Cuenta conmigo!. Si.— asintió.

Sin más, entraron a la cochera; qué había, al fondo del callejón.
Prendieron la luz, e Idate, bajó una palanca, qué estába alado.

Y el auto de Kiro, bajó de una plataforma de metal.

— Tal y cómo lo dejó, aquel día.— 

— aplaudió Sasori.— Bueno. Manos a la obra.— ordenó — Yo les ayudo.

Asintieron, y sé comenzaron a sacar las camisetas, para no mancharse. Y dejaron sus músculosos torsos desnudos.

— No. Sé vaya a manchar, señor empresario.— sé burló Idate.

— Cállate idiota. — lo insultó Sasori — O te irá, peor qué Deidara.— advirtió.

A sí, quedaron revisando el auto, toda la tarde, junto con Yamato, quién sólo, descansaba sentado.

Enamorado Locamente De Mi Psicóloga | Sasusaku |TERMINADA| ✔️Donde viven las historias. Descúbrelo ahora