Capítulo 41

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N/A: Buenos, os dejo con un nuevo capítulo de la historia, ya queda poco, demasiado poco y como siempre temo el día de la despedida, pero pensaré en todos los bueno momentos que pase escribiéndola y leyendo vuestras reacciones, mil gracias.

Los personajes no me pertenecen…
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POV RICK

Miro a través de la pequeña ventana hacia el infinito. Apenas se ve nada por ella de lo oscuro que esta aun fuera, ni si quiera sé donde estamos pero…quizás sea mejor así. Miro a Kate dormir en la cama que compartimos y no puedo dejar de sentirme culpable de que tenga que estar aquí. Si estuviera en casa, si pudiera seguir con sus sesiones mejoraría mucho más y pronto podríamos vivir de forma normal. Pero ahora esta aquí encerrada porque aunque no tuviera ese miedo de todas formas tendría que estarlo. Esto no va a ayudar a que mejore y eso me hace sentir mal. El pensar que por mi culpa su recuperación se ha frenado me tiene mal, muy mal.

-¿Qué haces ahí? Ven a la cama-dice Kate estirándose. Miro por última vez hacia el exterior y vuelvo a su lado en la cama.

-Tengo frio-digo poniendo morritos y enseguida me abraza y me da calor con sus manos. Me siento tan bien, que tengo demasiado miedo a perderla.

-¿Mejor?-pregunta mirándome con una sonrisa y yo asiento con otra igual en mí cara-Aun puedo mejorarlo.

-¿Si?-pregunto sorprendido y la veo morderse el labio antes de besarme y cuando siento sus labios insistentes sobre los míos siento que pierdo el control que intento ponerme siempre con ella, pero cada vez, me es más y más complicado. Siento sus manos en mi espalda y me quedo paralizado al sentir sus cálidas manos subiendo y bajando por mi espalda y siento que si no paro voy a perder la razón.

-A que así es mejor-dice acercándose de nuevo para besarme y quiero apartarme pero no puedo hacerlo. La beso mientras coloco mis manos sobre su cintura levantando en el camino su camiseta. El calor de su piel hace que mi mente se nuble y se vuelva loca y sé que debo parar que no es el momento pero sentir su lengua junto a la mía mientras se aprieta con fuerza contra mi cuerpo hace que mi cuerpo ya no haga caso a mi cerebro que le manda órdenes contradictorias.

-Kate…-digo entre suspiros para que sea ella la que pare, pero ella no quiere eso. Vuelve a besarme con fuerza mientras me acaricia el pecho y siento que voy a explotar. Me tumbo sobre ella la beso son fuerza mientras se retuerce debajo de mí.

Me separo del beso la miro con una sonrisa y la veo morderse el labio sensualmente mientras me sonríe. Siento su mano sobre mi cara y cierro los ojos ante su contacto. Cuando los abro esta con una sonrisa en la cara y no tardo ni un solo segundo en lanzarme de nuevo a sus labios y perderme en ellos.

-Rick…para…-dice de repente separándome de ella y me quedo un poco sorprendido.

-Lo siento…me he pasado…

-No, ¿no has escuchado eso?

-¿Escuchar?-pregunto sorprendido pero entonces lo oigo, son disparos y no suenan nada de lejos.

Me levanto rápidamente hacia la puerta. La abro y allí esta Esposito en la puerta. Casi me caigo sorprendido al verlo allí.

-No os mováis de ahí dentro. Ya he avisado y vienen de camino, pero de momento tengo que ocuparme yo. No os mováis-dice seriamente y cierra la puerta de nuevo. Miro hacia Kate que está sentada sobre la cama sin duda con miedo por lo que puede pasar.

-¿Qué pasa?

-No puedes moverte de aquí-digo poniéndome bien la ropa y buscando algo con lo que poder defenderla pero no hay nada. Entonces suenan porrazos contra la puerta del piso, ya estaban aquí y no había manera de escapar.

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