Mochi ❀Kookmin omegaverse

37

Hace algunos años atrás.

— Hyung...— pronunció luego de que sus rostros se separaran—. Yo...

— Mierda... lo siento, no puedo— tomó las manos del castaño.

— ¿Por qué? ¿No me quieres?— preguntó mordiéndose el labio inferior.

— Te amo Taehyung, más que a nada.

— ¿Entonces?

— Te haré daño y no quiero eso.

— Jamás me harías daño, tú eres una buena persona.

— No entiendes... No puedo ser feliz, no mientras una parte de mí haya desaparecido y esté sufriendo. Juro que lo intento... pero no dejo de pensar en él.

— ¿Crees que a él le gustaría esto? ¿Crees que él no quisiera que nosotros seamos felices?— se alejó del contrario.

— Ya lo sé Tae... Pero no puedo, por más que lo intente, no puedo. Si estoy contigo... saldrás herido. Me siento un egoísta y no quiero.

Taehyung se preguntó si podía ser más herido de lo que estaba en aquel momento.

— Ahora lo estás siendo— gruñó.

— ¿Qué?

"No estás pensando en mi"

— Nada, ¿Quieres que hagamos como si nada ocurrió? Está bien, hagamos eso. Siempre lo hemos hecho igual, así que no será difícil— se levantó del sofá.

— Tae... espera.

El castaño lo ignoró y salió de allí con las lágrimas acumulándose en sus ojos.
Tomó el autobús y luego de unas cuantas paradas bajó.

Al llegar a su casa se encerró en su habitación, sin pronunciar ninguna palabra a sus padres, quienes le miraron preocupados desde la cocina. Sabía que le darían su espacio por unas horas y que luego irían a verlo.

Se sintió realmente mal.

Culpaba a Hoseok de ser un egoísta, pero él también lo estaba siendo al querer obligarlo a pensar en él.
Taehyung tampoco lo olvidaba, claro que no. Era su mejor amigo, su alma gemela. Pero la diferencia, es que él quería darse la oportunidad de ser feliz. Estaba seguro que lo más querría Jimin, sería eso.

Entonces... ¿Realmente llegó a pensar que no podía estar con Hoseok por culpa de Jimin?

Sus sollozos cada vez se fueron haciendo más constantes y fuertes, hasta que finalmente rompió en llanto.

No lloraba por el rechazo del alfa. Lloraba porque sentía que se había convertido en una mala persona.

— Tae... perdona. No iba a entrar, pero realmente no puedo escucharte así, cariño.— Su madre se acercó a él.

— Mamá... y-yo realmente me volví muy malo... ¿No?

— ¿Cómo dices eso? Tú eres la mejor persona que conocí en toda mi vida.

— N-no es cierto... y-yo estoy pensando cosas malas de... de...— No pudo pronunciar su nombre, por lo que su madre comprendió.