Rude. [Taekook]

[16]

—¿Quieres que lo hagamos aquí y ahora, Jungkook?

—Estás borracho, Taehyung.

—Todos hablan sobre lo coladito que estás por mí, ¿por qué no aprovechas esta oportunidad y terminamos con esto? —Le dijo, acercándose a él hasta que sus labios estaban casi pegados.— ¿No es eso lo que quieres? Dime lo que quieres, Jungkook. Yo puedo dártelo.

Taehyung lamió su labio inferior, rozando el del contrario y luego apoyó las manos contra la pared alrededor de Jungkook, acorralando. Cortó con el centímetro que separaba sus labios y comenzó a besarlo lento pero intensamente, y sonrió entre el beso cuando el menor lo correspondió.

—No seas tímido, Kookie. —Dijo, cortando el beso.

Tomó el brazo de Jungkook y lo obligó a ponerlo sobre su cintura. Volvió a besarlo y jadeó contra sus labios cuando sintió a Jungkook agarrándolo fuerte y acercándolo a su cuerpo.

Tae comenzó a frotar su entrepierna contra la de Jungkook y cortó el beso para empezar a besar su cuello. Besó, succionó y mordió suavemente el cuello del menor, dejando algunas marcas.

Taehyung gimió alto al sentir al castaño obligarlo a frotarse más, haciéndolo sentir lo duro que estaba. El rubio siguió besando el cuello de Jungkook, esta vez con más necesidad. Jungkook miró a Tae besar su cuello antes de soltarlo y alejarse un poco.

—¿Qué haces? —Le preguntó Taehyung, apoyándose contra la pared con la respiración algo agitada.

—Estás borracho, no me voy a aprovechar de ti, Tae.

—Eres un aburrido, Jungkook, ni siquiera tomé tanto.

—Hay botellas casi vacías en la mesa... Estás borracho. —Jungkook tomó la mano de Taehyung y fue hacia las escaleras. Allí lo llevó hasta su cuarto y lo obligó a acostarse.

—Aburrido. —Dijo Taehyung mientras se acomodaba en su cama para luego cerrar los ojos.

—Vendré la próxima vez que tengas el día libre y terminaremos ese trabajo, ahora descansa un rato, Tae. —El rubio asintió aún con los ojos cerrados y Jungkook salió de la habitación.

Bajó las escaleras y fue hacia la cocina a guardar cada botella de alcohol donde suponía que irían, y acomodó la chaqueta que Taehyung había tirado.

Luego de unos minutos, volvió a subir silenciosamente al cuarto del rubio. Entró y lo vio durmiendo plácidamente, hecho una bolita, con los labios entreabiertos y el cabello desordenado.

Se acercó con cuidado a la cama de Taehyung, arrodillándose frente a esta. Miró al mayor unos segundos, apreciando cada parte de su cara. Sonrió antes de hablar.

—Estás tan borracho, Tae... —Rió levemente.— Creo que no vas a recordar esto mañana... Y la verdad no se si eso me alegra o si me entristece. —Corrió el cabello que tapaba parte de su cara.— No te entiendo, ¿sabes? Sé que soy molesto, pero siempre me rechazaste... Incluso cuando apenas nos conocíamos y tú no me gustabas. —Suspiró, recordando cada rechazo de parte de Tae.

Lo miro por última vez y luego se levantó para salir de la habitación. Bajó las escaleras y salió de la casa, cerrando la puerta cuidadosamente.