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El timbre sonó dos veces y Taehyung se asomó por las escaleras al escucharlo.

—¡Está abierto! —Gritó lo suficientemente alto como para que la persona del otro lado de la puerta lo escuche.

Cuando escuchó el ruido de la puerta abriéndose, volvió a su cuarto y espero allí.

—Tae, por Dios, no puedes tener la puerta abierta todo el tiempo, podría entrar un cualquiera y...¿Taehyung? —Jimin dejó de hablar cuando entró al cuarto y vio a su mejor amigo.

Taehyung se veía miserable, sentado en su cama y jugando con los dedos de sus manos, sus labios formando un pequeño puchero.

El menor levantó la vista cuando Jimin entró al cuarto, y su corazón se partió cuando vio los ojos rojos de su mejor amigo.

—Taehyung, ¿qué te pasó? —Le preguntó en un tono de voz suave, mientras se acercaba a su cama para sentarse a su lado.

Tae abrió la boca para hablar pero lo único que salió fue un sollozo. Puso sus manos en su cara, queriendo taparla, odiando verse débil frente a Jimin. Su mejor amigo lo abrazó y el menor comenzó a llorar desconsoladamente entre sus brazos.

—¿Por qué soy así, Jimin? —Dijo entre sollozos.— Yo arruiné todo.

—¿De qué hablas? —Le respondió, aún abrazándolo.

—Jungkook.

—¿Te hizo algo? —Preguntó con el ceño fruncido, aunque Taehyung no podía verlo ya que aún estaban abrazados.

—Él me quería tanto... Y yo solo lo lastimé.

—Taehyungie, sabes que no es tu culpa no quererlo de vuelta.

—Pero lo hago, Jimin.

El mayor se alejó de Tae de repente al escucharlo, tenía el ceño fruncido y miraba fijo a su amigo.

—¿Lo haces?

—Lo quiero tanto. —Respondió antes de volver a sollozar y volver a acurrucarse entre los brazos de su amigo.

Rude. [Taekook]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora