Narrado por Silvia:
Acabamos por llegar al "hotel". Todo era extremadamente humilde. Pero era lo mejor que tenían. Suelto mi maleta encima de la cama, miro a Andreu, ambos tenemos cara de expectación, era un viaje demasiado novedoso para nosotros. Demasiados sentimientos. Después de la paliza del avión, de los trasbordos, ver el cambio tan impresionante entre Barcelona y esto...es un shock. Es salir de nuestra burbuja y zona de confort, es pensar que vivimos en una mentira y que nuestros problemas no lo son tanto, aquí hay gente que verdaderamente lo pasa mal.
La habitación era muy rudimentaria, una cama y unos muebles que parecen sacados de la casa de una bisabuela de pueblo. El baño es sumamente humilde, con azulejos blancos, algunos fragmentados. Todo está muy limpio, pero es antiguo y sufre deterioro del uso. Si este es el mejor hotel de la zona, no me quiero imaginar el peor.
Comienzo a sacar mi ropa, por los mosquitos, todo lo más fino posible, porque hace mucho calor. Andreu comienza a poner la mosquitera que nos han ofrecido, se monta encima de la cama para colgarla del techo, se hace un lío con aquella gran tela semitransparente. Pongo mi móvil a cargar con el adaptador para la toma de corriente, solo hay un enchufe en el baño. Todo es un golpe de realidad.
- Dejo las dos mochilas con los juguetes aquí. ¿Vale? Que no se nos olvide.
- Si. Estoy deseando ver las caras de todos.
- Yo de ir al mercado y comprar para ellos.- Creemos que mejor invertir el dinero en el propio pueblo, así hacemos un doble beneficio, pues ayudamos a los comerciantes.
- ¿Crees que nos mirarán raro?
- No. Seguro que no. Además, sus padres están informados. Dentro de una hora vendrá la persona encargada por la ONG, Ramiro.
- Ponte más repelente de mosquitos, que...al final, te pican.
- Si, pues ya que lo saco, ponte tú también.- Tocan a la puerta, nos traen el almuerzo un chico muy sonriente, no sabe ingles así que es muy difícil comunicarnos, Andreu se expresa con señas, lo mejor que puede. Es muy patético, lo hace fatal, al final acabo interviniendo yo. El chico se ríe, debe pensar que somos tontos...y un poco sí.
- Pollo con arroz blanco y de postre yogurt. Nos trajeron agua embotellada.- Le digo cuando destapo las bandejas.
- Recuerda no beber del grifo.
- Que sí...pesado.
Comemos procesando la información, hablamos relativamente poco.
- Mañana podríamos decirle a Ramiro que nos lleve a la zona comercial por la que pasamos en el camino y comprar lo que pensamos ¿no?
- Si, hoy les llevamos lo de la maleta y mañana pues vamos y hacemos una gran compra...así le caeremos bien ¿no? A todos los niños les gustan los regalos, eso es aquí y en
- Y en la china popular.- Ambos reímos.
- ¿Impresionado?
- Mucho...uno lo ve por la tele, pero lo ve lejano.
- Tengo muchas ganas de abrazarles.
Vuelven a llamar a la puerta, aparece señor de unos cuarenta y cinco años.
R- ¿Andreu Buenafuente?- No tiene idea de quien es, pese a ser Español...es raro que no le conozcan.
A- Si, soy yo.
R- Encantado, soy Ramiro.- Hemos hablado mucho por teléfono, pero no teníamos idea de cómo sería.
S- Silvia, encantada.
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Segunda Parte: ¿En qué Estaba Pensando?
FanfictionContinuación de la historia: ¿En qué estaba pensando?. Nada es real, cualquier parecido con la realidad, es pura coincidencia.