Capítulo Extra

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Puedo ver la debilidad y angustia, el sentimiento que un día se llevó está ahí latente y pidiendo salir como una animal enjaulado, pidiendo a gritos la libertad añorada.

Sus ojos zafiros son como un enigma no resuelto y aunque pide a gritos que lo resuelvan me enredo más en sus acciones que son el procedimiento.

Eso es lo atrayente de alguien, que aunque parezca que la conoces siempre haya algo nuevo que descubrir, una imperfección, una manía o una mancha de melanina.

Cada cosa asombra, sus pecas decoran su rostro de manera sutil y juraría que le daría un beso por cada una de ellas.

Es perfecta, no existe perfección, pero es perfecta para mi límite.

No es mi mitad, cada persona es completa, es mi complemento mental, porque casi nadie encaja mentalmente con otro.

Es la forma de expresar, es su nerviosismo palpable en su mirar, en la manera que trata de parecer fuerte y su orgullo audaz que trata de mostrar con firmeza, solo eso la hace ella.

Cometió errores y también yo; creo que hasta peores, aun así me considero inocente.

Estúpido de mi parte, pero yo luché mucho por ella, le ofrecí todo, ella era mi eje, mi vida.

Aun así sucedió y creo que fue necesario para madurar o ver que la necesito...

La necesito como el aire para respirar, nunca me cansaré de ella porque es vital para que me mantenga vivo, no literal sino emocional.

Cuando llegue a La Ciudad de Elena fue un cambio drástico, mi padre comenzó a salir a flote en su empresa de construcción y como yo terminé mi carrera me ofrecí para ser su mano derecha.

Las empleadas eran un gran plato fuerte en este lugar, jugaba con ellas a mi gusto, pero no se sentía bien y lo seguía haciendo hasta que así lo percibiera.

Eduardo era mi mejor amigo, me ayudó a sobrellevar el todo sin contarle quien era Melanie, después mi primo conoció a una chica que le fascinó: Susana Hamilton, la hija de unos dueños de una empresa maderera, eran reconocidos en Norteamérica, pero ella quería ser más una estrella de una pasarela.

Era hermosa y se parecía mucho a....

Creo que eso fue lo que me atrajo, no su belleza sino su parecido.

Eso me convierte en un verdadero hijo de puta, lo sé y peor sabiendo que mi primo estaba interesado en ella, pero eso no me impidió a conquistarle, llevarle la delantera a Eduardo cuando él solo me ayudó.

Estaba dolido y no me importaba que los demás sufrieran, para que vivan como yo me sentía.

Por parte de Eduardo, se fue de la ciudad, mejor dicho del país a Europa, un mochilero sin rumbo visitando países.

Mi relación con Susana mejoró y pude jurar que estaba enamorado, pero hasta que ella por sus padres ayudarles se fue a California y eso me hace recordar que tenía olvidado hace años un viñedo que compré para Melanie.....

Así que le dije a Susana que pasara por ahí para que verificara cómo iban las cosas.

Ella se demoró meses y ahí perdí el interés aceptando que solo estaba con ella por puro capricho y ella conmigo por lo mismo o eso creía.

Hasta qué pasó, Melanie llegó de la nada con ayuda de Samara una gran empleada y buena, en los dos sentidos que lamentable estaba primero su trabajo que cualquier interés en perderlo por salir con su gerente, carácter fuerte, pero con los suyos era toda una blandengue.

No soportaría estar más tiempo aquí con ella, así que le dije a mi padre qué me iba a California con Susana y me ocuparía de la seda allá y del viñedo para hacerlo una cadena comercial con el nombre del grupo Bernat, algo que le interesó y dijo que buscaría un reemplazo para aquí en la cuidad de Elena.

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