-¿Sueles dormir abrazado a algo o solo aprovechas que soy yo?
+Ambas
"-Mira, has dicho que dos cuerpos se atraen con más fuerza si están más cerca...- se fue acercando más a mi conforme hablaba.- Las Leyes de Newton explican la física clásica, acció...
[Narra Jungkook] Este último fin de semana una amiga dió una fiesta salvaje en la piscina dado que sus padres no estaban en su casa, y claro está, no me la iba a perder. De hecho, es vecina del chico que dió la fiesta donde Tae se confesó, por lo tanto son casas muy similares. Fue una gran fiesta, había muchas chicas pasando un buen rato en la piscina, y muchos chicos babeando detrás. A mi no me hacía falta ir detrás de nadie, la gente solía venir a preguntarme a mí, pero extrañamente esa noche no me apetecía sacar a pasear a mi amiguito.
Miré la barra y recordé el poco aguante a la bebida que tiene Tae, sonreí. Ese pequeño baboso está coladito por mi aun a día de hoy. Bailamos toda la noche hasta que salió el sol, bebía todo lo que me servían y dejaba que cualquiera invadiera mi espacio. En algún momento entre las cinco y las siete de la mañana, caí al suelo cerca de la piscina, y se eso porque es justo donde me desperté a las once y media. Todo el mundo sabe que después de una fiesta hay que limpiar, es una norma universal, solo que yo realmente pasaba de aquello así que traté de escabullirme.
- ¿A donde crees que vas?- dijo Noona Lee Sun Mi, la chica que daba la fiesta. Era realmente atractiva, tiempo atrás traté de acercarme a ella para pasarlo bien en una fiesta pero estuvo a punto de morderme como un perro antes de que abriera el pico. Se ve que está saliendo con una tal Kim Hyun Ah, chica que iba al mismo instituto que mi mejor amigo, Hyung Jimin.
- Yo... eh...tengo que peinar a mi tortuga- no se me ocurrió nada mejor.
- Por supuesto, ¿necesitas ayuda para pasear al pez?- bromeó sarcástica antes de lanzarme un paquete de bolsas de basura.- Anda, recoge algunos vasos, que la mitad son tuyos.
Rodé mis ojos y le hice caso. Mierda, solo quería irme. Menos mal que había sido de los últimos en levantarme, gracias a eso, todo estaba casi listo, solo había que recoger un par de cosas, tirar la basura, guardar las botellas y mirar en el montón de ropa olvidada de la gente. Tras un par de horas de duro trabajo, todo quedó reluciente, como los chorros del oro. Iba a irme ya, de hecho estaba cerca de la puerta cuando Noona Sunmi me llamó.
- Jeon, ¿es tuyo esto o conoces el dueño?- Me enseñó un par de chaquetas.
- Mira... alguien se ha dejado un zapato...- comentó una chica cuyo nombre desconocía.
- ¿Solo uno?- preguntó un chico guardando las botellas en el bar.
- No, eso fue de la última fiesta, y lo han traído aquí.- Les dijo Noona Sunmi.
En ese momento recordé que cierta persona que conozco perdió un zapato en una fiesta, y no hablo de cenicienta.
- ¿Puedo verlo?- Pregunté, y ella me extendió el zapato.
Lo examiné, buscando pistas que me indicaran que era de Tae, pero era de lo más común. Eso si, estaba super desgastada y algo rota. Sin pensarmelo mucho, desenfundé mi teléfono que agradecí que siguiera en mi bolsillo y que nadie me lo hubiera robado, acto seguido, abrí el chat de mi acosador.
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