Blue.
Mientras estaba en mi descanso mantenía mi vista en el celular, ya habían pasado dos semanas desde que Kira me había besado y no habíamos cruzado una sola palabra desde entonces.
Sabía que no iba a poder corresponderle de la forma en que ella quería, simplemente sentía que eso no iba a pasar pues nunca le he podido ver de otra forma o siquiera se me había pasado por la cabeza. Sabía que debíamos hablar, pero no sabía en qué momento debería pasar aquello.
No supe cuánto tiempo había pasado hasta que pusieron un café frente a mis ojos. Al levantar la mirada vi a la rubia sentarse frente a mí.
—¿Un mal día?
—Solo pensaba. —Guardé mi teléfono rápidamente. —Muchas gracias, ¿Cuánto te debo?
—Oh no, invito yo. —Le sonreí agradecida, en este momento era lo que más necesitaba. —En realidad, me lo han dado al saber que es para ti.
—Me quieren en este lugar. —Ella se encogió de hombros. —¿Qué?
—Es algo normal.
—¿A qué te refieres?
—Eres una persona acogedora, Blue. —Ella me miró a los ojos haciéndome sentir nerviosa por un momento. —Además, yo creo que tienes muchos fans que disfrutan de tu atención y claro, de admirar tu belleza. —Ella desvío la mirada.
—¿Y tú?
—¿Y yo?
—¿Tú eres una de ellas? —Ella pareció sorprendida por mi pregunta, cuando ella abrió su boca para responderme mi jefa dio un silbido para decirme que vuelva a trabajar. —Era una broma, Zoey. —Toqué su hombro con una sonrisa antes de tomar el café y llevarlo conmigo a la cocina.
¿Qué se supone que estaba haciendo?
Cada vez que estaba con ella no medía mis palabras y hablaba sin pensar, ella era mi antiguo crush y ahora ella estaba casada con April. Ella era agradable y si quería que fuéramos amiga debía dejar de decir esa clase de comentarios.
Cuando llegué a casa, vi a mis padres en la sala viendo televisión, cuando fui a besar sus mejillas para saludarles la puerta de casa fue abierta y mi hermano entró rápidamente cerrando con fuerza la puerta antes de irse al segundo piso a su habitación, supongo.
—Ese mal genio viene de tu familia. —Mi padre fue el primero en hablar para ver a mi madre quien le dio un golpe en su hombro. —Auch.
—Son cosas de la adolescencia, supongo. —Dije encogiéndome de hombros. —Iré a ver qué le pasa.
—Les llegaré chocolate caliente. —Mi madre me dijo con una sonrisa antes de que iniciara mi camino en dirección a la habitación de mi hermano. Al entrar lo vi tirado en su cama y cuando me acerqué vi los moretones en su cara, volví a cerrar rápidamente la puerta de su habitación antes de sentarme a su lado. —Jacob, ¿Qué diablos?
—Fue ese imbécil de Troy. —Gruñó, vi que le había dejado un corte en su frente y solté un suspiro. Fui al baño de su habitación en busca del botiquín para limpiarle el rastro de sangre y curar sus heridas. —Sabes que no soy violento, pero ya colmó mi paciencia.
—¿Qué ha pasado?
—Yo estoy saliendo con su ex novia, lo cual le molesta tanto que suele burlarse de mi, normalmente lo ignoro, pero hoy habló de Alex y eso no lo dejaré pasar. —Le di una pequeña sonrisa antes de darle un golpe en su brazo sin importarme que le doliera.
—La violencia no sirve de nada.
—Me acabas de golpear. —Él hizo una mueca y yo solté una pequeña sonrisa.
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Cheating
Dla nastolatkówZoey creía tener una vida perfecta hasta que junto a su esposa vuelven a su ciudad natal en donde debe volver a plantearse todo cuando conoce a Blue, quien no solo le ayuda con los fantasmas que le atormentaban, sino que gracias a ella toma el valor...