Cheating

Capítulo 16

Blue.

Estaba haciendo un dibujo en la servilleta mientras esperaba a Alex y Kira que compraban la comida, la verdad me sentía algo rara con Kira desde que me había besado. Desde ese día había tomado distancia de nosotros y la verdad lo entendía, quizás no se sentía tan cómoda conmigo siendo que no le correspondía sus sentimientos y que tal vez solo necesitaba tiempo, al parecer así había sido y ese tiempo había terminado. Era extraño, pues a pesar de que había vuelto con nosotros, la sentía más lejos que nunca.

—Deberías dejar de gastar servilletas así, no es bueno para el ecosistema. —Alex me quitó el bolígrafo haciéndome fruncir el ceño.

—Desde que has visto esos documentales estas actuando más tonto de lo normal, Alex. —Me quejé arrebatándole rápidamente mi bolígrafo.

—Se llama conciencia ecológica.

—¿Sabes acaso lo que eso significa?

—¿Me estás diciendo idiota?

—Te estoy diciendo imbécil, las grandes empresas son el verdadero problema y que tú reduzcas el consumo de basura sólo...

—Blue, ten de mi pastelillo. —Kira puso un pastelillo en mi boca evitando que siguiera hablando, al menos estaba delicioso. —Un día de estos se terminarán matando el uno al otro.

—Por eso te adoramos Kira, siempre estás para evitarlo. —Alex le guiñó un ojo y ella nos sonrió, cuando nuestras miradas se cruzaron ella rápidamente la evitó. —Pronto es el cumpleaños de Blue, ¿Qué haremos este año? —Alex habló emocionadamente, era lo usual, él se emocionaba más por mi cumpleaños que yo.

—Podríamos ver películas o algo, lo usual. —Dije tratando de que me convencieran de usar mi casa para hacer una fiesta con la excusa de mi cumpleaños.

—Que aburrida, no porque estés saliendo con alguien mayor tienes que ser así. —Miré a Alex de mala manera y él me miró arrepentido rápidamente, sentí como un ambiente incómodo creció en el lugar y sorpresivamente fue Kira quien salvó la situación una vez más.

—Deja tus celos Alex, sabemos que también quieres alguien que te mantenga, pero no debes tratar a Blue así la que puede puede y ella definitivamente puede. —Reímos y en serio aquello me había relajado. —Pero de todas formas creo que deberíamos hacer una fiesta.

—Kira. —Me quejé.

—Vamos Blue, es tu cumpleaños número 22 y tú teniendo ese extraño TOC con los números pares deberías celebrarlo como corresponde.

—Lo que ella dijo.

—Oh, vamos es una excusa para usar mi casa para sus fines ambiciosos y consumir alcohol. —Ambos se miraron.

—No lo negaremos, pero tampoco lo aceptaremos. —Ambos dijeron a la vez haciéndome rodar los ojos.

—Vamos, probablemente sea el último año que podremos hacer algo así para tu cumpleaños, Blue. —Alex hizo pucheros, pero sólo le miré confundida, ¿A qué se refería? —Digo, es nuestro último año en la universidad y probablemente podríamos irnos de aquí, como a Nueva York o a otro país en busca de más y bueno, de exponer nuestro arte. ¿No?

—Además, si tenemos suerte trabajaremos y no tendremos tanto tiempo como ahora. —Aquello había sido como un balde de agua fría, nunca pensé en decir algo así, pero Kira y Alex tenían razón.

—Bien. —Ellos sonrieron ampliamente y yo solo podía pensar en qué pasaría luego de la universidad.

Estaba en mi habitación ordenando un poco pues Sasha había hecho un desastre con mis pinturas, pero no podía enojarme con aquella gata que había dejado sus huellas por toda la habitación. Para mí suerte no eran las pinturas excesivamente caras que me habían regalado la última vez.

Secaba a Sasha con la toalla cuando mi teléfono sonó, me era extraño que alguien me llamara a menos que fuese alguna clase de emergencia y al ver el nombre de Zoey contesté rápidamente.

—¿Zoey?

—Hey, hola.

—Hey, ¿Todo bien? —Pregunté rápidamente.

—Eh, si, supongo. ¿Todo bien también?

—Sip, ¿Ha pasado algo?

—Nada en específico, sólo quería llamarte. —Solté un suspiro algo aliviada. —¿Todo bien?

—Si, es solo que pensé que pudo ser algo importante. —Inmediatamente me di cuenta de lo que dije. —Digo, esto es importante, me refiero a algo como una emergencia o algo así.

—Tranquila, entiendo que como una buena joven ya no utiliza las llamadas si no es para algo urgente o para dar un aviso. —Solté una pequeña risa ante su tono de burla. —Por gente como tú ahora solo tengo en el correo mis facturas y no cartas.

—Hey, no me culpes de la globalización y el avance tecnológico en las comunicaciones. —Ella también rió. —Si quieres puedo enviarte cartas para que te sientas de tu época.

—Solo nos llevamos unos dos años.

—Casi tres.

—No es mucha la diferencia.

—No, no lo es la verdad. Aunque tú ya tienes un postgrado.

—Oh, se trata de empezar a sacar cuentas y todo eso.

—Nop. —Sonreí levemente. —Zoey, ¿Puedo preguntarte algo?

—Ya lo haces.

—Ja ja. —Rodé mis ojos.

—Adelante.

—¿Cómo supiste qué hacer luego de la universidad?

—Bueno, hice el postgrado con una beca que conseguí por mis calificaciones y la verdad tenía una idea bastante clara de lo que quería hacer, pero las cosas cambiaron cuando le ofrecieron el trabajo aquí a April. Supongo que por lo que estudie no tenía la libertad que posees para elegir qué hacer, ¿Eso te ha servido de algo?

—Sinceramente, no. —Ambas reímos.

—¿No sabes que hacer?

—Sé que quiero hacer arte.

—Tú eres arte, Blue.

—Buena labia, pero volviendo al tema, —Ella soltó una risa. —hasta Alex sabe que quiere hacer, normalmente se supone que yo soy quien controla mucho su vida y esa clase de cosas.

—Aun te queda este semestre y el próximo, es un tiempo corto, pero probablemente pueda ayudarte a deslumbrar tu camino. Está bien a veces no saber que pasará el día de mañana, lo importante será cuando tomes la decisión sea lo que a ti te hará feliz no al resto.

—Gracias, Zoey.

—Por nada, Blue.

—Ahora, ¿Quieres tener sexo por llamada?

—¡¿Qué?! —Alejé un poco el teléfono.

—Es una broma, sólo bromeo, a menos que quieras.

—¡Blue!

—¿Entonces no quieres?

—Si, digo no. Digo, diablos. —No pude detener mi risa ante sus balbuceos. —Quiero, pero ahora estoy con Aaron y está tratando de quitarme el teléfono.

—¡Si quieres puedes venir y las dejo a solas! —Escuché de fondo a su amigo y solo sonreí.

—Aaron, basta. —Escuché un ruido que probablemente haya sido un golpe. —En otro momento será, eso tenlo claro.

—Lo estaré pensando.