Zoey.
Miraba las fotos de Blue una y otra vez, no podía sacarla de mi mente incluso en medio de mi trabajo a veces me detenía a pensar en ella. Le había dado su espacio, pero debía hablar con ella, debíamos hablar y sabía que Blue era la clase de persona que una vez las cosas se calmaran aceptaría hacerlo. Incluso si hablar con ella significaba terminar todo, necesitaba hacerlo para al menos tener un poco de paz, aunque una parte de mi sabía que eso dolería más de lo que imaginaba e incluso pensaba que no podía perder a Blue de esta manera, no por esto.
Cuando vi a su hermano haciendo un examen mi ansiedad crecía, tome un momento mi celular para escribirle y pedirle unos minutos, pensé que como siempre ella no respondería, pero lo hizo. Ella había aceptado. Ahora bien, no sabía que decirle exactamente, pero supongo que viéndole lo sabría.
—Hace un poco de calor, ¿No? —Dije mirando por el ventanal de la cafetería, llevamos sentadas ahí al menos 5 minutos en silencio.
—Supongo, estamos en Dallas. —La miré y ella estaba cruzada de brazos. —Zoey...
—He sido una idiota estas últimas semanas, créeme que lo sé. —Le interrumpí. —Mi intención nunca ha sido hacer las cosas más difíciles, pero de alguna forma April me hizo perder el control y el miedo a perderte también. Sabía que esto pasaría cuando note que April sentía algo por ti.
—Hubiera sido de ayuda saberlo. —Ella desvío la mirada. —Las cosas se pusieron confusas y se salieron de control.
—¿Ibas a decirme lo del beso? —Aquello se me había escapado.
—Si, pero una vez hablara con April pues hasta ese momento no había notado sus sentimientos hacia mí. Habían pasado apenas tres días y cuando nos viste en la cafetería fue algo completamente improvisado, no es que quisiera ocultarte algo ni mentirte. April a pesar de todo es alguien importante para mí, ella salvó mi vida y estuvo acompañandome en mi proceso de recuperación. —Ella miró su taza de té unos segundos antes de mirarme. —Siempre tuve un miedo a perderte, mi mente suele hacerme pasar por malos momentos constantemente y sentí que si te decía mis pensamientos o te demostraba lo dañada que estoy podrías irte para encontrar algo mejor, pues es lo que te mereces Zoey.
—Blue, yo nunca te hubiera dejado por algo así. —Tomé su mano rápidamente.
—La parte racional lo sabe, eso me mantenía a flote. Pero mi otra parte no iba a permitirte entrar, era más fácil dejar entrar a mis amistades, incluso a April, pues no es lo mismo. —Ella soltó un suspiro. —Y esto no es justo para ti.
—Blue, sé donde lleva esa frase. No eres tú quien determina algo así, si tu quieres estar conmigo y yo contigo podremos superar cualquier cosa.
—Ese es el tema, Zoey. Yo no quiero estar contigo. —Solté su mano y durante el proceso ya le sentí lejos pues no pensaba escuchar aquello, sabía lo que podía suceder, pero eso no significaba que era menos difícil. —No me malinterpretes, por favor. Zoey, yo te amo, tenía este pequeño enamoramiento por ti desde el instituto y todo esto me parecía un cuento de alas, o unas de esas novelas que tanto me gustaban leer creyendo que de alguna forma siempre los protagonistas podían terminar juntos o juntas. Pero esta es la realidad, y por el simple hecho de que te amo es que quiero lo mejor para ti.
—¿Tú sientes algo por ella?
—No se trata de eso, Zoey. —Ella soltó un suspiro. —Para tu tranquilidad nunca vi a April como algo más que una amiga, pero como te digo no se trata del hecho de sienta algo por ella o no. Esto se trata de tú y yo.
—Sólo estoy tratando de asimilar todo, Blue. No es nada fácil esto y duele. —Ella me miró a mis ojos y note la tristeza en ellos. —Podríamos intentarlo si quisiéramos.
—¿Para terminar peor que esto? —Aquella pregunta me dejó sin palabras. —Zoey, estoy mal e inestable. El tema de mi padre desequilibró todo y aún trato de poner mi vida en orden, es difícil en varias ocasiones y todo este tiempo he tratado de no arrastrarte a esto.
—No se trata de arrastrarme, se trata de que puedas sentir mi apoyo, Blue.
—¿Hasta que punto?, cuando te lo conté me veías tan frágil hasta el punto de no querer acostarte conmigo y sé que es valorable, pero me hacía sentir peor. ¿Qué pasará el día de mañana si lo intento nuevamente?
—Trataremos de que no pase.
—Cuando lo intenté, estaba feliz de estar contigo, pero mi mente me lleva más allá, Zoey. En este mismo momento no tengo duda que si en algún momento mi mente me lleva tanto a eso, podría hacerlo otra vez. —Sentí como mi cuerpo se paralizó de solo pensar que algo podría pasarle. —No quiero hacerte pasar por eso, y esta es mi decisión.
—Pero Blue, tú mejorarás.
—Zoey, te diré algo que nunca he hablado con alguien más allá de mi familia y Alex. Suelo decir que tengo depresión para evitar sentirme juzgada, más de lo normal, por una sociedad que no se preocupa de la salud mental. Yo en realidad soy bipolar, tiendo a mantenerme estable bastante tiempo y mis episodios depresivos no suelen ser muy duraderos para mi suerte.
—Eso no es una justificación. —Ella hizo una mueca. —Y agradezco que me lo hayas dicho y confiado en mí para esto, pero Blue podemos superar todo esto y trabajarlo en conjunto.
—Zoey, es que no lo entiendes. Es mi decisión el terminar esta relación por tu bien, sé que ahora no lo puedes ver así, pero creeme que es lo mejor, para ambas. —Solté un suspiro, al menos tenía razon en el hecho de que no lo podía ver así. —Me iré a Nueva York.
—¿Cómo?
—Me quedan dos semanas para terminar la universidad y una artista se interesó en mi trabajo y quiere ser mi maestra, por eso era importante mi exposición en la galería el otro día. —Me sentí un poco culpable de caso arruinar su momento por pelear con April. —Así que me iré, ese era mi sueño desde hace años.
—¿April ya lo sabe? —Ella negó.
—No, quería que fueras la primera en saberlo. —De pronto mis lágrimas se acumularon en mis ojos. —Zoey...
—Supongo que hasta aquí llegó nuestra historia, ¿No? —Entonces ella tomó mi mano sobre la mesa. —Quizás por el hecho de que esto empezara como una infidelidad hizo que terminara así, o algo.
—No, no digas eso. Zoey, no tienes ni idea de cuánto te amo. Has sido una de las mejores cosas que me ha pasado en la vida, es por eso que quiero que al menos termine bien. —Asentí.
—Lamento ser una idiota el último tiempo.
—No te preocupes de eso, todos somos idiotas. —Eso me hizo soltar una pequeña risa aunque dejé escapar la primera lágrima. —Te amo, Zoey.
—Te amo, Blue. —Agarré con un poco más de fuerza su mano, creyendo que así evitaría que se fuera.
Luego de que se marchara, me quedé un tiempo más en la cafetería para digerir todo lo que había pasado, era doloroso y quería tener un momento para mí antes de ir a llorar sobre Aaron. No podía evitar sentir un poco de responsabilidad dentro de esto, las cosas habían marchado bien y de pronto todo estalló, sabía que ella necesitaba tiempo, pero la verdad es que jamás pensé que todo terminaría. Al menos, me podía sentir feliz por ella al saber que estaría cumpliendo su sueño de irse a Nueva York y demostrar que era una gran artista, yo no podía evitar aquello, sabía lo que significaba el posponer los planes y sueños por alguien más, tampoco podría seguirle para tratar de solucionar las cosas, tenía que respetar su decisión por mucho que doliera, y además, yo tenía un contrato con el instituto por un año más. Sabía que para Blue también era difícil esto, no tenía ninguna duda por esto, como también sabía que ella siempre pospuso su vida por las demás personas y trato de hacerles sentir la máxima felicidad posible, y ella por primera vez en mucho tiempo estaba viviendo su vida y tomando sus propias decisiones, tenía que dejarle ir aunque doliese. Y entonces lo supe, era momento de encontrarme a mí misma, había pasado tanto tiempo en una relación y luego con Blue que note que nunca había estado sola conmigo misma para saber quién era ahora, qué sentía, curar mis heridas como iniciativa propia. Quizás también debería tomarme un tiempo conmigo después de todo.
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Cheating
Teen FictionZoey creía tener una vida perfecta hasta que junto a su esposa vuelven a su ciudad natal en donde debe volver a plantearse todo cuando conoce a Blue, quien no solo le ayuda con los fantasmas que le atormentaban, sino que gracias a ella toma el valor...