Capítulo 21: Visita inesperada

10.7K 515 137
                                    

— Ya no falta mucho tiempo, todo está casi listo, pero necesitamos que ustedes como profesores nos apoyen con la organización de la fiesta. En este caso, sólo formé dos grupos, pero los chicos votaron por uno en específico, y sólo gracias a ellos, los encargados serán Charles, Adam y David para organizarse con lo último que falte. ¿Estamos todos?.—

Al escuchar las palabras de la directora, la mirada de Adam cayó sobre mí más rápido que un rayo.
Yo también le miré, estaba más que disgustado por las decisiones de Kalissa.

— Matthew y yo podemos solos— enunció mi amigo, levantando su mano para mostrar su desacuerdo.

— El profesor Jones se ofreció a participar. No lo dejaremos fuera, ya está decidido.— respondió Kalissa.

Adam respiró hondo, pasando una mano por su cara para despejarse de la molestia que ya es más que notoria.

— Bien. ¿Algo más qué decir, Grant?— preguntó la directora, y mi amigo no volvió a decir nada al respecto, ni siquiera le prestó atención. — ¿O tú, Charles?—.

Entre abrí mis labios sin saber qué responder a eso. No conozco para nada a David, y siendo sincero, no me siento cómodo con él, ni me agrada tanto con sólo mirarlo, y por sus actitudes pasadas.

Y no es que yo sea un celoso, por el hecho de que Jones me está robando mi papel del profesor más joven y apuesto en todo el instituto, sólo es que sinceramente, no me agrada el hombre.

— Adam tiene razón en que él y yo podríamos trabajar solos, sumándole que el profesor Jones es nuevo en el instituto, por lo que será difícil que sepa tanto acerca de los gustos de los estudiantes. Pero finalmente es decisión suya, no nuestra.— respondí.

No se dijo nada más sobre el tema. Kalissa salió de la sala, y la mayor parte de los profesores presentes también se marchó.

— Me dueles, viejo amigo. ¿Por qué no quieres trabajar conmigo?, me encantaría servir de algo— habló David, llamando la atención de mi amigo y la mía. La sonrisa que mantiene en el rostro no me transmite nada de confianza.

— Ni amigos fuimos, ni sirves de nada— contestó Adam, otorgándole una falsa sonrisa, y David sólo se rió como si de verdad le hubiese causado gracia.

— Más tarde podemos ponernos de acuerdo, ¿les gustaría ir a mi casa para ello?— propuso el intruso.

— Será mejor en mi departamento. Vayan ahí, te mando mi ubicación, Jones.— anuncié poniéndome de pie con mis cosas. — Los veo en dos horas—.

¿Será posible que David pueda agradarme?. Esto no se trata de la secundaria o incluso la preparatoria, en donde dos compañeros podrían caerse bien, o llevarse mal. Somos adultos, y ahora somos los profesores que deben mantenerse en una línea, ya no se trata de ser amigos. Sólo trabajamos juntos, y es todo.

🕓 🕓🕓

Busqué la llave de mi departamento, entre las que cuelgan de mi llavero de un mini funko pop del Capitán América, que me regaló mi madre el año pasado. Fue lindo que lo viera en el súper y recordara mis gustos.

Fruncí el ceño en cuanto escuché más de una voz dentro. Se supone que hoy Paul debería estar solo, aunque también se supone que desde hace más de una hora estaría visitando a mamá.

Supuse que la puerta estaría abierta, así que giré la manija logrando abrirla, permitiéndome la vista al interior de mi hogar.

— ¡Hola!—

La dulce y animada voz de Samanthe me sorprendió, provocando que una sonrisa se formara en mi rostro, al mismo tiempo que dejaba mis cosas sobre el escritorio.

La Ciencia de tu AmorDonde viven las historias. Descúbrelo ahora