Odio Amarte

Capítulo 19

He visto muchos de estos casos en Internet. De chicas y chicos que se auto lesionan como solución o escape a sus problemas. 

No sé cuales son los motivos de ésta chica pero la debe estar pasando muy mal. Me percato de que solo sé que es compañera de Niall pero que no la veo en los pasillos, ni el almuerzo y mucho menos fue al campamento. 

La chica frente a mí, no se percató de mi presencia hasta que pudo verme detrás de ella  por el espejo. De inmediato cubrió su muñeca y volteó a verme, las lágrimas caen de sus ojos como cascada. 

Por instinto me arrimo y la abrazo sosteniéndola fuerte. No es pena, pero sé que en su lugar, no querría sentirme sola. La chica, cuyo nombre desconozco, corresponde a mi abrazo, pero de inmediato me suelta, limpiando sus lágrimas. Su muñeca no para de sangrar, sin decir nada, tomo su mano y lavo su muñeca. De mi bolso saco la gasa que envolvía mi brazo cuando Trevor me lastimó y la envuelvo en su muñeca. 

-Gracias – Logra pronunciar y le sonrío sin mostrar mis dientes. No sé qué decir. 

-¿Hay algo más en lo que pueda ayudarte? -Pregunto y niega con la cabeza.

-Lo que acabas de hacer es más que suficiente porque nadie lo había hecho por mi jamás. 

Se me estruja el corazón.

-También  te maltratan ¿verdad? –Le pregunto de una manera en la que sienta que no es la única y que la entiendo. Ella agacha su cabeza y asiente.

-Trevor – Sus lágrimas vuelven a aparecer –Desde que llego al colegio hasta que llego a mi casa, ni siquiera fuera de la institución me dejan en paz -Suspira.

No sé qué decirle. Siempre pensé que era la más maltratada del colegio, pero a pesar de todo lo que Liam me hacia, jamas se me corrió siquiera acudir a esto, la pasaba mal pero no sufría tanto porque además siempre tuve la compañía y apoyo de Scarlett.

-Sophia y sus clones de plástico – Sigue – Se encargan todos los días, de recordarme lo fea soy.

Sophia claro, la reina de las perras, esto no me sorprende para nada.

-No entiendo ¿Sabes? No entiendo que fue lo que les hice, para que me traten así – Eso es lo que yo no entendía – Me hacen sentir tan vulnerable y poca cosa, hacen que me odie – Más lagrimas caen de sus ojos – Y lo peor de todo, es que no pudo hacer nada para cambiarlo y en vez de intentarlo, me encierro en mi habitación a hacer esto – Levanta su brazo – Hago esto, porque no sé qué hacer, porque es lo que merezco.

-No, claro que no – Por fin puedo hablar – No mereces esto, nadie lo merece – Hago que me mire – Primero: No eres  fea, eres hermosa – Ella blanquea sus ojos y niega con la cabeza – Si, lo eres, lo que esas huecas dicen, lo hacen para sentirse bien con ellas mismas, no es verdad. 

-Segundo: Claro que puedes hacer algo para cambiarlo, habla, grita, di cómo te sientes, la única que puede hacer que las cosas cambien eres tú y puedes hacerlo, comenzando por no culparte, al a hacer esto te culpas y te castigas cuando los únicos que merecen un castigo son ellos. 

-Yo... yo – Sonríe, pero su rostro de torna sufrido de nuevo – No tengo el valor...

-¿Nunca pensaste que, si le contaras a alguien, podrían ayudarte y así dejarías de hacer esto? – Ella agacha la cabeza y niega. 

-Acabo de darme cuenta – suelta una carcajada pero con cero gracia – Creo que, para mi es más difícil porque, yo no tengo amigos, mis padres fallecieron hace años y solo tengo a mi abuela, no quiero llevarle problemas... no tengo a nadie.

Vuelvo a abrazarla fuerte y sus lagrimas se desprenden de nuevo, siento entrar por mi pecho su dolor y desearía poder tomarlo todo, echarlo en un frasco y tirarlo lejos.