Capítulo 22

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Me abalanzo contra el y lo empujo acorralándolo contra la puerta. 

-¿Qué pasó anoche? -Pregunto entre desesperada y molesta. Si este imbécil se atrevió a tocarme en las condiciones que estaba... Me da miedo siquiera pensarlo, me provoca querer llorar.

-Le metieron algo a tu bebida e intentaron... abusar de ti -Dice esto último como si no quisiera admitirlo- Entré a la habitación a sacarte antes de que pasara, de todos modos.

-Entonces fue Trevor -Afirmo y por la expresión en el rostro de Liam, no esperaba que lo recuerde.

De repente quiero llorar, ese hijo de puta se pasó de la ralla y Liam ni siquiera es capaz de admitir que su amigo casi me viola. 

Otro flashback aparece por mi cabeza y recuerdo su conversación, en la que hablaban de que como Trevor estaba haciendo lo que Liam no hacía ¿Acaso era Liam el que pretendía violarme? Y lo decían como si fuese un trabajo por el que les pagarían.

Me invade el miedo y se me revuelve el estomago. El pánico hace que me den ganas de vaciar lo que tengo en el estomago así que busco donde vomitar. Liam se da cuenta y me arrastra al baño donde descargo todo en el inodoro. 

Liam me sostiene el cabello con una mano y acaricia mi espalda con la otra. 

-Suéltame, ¡no me toques! -Le exijo como puedo pero no se detiene. 

-Lo siento tanto, Amy.

-No. No lo sientes -Digo levantándome luego de limpiar mi boca con el dorso de mi mano. Suelto un sollozo y sigo- No tienes idea de lo que se siente ser tan vulnerable, haber estado expuesta a que hagan lo que quisieran conmigo por una apuesta, por un reto o lo que sea que tramen ustedes dos pero querían hacerme daño.

-No, no, no -Liam me toma por los brazos intentando calmarme- Nadie iba a hacerte daño, Trevor solo quería asustarte...

-¿Quería asustarme? -Suelto sarcástica- ¿Estás defendiendo a un violador? ¿Tienes miedo de que denuncie a tu amigo y a ti por cómplice?

Liam niega con la cabeza.

-Haz lo que tengas que hacer pero te juro que solo se le fue de las manos. Por suerte estuve ahí para que no pase nada.  

Intento zafar de su agarre pero me sostiene con fuerza.

-¿Pretendes que me quede conforme con saber que siempre supiste sus intenciones y me ayudaste antes de que pase a mayores?

-No, no lo sabía ¡Te lo prometo! -Me toma de el rostro obligándome a mirarlo a los ojos- No sabía nada, solo vi cuando te arrastró por las escaleras y fui a pararlo de inmediato, jamás me imaginé que haría eso. Tienes que creerme -Suplica

Niego con la cabeza obligándome a no hacerlo, a no creerle. Solo quiere defender a su amigo y salir ileso, solo quiere...

El recuerdo de él consolándome viene a mi cabeza, acariciándome y tranquilizándome. 

-Jamás te haría algo así -Pega su frente a la mía con los ojos cerrados- y te prometo que jamás volveré a hacer algo que te lastime.

Cedo y lo abrazo aun llorando. 

Le creo.

Quizá sea una estúpida pero me siento segura en sus brazos en este momento. Siento que aferrándome a él el miedo se desvanece y lo que ocurrió la noche anterior pasa de ser un hecho a una pesadilla. 

-¿Por qué lo hizo Liam? ¿Por qué quería asustarme? -Pregunto con el rostro aun enterrado en su pecho- Dime la verdad, por favor, basta de misterios y secretos. 

Odio AmarteDonde viven las historias. Descúbrelo ahora