Nelson
-¿Te escapaste?- Preguntó Natasha caminando a mi lado.
-Te dije que lo haría.- Sonreí.
Natasha me devolvió la sonrisa y sacó el celular del bolsillo de su pantalón observando la pantalla.
-Púes, me enorgullece que te hayas escapado pero, tú eres un niño bueno y tienes que volver temprano a casa.- Se cruzó de brazos.
Fruncí mi entre ceja y paré en seco observándola.
-¿Hablas enserio?-
Natasha asintió elevando una ceja.
-No quiero que te regañen, bebé.- Comentó acercándose.
¿Enserio, Natasha me acaba de llamar "bebé"?
-Yo quería quedarme un rato más contigo pero, ya que insistes.- Me di la vuelta y comencé a caminar.
Pude haber venido en mi camioneta pero demás está decir que me escapé y me hubieran descubierto.
-¡Espera!- Me detuvo.
Sonreí para mis adentros y me di la vuelta esperando a que comenzara a hablar.
-No creo que pase nada si llegas un par de horas más tarde.- Dijo jugando con sus dedos dulcemente.
En mi rostro se dibujó una sonrisa y nuevamente me acerqué a ella.
-Igual no me iba a ir, princesa.- Agarré una de sus manos ya que pude darme cuenta que el juego con sus dedos se debía a que estaba nerviosa.
Ella encontró su mirada con la mía y me dio una sonrisa de boca cerrada, sus mejillas tomaron color y su mano acarició la mía ligeramente.
Me estás volviendo loco, Natasha.
Nuestras manos estaban unidas, mientras nos observábamos fija y dulcemente.
Sus ojos y su sonrisa, son la combinación perfecta.
-No sabía que había algo entre ustedes.- Comentó Diego acercándose.
Nuestras manos no se soltaron, pero nuestras miradas se despegaron.
-No es mi problema pero, ustedes no coinciden en nada.- Nos observó de arriba a abajo. -Son tan diferentes.-
Ignorante.
Dicen que polos opuestos se atraen.
Natasha apretaba mi mano con cada palabra que Diego pronunciaba. Lentamente la soltó y se sintió tanto frío en la palma de mi mano sin la suya; se acercó a Diego, la distancia era mínima entre ellos y yo sólo observaba cada pasa que ella daba, evitando que la sangre me hirviera por su cercanía.
-Nadie te ha preguntado.- Susurró fríamente, dicho esto dio un paso atrás colocándose nuevamente a mi lado. -Me disculpas pero, creo que el ambiente se puso muy pesado con tú presencia, así que nos retiramos. Que te vaya bien, Diego.
Es tan impresionante la forma en que puede cambiar su tono de voz en cuestión de segundos.
Pero me llama aún más la atención, observar que su comportamiento con otras personas es tan frío y rudo, pero que conmigo puede llegar a ser la chica más linda y cariñosa de todas. Simplemente, conmigo todo es diferente.
Seguí a Natasha en silencio.
Dejamos a Diego sólo y la verdad no me siento mal por eso.-Oye, intimidas con el tono de voz que aveces usas.- Comenté riendo.
Natasha se detuvo, me observó y sonrió.
¡De eso hablo!
Hace un segundo miraba a actuaba con desprecio y fría, ahora me observa y sonríe dejándome ver más allá de ella.
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Conexión Desconocida
Fiksi Remaja"Porque todo lo bueno comienza con un poco de miedo..."