Stephanie lo calcula todo, cada palabra que dice, cada movimiento que hace, nada se escapa de su radar. Ella tiene una vida aburrida según su mejor amiga Ali y aunque ella la considera normal, ya está cansada de ser la aguafiestas siempre, por eso a...
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Subo y bajo su perfil, esperando no sé qué. Ya había borrado todas nuestras fotos juntos. Debía dejar de torturarme tanto.
Me desperté demasiado temprano para ser un sábado, ya había comenzado la rutina de madrugar para llegar a clases y creo que mi cuerpo ya se había habituado por lo que no me dejaba dormir hasta tarde.
No solo era por eso, también porque no tenía amigos con quien pasar el tiempo así que iba temprano a dormir. No recibía llamadas ni mensajes y tampoco tenía planes que hacer.
Papá intento animarme invitándome a su oficina, como ya había terminado el verano casi no tenía trabajo en la inmobiliaria. Gran parte del trabajo duro era en la temporada de verano, donde familias y jóvenes de distintos sitios alquilaban residencias únicamente por la temporada. Al comenzar las clases y con cada quien en su ciudad era poco el trabajo, nadie sería capaz de hacer una mudanza cuando comenzaban las clases.
Pase la mayor parte del tiempo girándome en la silla de su escritorio mientras él hacía unas llamadas. Lo extraño era que el sonido de su voz haciendo negocios era casi hipnotizante.
¿Estaría alguna vez de ese modo? Recibiendo llamadas, haciendo otras como una empresaria. No sé si podía verme así, aún no tenía en claro que hacer. Recuerdo lo que Alex había dicho cuando conocí a Lucia: "deberías seguir algo relacionado con la moda". Admire tanto su seguridad, y la facilidad con la que había tomado su decisión, yo todavía no sabía ni qué hacer mañana y mucho menos en un futuro próximo.
"Moda", retumba en mi mente esa palabra por unos segundos. No había tocado una máquina de coser o una aguja en al menos dos años. Era imposible verme en eso, ni siquiera tenía sentido de la moda, hoy llevaba puesto mi viejo short, una remera blanca y mis converse gastadas.
–¿Qué opinas de que estudie diseño? –le pregunto a papá cuando acaba la llamada.
Se toma un tiempo pero responde supongo que lo habré tomado desprevenido– Lo que quieras estudiar por mí está bien, solo quiero que seas feliz.
–Si, bueno..a decir verdad esa respuesta no me dice nada –me siento de mal humor de nuevo y le doy una vuelta más a la silla.
–Cuando termine por dedicarme a esto fue porque mi padre me lo legó y resolvió así tu pregunta. Nunca me cuestione que estudiar o si estudiaba algo o prefería trabajar. Yo deseo darte la libertad de poder elegir pero sé que esa libertad a veces puede aterrarte un poco por eso quiero que sepas que estoy feliz de que tengas opciones y que una de ella es equivocarte también.
–Bueno, al menos en eso último soy bastante buena –digo desanimada y noto la preocupación en el rostro de papá lo que hace que me arrepienta de decirlo– Estaré bien, papá.
–Lo se. Eres la persona más fuerte que conozco supongo que eso lo heredaste de tu abuela –sonríe. No sé si me sentía muy fuerte ahora pero me agradaba parecerme a mi abuela.
