~ Capitulo #34 ~
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— Cielo desestabilizado —
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~ Mientras tanto, algo lejos de aquella zona ~Desde la cima de una colina, un azabache de algunos 30 años observaba lo que antes era la mansión en la que había estado viviendo los últimos días. Observaba como aquella enorme casa volvía a su estado original, una simple mansión abandonada.
— "Hm, a pesar de ya haberlo visto, no puedo evitar asombrarme por la increíble habilidad de ese sujeto" — dijo a sus adentros Baldassare.
De pronto algo captó su atención, podía oír pasos acercarse a él con cierta calma. Al principio se puso a la defensiva pensando que podría tratarse de algún enemigo, pero bajo su arma al ver quien había llegado para hacerle compañía.
— Eres solo tu mocoso — dijo con cierto desinterés al identificar al menor. — Hey, ¿Dónde está tu...? — detuvo sus palabras al ver como el pequeño comenzaba a colapsar.
El cuerpo del menor cayó desplomado al suelo, mostrando un difícil respirar. No había perdió la conciencia, sin embargo, le era casi imposible mantenerse de pie. A duras penas, se las arregló para sentarse en el suelo. Desconocía por completo el tipo de bala que había utilizado aquel arcobaleno, pero sin duda había logrado causar un gran daño en él, al grado de deshacer la mayoría de sus ilusiones perfectas.
— Oye mocoso, ¿Qué rayos te paso? A caso te topaste con alguien que no podías manipular — comentó burlesco el mayor, observando con altanería al chico en el suelo.
Por su parte, no podía hacer más que mirarle molesto. Pero más pronto que tarde, su típica sonrisa volvía a formarse en sus labios.
— Juju~ Lo mismo podría decir yo — contraataco con cierto tono de burla, haciendo que Baldassare frunciera el ceño. — Por tus ropas dañadas parece que no tuviste una lucha fácil. Dime, ¿Acaso ese ilusionista de cuarta fue demasiado para ti? — se burló Basilio.
— Tks, Daemon no es alguien que debes tomarte a juego. Podrá parecer una simple fruta sin cerebro y con alto orgullo. Pero ese sujeto es alguien de temer cuando se pone serio — argumento Baldassare al recordar su reñida lucha contra la niebla de vongola.
— Juju~ lo sé, conozco a alguien que se le parece — murmura por lo bajo Basilio, teniendo la imagen de cierta piña en su mente.
Una vez recuperado el aliento, Basilio reincorporo su postura. Si bien aún se sentía débil, el aparente infante logró disimular su malestar a la perfección, ocultado por completo su estado vulnerable.
— Juju~ lo mejor será no perder el tiempo. Ya que ese odioso arcobaleno se ha reunido con vongola y han recuperado a su cielo, no tenemos armas que usar en su contra — señaló el menor, esta vez sin rastros de juegos en sus palabras, más bien pareciera que se había tomado con seriedad la situación. — Odio admitirlo, pero ahora no somos rivales para ellos —
— ¿Y, que planeas ahora enano? — cuestiono Baldassare.
— Volvamos a la mansión principal en Ragusa. Por ahora no tenemos nada más que hacer aquí en Catania — ordenó de forma seria, así mismo dio media vuelta para luego comenzar a avanzar. — "Nos veremos cuando hayamos recuperado nuestros cuerpos, hasta entonces te dejare en las sucias manos de vongola mi cielo. Aunque me pregunto si su relación será igual de estrecha después del regalito que te deje" — dijo a sus adentros, mostrando una sonrisa retorcida.
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¡De mafiosos a Niñeras!
FanfictionUnos pequeños llegan a la vida de Giotto y sus guardianes, 8 infantes que pondrán vongola de cabeza... Los infantes no logran recordar nada de su pasado, poniendo a los jóvenes vongola en dudas sobre los niños. ¿Quienes son estos niños?¡Por que...