Leave out all the rest. |Mikey Way|

8. Bad day - Daniel Powter.

Llegué a casa corriendo. Había tardado más de lo planeado en la casa de Michael, debido a la charla con Donna, pero aun así no me arrepiento. Esa pequeña conversación, me había motivado aun mas a seguir adelante. Entré a mi casa, agitada, fui hacia mi cuarto, y le sonreí a Annice, que estaba sentada en mi cama con una mirada de preocupación. 

-¿Qué pasa amiga?

-engañé a Joseph. –soltó repentinamente. ¿Esa era la urgencia? Bueno, cada cual tiene sus problemas, y si para ella eso era importante… no debería juzgarla.

-¿pero por qué?

-es que… conocí a un chico. Se llama Andrew, y es muy lindo conmigo. Primero nos hicimos amigos, y me invitó a salir. Nos besamos, y bueno… me dejé llevar. –se enrojeció, y bajó la mirada

-¿Qué? ¿Te acostaste con él? –pregunté sorprendida. Esa mirada suya, solo podía significar eso. Ella asintió con la cabeza.

A partir de ese momento, desconocí a mi mejor amiga. ¿Qué pasó con ella? Ella era la típica chica, que nunca tendría relaciones sexuales con el primero que encontrara. ¿En que momento cambió tanto? Lo peor, era saber que ella seguramente viene cambiando hace tiempo, y yo nunca lo noté. ¿En que estaba ocupada mi mente en lugar de mi mejor amiga?

-pero Annie… lo conociste hace poco…

-¡estaba buenísimo! No es mi culpa, vos tendrías que verlo. Aunque sigo sintiéndome mal, ¿y si Joseph se entera?

-… ¿alguien más sabe? –ella negó con la cabeza. –entonces, si no querés que te deje, no le cuentes. Pero no vuelvas a hacerlo. A menos que quieras quedarte con Andrew.

-pero Tanya, no entendes. Yo no puedo controlarme cuando estoy cerca de Andrew, mis impulsos me controlan. No sé como explicarlo. 

-…- suspiré. –a alguno de los dos vas a tener que elegir, y con mayor razón si te sentís culpable.

Ella se limitó a mirarme fijamente unos segundos, y luego forzar una sonrisa. Se ve que no le gustó mi respuesta, pero ¿Qué más esperaba? Yo no le diría que estaba bien estar con ambos a la vez. Se formó un silencio incomodo, que nunca antes tuve con ella, y eso me pareció extraño.

Ya no éramos las mismas. Ésta amistad ya no estaba funcionando. Y aunque no lo pareciera, eso me apenaba. Supongo que ella también se dio cuenta de ésto, ya que su mirada esquivaba la mía todo el tiempo, cuando en otro momento anterior, ya estaríamos bromeando en esta situación. 

-bueno, yo… tengo que irme, pero después hablamos ¿si?

Al cabo de unos minutos, se retiró. Y yo quedé sola en mi cuarto pensando. ¿En que momento todo cambio? No lograba entender el motivo que desembocó en ésta situación. Ni Annice ni yo deberíamos haber cambiado, tendríamos que ser las mejores amigas que siempre fuimos, no esta actuación que acabábamos de tener. Nada de esto debería ser verdad.

¿A dónde estaba dirigiendo mi vida? ¿A dónde se estaba dirigiendo la suya?

Solté un grito frustrado, y decidí ir en busca de un café. Una vez que ya lo tenía entre mis manos, me senté en el sillón a pensar sobre todo lo sucedido últimamente. No podía creer como mi vida había cambiado tanto en menos de un año. Antes, mi amistad con Annie era lo que más me importaba en la vida, parecía indestructible, pero ¿y ahora? 

Apareció Michael, con su sonrisa tímida, sus notas en hojas blancas, sus silencios, su timidez, su todo. Él aun era alguien reciente en mi vida, pero ¿Por qué se había metido tanto en mis sentimientos, si yo para él apenas soy una más? No estoy segura aun de ser su amiga, así que ¿Por qué yo ya estaba tan involucrada con él?