Capítulo 7

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✧・゚:* Romper las reglas *:・゚✧

Algún desconocido siempre dejaba comida en una caja en medio del bosque, era extraño, porque muchas veces dejaba waffles y solo los chicos y yo sabemos que Eleven ama los waffles

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Algún desconocido siempre dejaba comida en una caja en medio del bosque, era extraño, porque muchas veces dejaba waffles y solo los chicos y yo sabemos que Eleven ama los waffles. Esa persona de seguro conocía a los chicos y sabía que estábamos vivas, pudo habernos atrapado, pero no lo hizo.

Nuestro plan era esperar hasta la noche para averiguar quien era esa persona y el por qué nos dejaba comida.

Al descubrir quien era, rápidamente lo seguimos antes de que se alejara y el hombre se dio cuenta de nuestra presencia, gracias a el sonido de nuestras pisadas contra la nieve y se giro a vernos. Se quito su sombrero con una expresión que no pude descifrar, pero fue algo cercano al alivio.

—A levantarse —abrí los ojos y lo vi parado en la puerta, me di la vuelta cubriéndome completamente con las cobijas—. ¿Así que aún siguen enojadas?

Eleven estaba debajo de las cobijas conmigo, podía verla por la poca luz que atravesaba las cobijas.

—De acuerdo, supongo que tendré que disfrutar solo de la torre triple de waffles —en cuanto dijo eso, Eleven abrió sus ojos en sorpresa.

Maldito Hopper, el barbudo sabía que si convencía a Eleven, ella me convencería a mí.

La chica me suplico con la mirada y en ese momento, mi panza sonó, dando a entender que quería de esa torre y nos levantamos en dirección a la cocina. Hopper nos miro, lo mire mal y él intento ocultar una pequeña sonrisa de triunfo, mientras ponía en la mesa el plato con la torre mencionada.

Juraba que mi panza se escuchaba hasta las afueras de Hawkins con tan solo ver las chispas de chocolate y la crema batida. Nos sentamos en la mesa y el hombre partió la torre en tres, lamió el cuchillo que tenia crema batida e hizo la misma cara que con los chícharos.

—¿Saben que es lo mejor? Tiene apenas ocho mil calorías.

Con el tenedor tome un pedazo y me lo lleve a mi boca, el dulce sabor de la crema batida con las chispas de chocolate hicieron que mi boca se deleitara con el sabor. Cerré los ojos disfrutando y agradecí a quien sea que haya inventado todos estos alimentos.

—¿Volviste a verlo esta noche?

Abrí los ojos para mirarlo, se había dado cuenta de que teníamos la televisión en el cuarto, pero él sabía perfectamente que yo no necesitaba del aparato para verlo. Aún así, asentí lentamente y me lleve otro pedazo a la boca.

—Sé lo mucho que extrañas a tu familia y amigos... Van a verlos pronto en la vida real, no solo en sus cabezas. Siento que estoy avanzando con estas personas.

Tragué el waffle duramente y pegué con fuerza el tenedor contra el waffle.

—¿Pronto? ¿Tu tipo de pronto? —dudo Eleven ante sus palabras.

—Siempre dices eso, siempre dices "pronto" y ¡nunca lo haces! —Hopper me miro, a lo que me cruce de brazos enfadada—. ¿Cuando es "pronto"? ¿En 3 meses? ¿En un año? ¡¿Nunca?!

—No me hables así, jovencita.

—¡Entonces deja de mentir! —le apunte la cara con el dedo y pude ver por medio de sus ojos, como los míos brillaban de un intenso color azul—. ¡Siempre mientes!

Me fui de ahí sintiendo un intenso cosquilleo entre mis dedos, abrí la puerta de la habitación y la cerré de un portazo. Mi espalda choco contra el colchón y mire a la mesita de noche encontrándome con esa foto de Steve que robe antes de desaparecer, para luego tomar mi almohada y pegar mi rostro contra esta para ocultar un fuerte gruñido de frustración.

Pude escuchar los muebles de la casa temblar levemente.

Abrió la puerta de golpe y golpeo la punta de sus zapatos contra el marco de la puerta, sacando la nieve de sus zapatos. Hicimos lo mismo y mire el lugar que daba aires de ser demasiado viejo, era como si nadie hubiera puesto un pie aquí en años y el piso estaba cubierto de polvo, al igual que los muebles.

¿Qué opinan? 

Cerré la puerta para que no entrara el frío y me adentre al lugar para observarlo con detenimiento.

—Podemos arreglarlo —mire a Eleven—. Puede quedar bonito...

—Como un hogar —termino la frase ella.

Deje mi abrigo en el viejo sofá, Eleven se quito su gorra y paso su mano por su cabello corto, el cual me gustaba como le quedaba. Hopper saco un vinilo y lo puso en el toca-discos, en cuanto la música comenzó, el hombre se puso a bailar de una manera muy extraña, lo que nos causo risa a las dos.

—Manos a la obra.

Limpiábamos la casa, Eleven barría y bailaba mientras lo hacia. Bueno, solo se meneaba, pero se le veía muy feliz, de seguro por lo emocionada que estaba de ver como quedaría el lugar después de limpiarlo.

Durante el transcurso de los días, la pequeña cabaña se iba convirtiendo en un verdadero hogar para nosotras. Hopper llego a enseñarnos sobre el código morse y el montón de vinilos que tenía, con los cuales nos poníamos a bailar cuando estábamos aburridas de ver televisión o de jugar con los juegos de mesa.

También nos enseño sobre el cable trampa, que si alguien lo tocaba, haría un sonido tan fuerte como el de un disparo.

—No las encontraran, no aquí escondidas —dijo en cuanto termino de explicarnos del cable trampa, estábamos sentados frente al árbol y sentí mi nariz tan fría que de seguro estaba roja como la de Rodolfo el reno—. Habrán algunas reglas básicas.

Regla No1:

Mantengan las cortinas cerradas.

Me levante de la cama para ponerme mis tenis y un abrigo negro que me quedaba algo grande, abrí la puerta viendo que Hopper se había ido a trabajar y mi mirada se detuvo en las cortinas que se mantuvieron cerradas por más de un año.

Las abrí haciendo que el sol entrara por completo y Eleven me miro desde el sofá.

—¿Qué haces?

Regla No2:

Abran la puerta solo si oyen mi clave secreta.

Mire la puerta abriendo cada cerradura con mis poderes y me gire a ver a la chica.

Regla No3:

Nunca salgan solas, mucho menos durante el día.

—Lo llamó "Reglas anti-estupideces", y nosotros no hacemos estupideces, ¿cierto?

La puerta se abrió de golpe, mostrando el otoño en Hawkins y no hubo necesidad de mirar a la chica para responder a su pregunta.

—Romper las reglas.

Back Home || Mike Wheeler (PAUSADA)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora