Capítulo 16

557 49 15
                                    

─ ¡Taxi! ─gracias a Dios escuchó;
ambas subimos al auto para ir al bar.

─Esa Natalia hará que la deje sin cabello. Ama molestarte y decirte cosas para bajar tu ánimo ─viborea mi amiga. esta mujer me hace reír. Cassidy es tan especial conmigo.

─Cassidy, ella solo quiere obtener mi puesto. De hecho, Loaiza lo sabe, pero nunca ha hecho nada para cambiarla de piso debido a que hace un buen trabajo ─miro por el ventanal del carro.

─Es detestable ─Chilla ─. ¿Por qué no envías los documentos a mi despacho y yo se los hago llegar a Oliver, el bombón?

─Porque Nata es la segunda al mando, después de mí. Y no quiero que termines con un matrimonio que, para ser realistas, pasó por muchos escándalos ─digo.

─Está bien. Es que ese hombre juega con mis pensamientos y ya quisiera jugar con él ─comenta Cassidy.

─Si mal no estoy, la esposa de ese hombre es Alexandra Carlin, la columnista que nos hará el reporte de la nueva colección. No hagas que todo se venga abajo ─río al ver la cara de trucha que tiene Cassidy.

─Tienes razón, mejor evito tener problemas con esa mujer y con Loaiza ─su cara de decepción me hace reír.

***

─ ¿Por qué tienen tanta curiosidad por el viaje a París? ─pregunto. Mis compañeros de piso son tan misteriosos.

─Es que normalmente las invitaciones son en países latinos, pero no al otro lado del mundo ─comenta Julián, un compañero de piso.

─Es posible que los diseños tengan mucho auge y, por eso, los congresos de moda han dado lugar a nuevos productos con mayor promoción en el mercado ─puntualiza Match ─. No es una coincidencia que luego del inesperado impacto que generó la promoción de verano pasada, las empresas textiles y algunas boutiques quisieran tener relación directa con el taller.

─Sí, tienes razón. Por lo general, la empresa textil que nos proporciona material para el taller suele tener relación con las oficinas de aquí, pero no directamente con el taller como ahora, añadiendo el llamado de los eventos de moda a nivel internacional que dan mucho qué hablar ─menciono mientras tomo algo de cerveza.

─Saliéndome del tema. ¿Qué tal te pareció París? ─pregunta Cassidy.

─ ¿Qué es lo que exactamente quieres saber, Cassidy? ─la interrogo con malicia.

─Sospecho perfectamente que allá no solo fue vida laboral, me imagino a ambas teniendo noches de celebración y, quiero saber, ¿qué tal les fue con los franceses? ─ya sabía que su pregunta iba más allá de lo laboral.

─Bueno. Lo único que te puedo decir es que son personas agradables y es una linda ciudad ─«Todo es lindo, menos los recuerdos de Noél.»

─No me convences, ¿acaso te la pasaste pegada al ordenador? ─intuye.

─No mucho, los compromisos no me permitían hacer algunos informes y me quitaban tiempo, pero disfruté mucho del viaje ─resoplo mientras bebo un trago.

─ ¿Y Loaiza? ─pregunta Match que cree que nadie sabe de su interés por mi amiga ─. Supongo que celebró mucho.

─Sí, ahora, más que nunca, tiene un motivo porqué celebrar. Ha firmado un contrato con Mark, él la respaldará económicamente sin ánimo de lucro.

─ ¡¿Qué?! ─Spencer quien hace las veces de recepcionista y diseñadora, se sorprende ─. ¿Ese hombre tiene algún lazo con el mundo de la moda? ─pregunta inquieta.

─No, pero ella cree que será de ayuda su aporte y es algo que no creo, por eso estoy algo inconforme ─resoplo. Confío en mis compañeros de trabajo y sé que no dirán nada para manchar mi perfil laboral. Confío especialmente en Cassidy, Julián, Match, Spencer y Malena que no quiso venir con nosotros ya que está casada.

Una semana en París © TERMINADA Donde viven las historias. Descúbrelo ahora