G O L D |S.M.| #3

XVI

Maratón 1/3

XVI. "Lo Que Siento".

Había terminado las cosas con Leyna cuando ella comenzó a intentar manipularme para que me casara con ella, o para intentar convencerme de que la embarazara. Ella aseguraba que sería para mi propio bien, incluso para él de Dinamarca, pero yo sabía que a ella lo único que le importaba era poder ser reina, así como poder controlarme al llegar a tener a mis hijos, y yo no necesitaba eso, además de que antiguamente me negaba a la idea de casarme.

El sexo con ella era bueno, pero yo no iba a quedarme con una mujer hueca que sólo quisiera la corona y manipularme usando a mis hijos, además, poco tiempo después me comenzó a interesar Thea, por lo que ya no la necesitaba.

Sus ojos marrones se encuentran con los míos y esa tierna sonrisa que poseía cruza su rostro marcando un único hoyuelo en su mejilla izquierda. Leyna tenía las perfectas facciones de una dulce alma, pero no era así.

Desvío mi mirada sin mover un solo músculo de mi cara para devolverle el gesto, Sophia continúa mirándome molesta, mientras que mi castaña me ignora escuchando a Niall presentar a la tal América, no me importaba estarme mostrando grosero con la novia del irlandés, pero no podía pensar en otra cosa que no fuera Leyna estando aquí.

Todos están manteniendo una conversación fluida de diversos temas, pero yo estoy tan sumido en mis pensamientos que apenas y reacciono cuando veo a Niall alejarse con América.

—¿Podemos hablar? —Thea me dice lo bastante alto como para que apenas yo pueda escucharla.

Accedí, Thea les avisa a Sophia y a Nash que en un momento regresamos mientras que yo me limito a dar un asentimiento en su dirección.

Atravesamos el lugar siendo detenidos más de una vez por algunos invitados queriendo saludar, finalmente salimos del salón, sigo a mi castaña en el pasillo no teniendo una idea a donde me está dirigiendo, pero claramente quería que estuviéramos a solas.

Cuando llegamos a mi despacho, no espera a que abra la puerta por ella, se adentra en el lugar y yo la sigo cerrando la puerta con seguro.

—No quería hacerte una escena frente a los invitados. —Thea dice yendo detrás de mi escritorio, sentándose en mi asiento de cuero.

—¿Por lo que decidiste traerme aquí para hacérmela en privado? —Resoplo metiendo ambas manos en los bolsillos de mi pantalón. –Te amo Thea, pero si es así no pienso soportarte.

Mi castaña se recarga en el asiento poniendo su espalda recta, sé que no era el momento adecuado, pero verla ahí sentada detrás de mi escritorio, con la corona puesta y la barbilla alzada, tomando esa postura de grandeza y poder solo hacía que quisiera postrarme ante ella y adorarla.

—No te voy a hacer una escena, sólo quiero que me expliques qué es lo que hace esa mujer aquí. —Demanda, percibo rápidamente los celos en su hablar.

La miro sin emitir sonido alguno, me giro dándole la espalda, dirigiéndome a la barra, tomo la botella de whisky y vierto de su contenido en el glencairn, procedo a darle un trago disfrutando del sabor y la complexión de la fina bebida en mi paladar. Doy un segundo trago, esta vez girándome para ver a Thea quien no luce demasiado contenta,  camino hasta donde se encuentra parándome al lado del asiento, dejo mi bebida sobre el escritorio para así tener mis manos libres para poder tomar el asiento de sus recargares para brazos y, empleando la fuerza necesaria, lo giro para que quedara frente a mi. Thea suelta un pequeño grito ante mi acción el cual pasó por alto.