G O L D |S.M.| #3

XXXIX

XXXIX. "¿Lo es?"

—¿Shawn trae un perro? —Niall habla tan extrañado como yo, viendo cómo Shawn, Nash y otro hombre al que yo desconocía llegaban a el  área del jardín. —¿Ese es Matthew? —Continuó, sólo que esta vez se puso de pie para ir y encontrarlos en el camino.

Estaba desconcertada, tanto como por el cachorro y él desconocido, por lo que decidí mantener mi distancia quedándome sentada donde momentos antes habíamos desayunado, a diferencia de Kian, quien al ver a su padre regresar junto a su tío Nash había salido corriendo, llegó con ellos, estirando sus bracitos hacia su tío esperando que lo cargara, y lo hizo con una sonrisa.

Nash me miró y me sonrió manteniendo contacto visual conmigo por unos instantes, le sonreí antes de que él rompiera el contacto y centrara su atención en su sobrino.

Los observé a todos hablando a lo lejos, así como momentos después Nash le pasaba a Kian al desconocido para que lo cargara. Así mismo, también miré a Shawn mostrarle el cachorro a Kian, este último lo acarició con cautela, como si temiera que fuera hacerle daño. Todos continuaron conversando entre ellos, hasta que Niall fue el primero en apartarse llevándose a Kian de la mano y al cachorro cargando, caminaron adentrándose más al jardín hasta que eventualmente se detuvieron y bajaron al cachorro el cual no tardó en comenzar a correr junto a Kian. Se convirtió en una de mis imágenes  favoritas.

—Thea. —La voz de Shawn me distrajo, lo miré parado junto a mi, extendiéndome su mano.

La acepté y me puse de pie adivinando que quería presentarme, avanzamos con nuestras manos entrelazadas hasta donde Nash y el otro se habían quedado y Shawn volvió a hablar. —Cor meun, él es Matthew Espinosa duque de España, un viejo amigo del internado. Matt, ella es Thea, mi esposa, mi reina. —Nos presentó haciendo énfasis en el "mi", como si quisiera recalcar ante los presentes que yo era suya.

Matthew tomó mi mano libre e hizo la acción de besarla pero sin que sus labios tocaran mi piel, me limité a sonreírle. —Es aún más hermosa en persona, su majestad.

—Gracias. —Dije por educación, notando que no sólo Shawn había puesto una mueca de desagrado, también Nash.

—¿Quieren ir a descansar? Enzo puede mostrarte tu habitación. —Shawn sugirió a ambos, fue claro para mi que quería deshacerse de ellos.

—Suena bien, el vuelo me dejó algo agotado. —Matt respondió aceptando, pude notar que Enzo se acercó, generalmente se mantenía cerca cada vez que había visitas para no hacer esperar a Shawn ante sus órdenes.

—Yo también te tomo la palabra. —Nash habló por primera vez desde que llegué. —Es bueno volver a verte, Thea. —Me dijo ya que no me había saludado.

—Lo mismo digo. —Respondí sonriéndole algo tensa ya que sabía que Shawn se pondría en plan celoso si me acercaba a abrazarlo.

—Enzo, acompáñalos a sus habitaciones, cualquier cosa que necesiten, los empleados están a su disposición. —Shawn mencionó, más que nada a Matthew, ya que Nash sabía perfectamente que estaba como en su casa.

—Gracias, nos vemos más tarde, fue un gusto conocerte, Thea. —Fue lo último que dijo Matthew antes de que ambos se marcharan siguiendo a Enzo.

—No quiero...

—Ahórratelo. —Lo interrumpí sabiendo lo que le iba a seguir. —No pienso entrar en una discusión por tus irracionales celos y tus estúpidas órdenes de no hablarle a cualquier hombre que no seas tú.