5.¿Qué pasó?

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Louis se fue de aquel lugar y tomó una ducha larga. Quería reflexionar.

"Sólo quiero que tengas la confianza para hablar de lo que sea".

Las palabras de ese alfa rondaban en su mente. Sumido en sus pensamientos, imaginaba una linda vida junto a Marie, pero, ¿Sería linda esa vida?

Un sonido sacó a Loui de sus pensamientos, era Jhoanna quién tocaba la puerta.

—¿Cariño? ¿Estás bien? —le preguntó su madre.

—Sí, mamá —le respondió Louis.

—¿Dónde estabas cariño?

—En una reunión con los chicos.

—Está bien.

Sin más se alejó, ella, bueno más bien, nadie sabía del contrato y sus reglas. Nadie, Loui prefería que nadie supiera.

21:20.

Louis estaba en su habitación, estaba durmiendo. Su madre entró pero al verlo ahí, tan lindo, lo dejó dormir.

A la mañana siguiente Jhoanna había dejado un desayuno para Louis. Ella y Thomas se habían ido a sus respectivos trabajos, Fizzy había ido con Arthur, su prometido, a ver algunas cosas que faltaban para su boda.

9:15.

Sonó el teléfono haciendo que el despertar de Loui fuera brusco.

Louis tomó el teléfono.

—¿Hola? —Dijo en medio de un gran bostezo.

La reina era quién hablaba.

—Buenos días joven Tomlinson, sólo para informarle que tiene un almuerzo formal conmigo, hoy, en media hora. Un chófer pasará por usted. Esté listo.

—Buen día majestad, esta bien, nos vemos —dijo ya totalmente despierto.

Louis tomó una ducha rápida y buscó un atuendo formal para el almuerzo.

¿Por qué habrá pensado eso su majestad? Tal vez tenía que hablar con él sobre Marie. No lo sabía.

El chófer llegó y Louis se subió.

—Buen día —saludó Louis.

—Buen día joven —respondió el chófer levantando su boina.

El trayecto estuvo en silencio. Al llegar, en la entrada estaba esperándolo el jefe de empleados, Jeremie, el segundo mandamás de los empleados.

—Buen día joven Tomlinson, sigame por favor—pidió Jerrmie.

Loui asintió y sólo lo siguió.

El beta lo condujo hasta el comedor de la familia, ahí estaba Katherine, esperándolo. Había un almuerzo servido, era obvio que no comería los mismos alimentos que su majestad debido a su dieta.

—Tome asiento —pidió la reina, más bien pareció una orden.

Dijo señalando el lugar. Louis obedeció y se sentó, acción imitada por la reina.

—Dime, Louis, ¿se te dificulta cumplir las normas o seguir tu dieta? —preguntó la reina.

—No, majestad, para nada —le respondió.

—Muy bien, que bueno que te estés adaptando —dijo la reina con entusiasmo—. Podrías recordarme las primeras tres normas. Por favor.

—Claro, es, seguir mi dieta, no salir de mi casa y no tener contacto físico con alguien ajeno a mi familia.

—Bien, dime ahora, ¿Por qué has desobedecido las últimas dos que mencionaste? —lo había acorralado.

Louis tragó saliva.

—¿A qué se refiere majestad?

—Usted lo sabe perfectamente, o, acaso, necesita un recordatorio —dijo la monarca.

—Por favor —pidió Louis sin comprender nada.

En ese momento Katherine tomó un rollo que estaba en la silla al lado de ella mostrándole a Lou, era el periódico, y en la primera página había dos fotos de él con Aaron, en la más grande se mostraba como Louis abrazaba a Aaron. En el título:
"¿Pequeño amor secreto?"

—Creiste qué no me iba a enterar —dijo tensando la mandíbula—. Parece que aún tienes tus gustos distintos.

«-Gustos distintos, que estupidez». Dijo en su mente mientras apretaba sus puños bajo de la mesa.

—Majestad —suspiró— he de decirle que mi relación con ese alfa es...

—¿Alfa? —lo interrumpió—.  ¿Dijiste alfa?! Qué indignante!  seguro buscas ser marca...

—¡Sí, alfa! perdóneme que le interrumpa pero, déjeme terminar. Él es sólo mi amigo de la fraternidad y además, si quisiera relacionarme con él no podría ya que él está COMPROMETIDO.

—Vete, Marie te esta esperando —dijo la reina totalmente indignada.

En efecto, Marie estaba en el recibidor de aquel hermoso palacio, aquel que no sólo sería su hogar, sino también, aquel que presenciaría sus desgracias...

El Príncipe Tomlinson. La Verdad Detrás Del Cuento  Donde viven las historias. Descúbrelo ahora