AMOR SECRETO

Secreto..."20"

Penal De Mujeres.

Bulma.
Es aniversario del penal, y para celebrarlo, una asociación nos lleva comida, muchas aprovechan para comer como reinas y lo mejor de todo es que vienen persona a servirnos, la verdad aunque solo sea un día al año es algo muy lindo y más x que los que vienen a servirnos son el personal del gobierno, entre ellos los fiscales, es el único día que puedo ver a mi Yamcha... También creo y x lo que me dice Maron vienen personas que hacen cosas de caridad.

Todas nos formamos con nuestras charolas yo llevo a mi pequeño bebe en un reboso, estoy tan ansiosa de que Yamcha x fin conozca a su hijo en persona, no es lo mismo verlo en fotos, se que estará muy feliz de vernos.

Al llegar al comienzo de la fila lo veo, él me mira y no evito sonreírle, él también me sonríe, siento mi corazón latir, sigo tan enamorada de él como el primer día, me siento muy nerviosa de verlo, temo que la felicidad que siento en este momento brille x todo el lugar y todos se den cuenta del amor que siento x él, temo abrazarlo y besarlo, tengo tantas ganas de que me haga el amor, de sentir sus manos acariciando mi piel, sus besos recorrer mi cuerpo tengo tantas cosas que decirle, pero me conformo con verlo y ver su sonrisa, el me da el plato y rosa sus manos con las mías, siento mi cuerpo estremecer, una corriente eléctrica recorre cada musculo, cada célula de mi... Le sonrió, realmente no puedo quitar mi cara de idiota, esta felicidad que siento no la puedo ocultar aunque quiera ¡Quiero que mi hijo lo conozca! ¡Que le diga papá!

Bulma: ¡gracias!

Me sonríe.

Bulma: ¡amor di gracias al señor fiscal!

Le acerco a mi bebe, él sonríe y lo toma de la mano, estaba demasiado conmovido, lo note x su expresión, es en ese instante fue donde el mundo dejo de girar, el tiempo se detuvo, sólo eramos los tres, quería que así se quedara por más tiempo pero nos interrumpieron, un caderazo que hace que siga mi camino.

Videl: ¡valla fiscal es muy guapo!

Aun así él no dejaba de mirarme ni yo a él, seguí caminando mirándolo, me fui a una mesa, una mesa que tuviera el acceso a mi vista para no dejar de verlo, tenia que aprovechar el momento, tenia que verlo.

Vegeta.
Llego a la dichosa cosa de caridad, la verdad no es para mantener mi imagen impecable, sólo quiero ver a esa idiota y asegurarme que la este pasando mal, pero al entrar al comedor veo esa maldita escena asqueante.

El maldito del fiscal y la maldita asesina azulada se miran, ambos sonríen como idiotas y eso realmente me hizo retorcer mis tripas de coraje, a su alrededor volaban corazones y mariposas, realmente me asqueó... ¿Como pueden ser felices? Ni siquiera pueden estar juntos, ni siquiera se pueden besar no entiendo x que sonríen como si la vida fuera bella... Ella se va a su lugar y se sienta sin quitarle la vista al fiscal Zedaki... Es tan obvia su reacción, sus ojos brillan de una manera tan única y lo peor es que el también no puede dejar de verla... Yo sigo mirando la escena... Sonrió de lado, tal vez estén felices de verse pero yo nunca ¡pierdo! ¡Disfruten de su reencuentro! que pronto ambos sufrirían y yo seré el encargado de provocar su desdicha.