Layla:
El Gran Ángel era Lauviah. Todo tenia sentido ahora, las insinuaciones de Afriel y los misteriosos ataques mentales de Lauviah cuando se pronunciaba 'Lilith'. Estaba impresionada, nunca imagine que Lauviah había sido uno de los mejores ángeles que hayan existido en la historia y su trágico romance con un demonio. Pero había algo que no cuadraba allí, algo que Oraculum no puede recordar y en lo que al parecer Kyousuke esta empeñado en ocultarlo. Pensar en todo esto me dio un rebote terrible (Contando que estaba sobre un dragón), así que mi vista se comenzó a nublar y un escalofrío recorrió mi cuerpo, tenia fiebre y ganas de vomitar. Quise decirle a Oraculum sobre mi estado, pero sentía que si hablaba probablemente vomitaría, sentí que me desmayaba y así ocurrió. Lo ultime que pude ver era a Oraculum gritando divertido por los aires, a Lauviah en mi regazo y yo cayendo al vacío.
Jake:
Nubes y mas nubes, aveces me repugnaba este paisaje tan perfecto. Absurdo. Aparte mis pensamientos de las nubes e instintivamente comencé a pensar en Jade y mi estupidez con Layla. Me lo merezco, nunca debí haberle hecho eso a Layla. ''Eres como un hermano para mi'' Dijo Jade cuando le confesé mis sentimientos ''Nunca te podre ver mas que eso: eres mi hermanito'' Y era cierto, yo también siempre la había visto de esa manera, no sé porque había sido tan estúpido al creer que podríamos ser algo mas que eso. Pero por mas que he intentado, no puedo olvidar a Layla. El olvido nunca fue fácil, ni para los humanos y tampoco para nosotros.
Hundido en mis pensamientos no pude evitar volver a mirar las nubes. Y lo vi. Hace mucho tiempo no veía un dragón. Pero hay estaba, por sus colores deduje que era Ayami. Oraculum estaba montado, con Lauviah, y con alguien mas. Pronto supe de quien se trataba: Layla, y ahora estaba cayendo al suelo. Ni Oraculum ni Lauviah parecieron darse cuenta. Tenia que salvarla o moriría.
Extendí mis alas y con una velocidad impresionante me acerque a ella. La abrace entre mis brazos y la lleve a la superficie. La recosté en el piso, estaba terriblemente caliente y tosía constantemente. Sé que habían pasado muchas cosas poco agradables entre nosotros, pero no la iba a dejar allí gravemente enferma, así que la lleve a mi hogar. Sé que era un poco atrevido, pero tenia que curarla.
Cuando llegue a mi casa ví que Jade estaba en la puerta, esperándome.
-¿Donde estabas Jake?- Pregunto con aire divertido pasando de inadvertida a Layla-. Compuse una nueva canción y pensé que...- Iba a continuar pero paro en seco al ver a Layla en mis brazos-...espera, ¿Ella no es Layla?- Asentí- ¿Que le paso?- Pregunto al ver su mal estado- No me digas que estas pensando en volverte caído por ella...-Dijo con aire burlón-.
-Es algo confuso...- Y le explique lo que había ocurrido-.
-¿Vas a curarla tu solo?- Pregunto riendo-.
-Si...
-No voy a dejarte solo tontito, yo sé mas sobre curar que tú- Era cierto. Mis conocimientos de medicina eran escasos, tendría que recurrir a Jade.
Jade me ayudo a llevar a Layla hasta la habitación de huéspedes y también a curarla. Después de un tiempo su fiebre disminuyo y ya lucia mejor.
Alguien golpeo a la puerta, muy fuertemente y muy rápidamente. Abrí la puerta encontré a Afriel y Aiel.
-¿Aqui esta Layla?- Soltó Afriel mientras sacudía su largo cabello aguamarina, pero su mirada estaba clavada en mi como su fuera una daga-.
- Si...-Respondí intentado calmar a Afriel-.
-Tenemos que llevarla con nosotros, lamentamos las molestias y gracias por cuidarla- Agradeció Afriel secamente mientras entraba por la puerta-.
-Espera- La detuvo Jade- No puedes llevártela así nada mas, esta enferma
-No puedes decirnos que hacer y no hacer, niñita- Respondió Aiel a Jade-.
-Esperen- Se interpuso Jade entre Layla y Afriel y Aiel-.
-Nos la llevamos, nosotros somos sus amigos y ella confía en nosotros- Contrapuso Aiel-.
-A igual, piénsalo Jake, a Layla no le gustaría estar aquí entre tu y ella- Señalo a Jade- No después de todo lo que pasó- Jade y Aiel no sabia a lo que se refería, pero yo si-.
Hice una seña a Jade para que los dejara. Aiel la tomo de su torso y la cargo en sus brazos como si se tratara de una doncella y Afriel me miro fríamente a los ojos y susurro algo que solo yo podía escuchar:
-Agradece que llegamos a tiempo, sino Layla se hubiera despertado y así ver la cara de su ex y de la chica por la cual la cambiaron, no hubiera sido nada lindo, ¿Cierto?-.
Era cierto, no lo habia pensado de esa manera. Afriel y Aiel se fueron con Layla y Jade se quedo mirándome de forma inexpresiva.
-¿Que fue lo que paso?- Pregunto lejanamente-.
-Tuve un problema con Afriel, eso es todo- Mentí. No quería contarle sobre Layla-.
-No importa, sigamos con la canción que compuse. Ya llame a Christopher, a Axel y a Alan para reunirnos en...
Pero yo no la escuchaba, estaba demasiado distraído viendo como Layla se alejaba con Afriel y Aiel.
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Ángeles de la música ©
FantasyÁngeles y demonios hallaron dos libros que cambiarían su destino. Y no solo el de ellos, sino el de dos seres humanos que desconocen su existencia. Uno de ellos es una joven, que un día es sorprendida por los hilos de su destino y conoce a un ángel...