Capítulo 17

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Layla:

Sentí un dolor tremebundo en mi cabeza, sentía escalofríos y desaliento. Poco a poco abrí los ojos, con lentitud, pensando en lo ocurrido anteriormente: Recordé caer al suelo, por suerte no estaba muerta, pero ¿Y como? Era una caída que garantizaba mi muerte, mire al mi alrededor: Estaba en la casa de Afriel y de Aiel. Supongo que ellos me vieron caer y fueron a rescatarme. Vi a Aiel sentado al lado de la cama en la que me encontraba recostada, estaba leyendo un libro, pero cuando noto que había despertado se exalto demasiado:

-¡Casi no despiertas! Ya estaba preocupándome mucho- Dijo dando saltitos por toda la habitación- ¿Como te sientes?

-Mal, me siento sin energía- Suspire

-Te cuidare hasta que te mejores, tu eres mi princesa y yo soy tu fiel sirviente- Aseguro firmemente, haciendome sacar una leve sonrisa-.

-No exageres, por cierto, ¿Donde esta Afriel?

-Esta con su novio

-Ya veo...¿Como llegue aquí?- Pregunte sentándome en el lecho de la cama-.

-Jake te vio caer, te salvo y nosotros te curamos- Respondió sonriendo, pero después su expresión cambio- Perdona, no le digas a Afriel que te conté, pues se supone que era un secreto

-Espera, ¿Dijiste Jake?- Interrogue anonada.

-Si...Afriel parecía bastante enojada con él. No sé porque, pero para que Afriel este de mal humor debe haber ocurrido algo muy malo...-Aseguro Aiel- ¿Tú sabes que ocurrió?

No quería contarle, pero sentía una debilidad gracias a que aun seguía enferma, así que mi boca hablo por mi. Le conté todo, lo de Jade también, lo ocurrido en el concierto, todo. Porque sabia que en podía confiar en Aiel.

 Aiel dio un largo suspiro.

-De haber sabido le hubiera pegado- Soltó cerrando sus manos- Pero al verlo cuidándote con tanta dedicación pensé que ustedes eran amigos. Nunca espere eso de Jake y Jade, los conozco desde hace mucho tiempo, Jake y Jade no son el tipo de personas que forman pareja, parecen mas hermanos....-Soltó un largo suspiro y pregunto- ¿Como sigues?

Ya no sentía dolor, el cuidado de Aiel estaba dando buenos resultados.

-Bien, pero estoy un poco mareada todavía...

-Excelente, tienes que salir de esa cama, no soporto estar estático en este lugar por tanto tiempo- Se levanto de la silla y me ofreció su mano para que yo la tomara- Hay algo que te he querido mostrar desde hace tiempo y no he podido, ¿Me das el honor de tomar prestado un poco de tu tiempo?- Sus ojos brillaban de la emoción

-Acepto tu propuesta- Respondí intentando imitar su caballerosidad -

Tome su mano y me llevo por la aires a un jardín que nunca había visto de nuestra sección. Cuando descendimos no dejo que le preguntara que hacíamos allí, ''Es una sorpresa'' había dicho como respuesta. Me senté en una banca que estaba allí y Aiel saco de ente los matorrales un clarinete. No sabia que Aiel tocaba el clarinete, quede estupefacta.

Comenzó a interpretar una obra que nunca había oído, pero tan exquisita para la audición que quede sin palabras. 

-¿Te gusto?- Pregunto cuando termino su interpretación-.

-Me encanto...-Dije aun maravillada

-La compuse para ti- Dijo con una sonrisa traviesa

Sentía como el rubor subía a mis mejillas. Él también estaba ruborizado.

-Afriel debe estar buscándonos...-Dije rompiendo el silencio incomodo- Debemos regresar-.

-Si, pero creí que era mejor que...-Pensó sus palabras y después dijo suavemente- Deberías arreglar las cosas con Jake...

-¡¿Que?!- Pregunte escandalizada

-Mira, es mejor no tener enemigos de tu propia sección, yo se porque te lo digo- Me miro con suspicacia- Si ocurre algo yo estaré hay para pegarle en la cara- Aseguro riendo-.

-Esta bien- Dije resignada-.

Nos dirijamos al lugar donde vivía Jake, desde lejos se escuchaba que estaba practicando con su banda. Llegamos a la puerta y Aiel la golpeo con suavidad. Se me retorcía el estomago, no quería hablar con Jake.

Jake:

La canción que había compuesto Jade había terminado siendo mejor de lo que esperábamos. Habíamos durado un buen tiempo practicándola (Desde que Layla se fue), aunque la canción era buena yo me sentía indispuesto.

-Jake- Llamo Christopher- Están llamando a la puerta

-Yo abro- Dijo Alan. Abrió la puerta y en pocos minutos se dirigió hacia mi

-Aiel y la chica nueva, Layla te necesitan- Dijo un poco perdido-.

-¿Para que?- Pregunte sospechosamente-.

-No sé, no me quisieron decir- Respondió Alan-.

Deje la guitarra recostada en una silla que estaba cerca y me dirigí hacia la puerta. Allí estaba Layla y Aiel como había dicho antes Alan.

-Tengo que hablar contigo- Dijo Layla con una voz sorprendentemente fría-.

-La ultima vez dijiste todo lo contrario- Contraataque-.

-Mira, yo solo trato de arreglar esto, pero si no estas dispuesto es mejor que me digas y no vuelvo a toparme en tu vida- Su mirada de reproche y crueldad me observaban-.

-Estoy dispuesto, pero quiero conversar esto en privado- Dijo refiriéndose a la presciencia de Aiel-.

-Ya me iba- Dijo Aiel con repugnancia-. Te espero con Afriel- Le dijo suavemente a Layla. Desplegó sus alas y se fue volando-.

Yo cerré la puerta y le hice una seña a Layla para que me siguiera al bosque. Cuando llegamos a un lugar apartado lo único que puede decir en ese inmenso silencio fue:

-Lo siento

-''No rompas el silencio si no es para mejorarlo''- Dijo secamente- Sabias palabras de Beethoven-.

-''A veces, el silencio es la peor mentira''- Dije como respuesta-, Miguel de ....-No recordaba el apellido del señor que había dicho esa frase, iba perdiendo contra Layla- No recuerdo el apellido...¿Era de Uñas inmundo?- Pregunte-.

Layla rió, su frialdad parecía abandonarla poco a poco.

-''Miguel de Unamuno''-Corrigió aun riendo

Al parecer no iba a acabar tan mal este tipo de discusión.



Ángeles de la música ©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora