Sesenta Y ocho.
•El secreto de la chica•
4 de julio de 1994.
El señor Choi otra vez olvidó el cumpleaños de su hija. La pequeña Kia de cuatro años lo espero toda la noche para que él y su madre llegarán del evento benéfico al cual ellos por trabajo debían asistir. No llegaron, ni siquiera se dedicaron a llamar. Su hermano, el pequeño Minho le preparo una tarta con ayuda de Marta, la ama de llaves. Claramente la señorita Kia estuvo feliz, pero la ausencia de sus padres la destrozó. Yo lo podía ver en el reflejo de sus ojos.
—Señor Kang—me hablo la pequeña cuando íbamos devuelta del parque de diversiones—¿Por qué mis papás no llegaron de nuevo?
—Por que tenían un evento muy importante, que ayuda a niños pequeños como tú, pero con cancer.
—¿Cancer?
—Si, es una enfermedad que puede quitarte la vida—dije suavemente mirándola por el retrovisor.
—¿Mis papis los salvan?
—Si, tus papis los salvan—sonrei. Esta se tapó la boquita.
—Espero que se salven—hizo sonidos con la boca.
—¿Te gustaron tus regalos?—cambie el tema.
—¡Shi! Me regalaron un poni.
—¿Así? ¿Cómo lo llamaras?
—Puqui—se río, mientras aplaudía en el auto—Puqui puqui—comenzo a cantar.
Yo sabía que los lujosos regalos que sus padres le compraban a Kia, eran solo para suplir la ausencia paternal y maternal que lamentablemente, ellos no tenían. Y tampoco les interesaba tener.
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7 de marzo de 1993.Kia terminó el jardín de niños y pronto entrara al colegio. Ganó un premio a la más participativa de su clase y le dieron una medalla por aprenderse los números del uno al treintaycinco. Sus padres no asistieron, pero fui yo con su pequeño hermano Minho y Yuna, la ama de llaves. Al verme, corrió a abrazarme. La levanté en mis brazos y le di muchos besos en el rostro. Con la mirada buscaba a sus padres.
—Tus...padres tenían un asunto en una de sus empresas en Brasil. Tuvieron que viajar de urgencia, pero te compraron esto—le pase un pequeño collar de princesa. Esta lo miro emocionada.
—¡Es hermoso!
Otra ausencia más, disfrazada de objeto.
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.20 de noviembre de 1993.
La madre de Kia intento suicidarse otra vez. El señor Choi llamo a urgencias y se la llevaron de forma privada a una de las clínicas más exclusivas de Corea. Lo peor del asunto no es el suicidio, es que la señorita Kia presenció como la señora Choi se cortaba las venas frente al señor Choi, reclamándole sus tantas infidelidades.
No alcance a llegar a tiempo, hubiera deseado llegar a tiempo para poder salvarla de ese hecho horrendo, pero no lo hice. Ese día fui a ver a mi madre quien estaba de cumpleaños, por lo que llegue tarde. Y bastante tarde.
La policía me contó, que los vecinos llamaron por extraños gritos y que cuando ellos entraron a la sala. Encontraron el cuerpo inconsciente de la señora Choi al lado de una pequeña niña quién lloraba que no muriera. Mi corazón se paralizó. Lo primero que hice fue a abrazar a la pequeña Kia y a su hermano.
El señor Choi quién hablaba con la policía y los paramédicos me miró de forma abrumadora. Kia lloraba en mis brazos, sujetando sus pequeños bracitos a mi pecho. La hice dormir a ella y a su hermano y Yuna se quedó con ellos hasta cerrar los ojos.
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If You [G-Dragon y tu]
Fiksi PenggemarEl es intenso... Sexy. Apasionado. Dulce. Perfecto. Las descripciones que me habían dado acerca de el, era lo que siempre pensé acerca de su personalidad. Pensar en llegar a conocerlo era un sueño utopico. Irreal. Pero la vida me dio oportunidades q...