SOY TU DUEÑA 2

Capitulo 26

Analia: ehh mucho gusto Señor José Miguel.

José Miguel se sentó junto a su esposa, mientras comían Analia no pudo evitar observarlo, era tan guapo como Martina lo había descrito y se veía muy enamorado de su esposa, lo que su amiga pensaba hacer era malvado, así que decidió guardar silencio.

José Miguel llevó a Valentina a la nueva cabaña, tenían un par de horas libres, mientras sus pequeños se quedaron con Gabriela y Leonor.

Valentina: cuanto tiempo crees que tardemos en terminarla?

José Miguel: Bueno si nos dedicamos un par de horas todos los días seguramente en menos de un mes?

Valentina: un mes?

José Miguel: si, pero no te apures, te aseguro que va a quedar preciosa, será nuestro nuevo nido de amor.

Valentina: lo sé, eres el mejor arquitecto, no pudo ser mejor diseñada.

José Miguel: bueno hago lo mejor que puedo.

Valentina: siempre lo haces.

Valentina beso la mejilla de José Miguel, sus miradas se cruzaron y él no pudo contener las ganas de besarla, ella lo agarro fuertemente de su cuello mientras él pasaba sus manos delicadamente por su cintura y de ahí hasta su trasero; estaban deseoso de amarse, pero todo dio un giro inesperado cuando sonó el celular de Valentina, sus respiraciones estaban agitadas.

Valentina: tengo que contestar.

José Miguel: no! Déjalo para después.

Valentina: y si es importante?

José Miguel: está bien.

Valentina:" Bueno?

Leonor: estas con mi hijo verdad?

Valentina: sí.

Leonor: no le vayas a decir que soy yo, necesito pedirte un gran favor.

Valentina: por supuesto.

Leonor: Iré a Pachuca a ver a Guillermo, vino a verme y quiere conocer a José Miguel.

Valentina: Entiendo.

Leonor: por favor habla con él, sé que tu sabrás usar las palabras precisas para decirle que estoy saliendo con alguien más, yo no tengo cara para hacerlo, puedo contar con tu apoyo?

Valentina: si claro.

Leonor: gracias hija.

Valentina: de nada"

José Miguel: quién era?

Valentina: Iluminada, quería saber si podía cambiar el menú de la cena, quiere hacer algo especial aprovechando que Gabi e Isabella están de visita.

José Miguel: Horacio viene a cenar.

Valentina: es cierto, bueno se lo diré.

Analia estaba feliz en la hacienda, era su primer día y se sentía en Disneylandia, valentina le simpatizaba mucho al igual que José Miguel y sus hijos, estaba dispuesta a conservar su trabajo, mientras observaba el gallinero se topó con Alonso.

Alonso: quería pedirte disculpas por lo de hace rato, me porté grosero contigo.

Analia: soy yo quien pide disculpas, te traté muy mal.

Alonso: amigos entonces?

Analia: si, olvidemos ese pequeño incidente.

Alonso: y como te has sentido en tu primer día de trabajo?

Analia: muy bien, todos se han portado muy bien conmigo, sobre todo la señora Villalba, no me conocía y me dio a la oportunidad de entrar.

Alonso: Valentina es una gran mujer, es muy noble, es la única que paga salarios justos en esta región, tiene carácter y si te eligió fue porque intuyo que eres buena en tu trabajo.

Analia: crecí en el campo, amo los caballos, la naturaleza, me apasiona mi carrera.

Alonso: me parece muy bien; Aquí se respira una gran paz.

Analia: y hace mucho que la conoces?

Alonso: a Valentina? Si, hace algunos años, la estimo mucho, a pesar de las adversidades por las que ha pasado se han mantenido firme.

Analia: y puedo saber que le pasó a una mujer que lo tiene todo?

Alonso: Valentina perdió a sus padres cuando era muy pequeña, su tía Leonor la crío junto a su nana, que desgraciadamente falleció hace algunos años, ella la quería como una madre, luego murió su prima con quien creció.

Analia: vaya, que triste!

Alonso: Valentina recuperó su felicidad con José Miguel.

Analia: y como se conocieron? Digo, es que se ve que se quieren mucho.

Alonso: aquí en la hacienda, bueno, José Miguel vivía con sus padres en la hacienda vecina la de los Montesinos y Valentina en "Los Cascabeles" cuando se casaron respetaron la última voluntad de su padre que fue unir ambas haciendas por eso ahora se llama ...

Analia: "El Milagro"

Alonso: así es, ellos sufrieron mucho para estar juntos, fue una historia como de telenovela, pero ahora me alegra ver que Valentina sea tan feliz junto a José Miguel.

Analia: si! Hacen una bonita pareja.

Valentina y José Miguel adelantaron un poco la nueva cabaña, la llamada los había alertado un poco y si necesitaban un lugar donde no tuvieran interrupciones ese era el lugar que apenas estaba en construcción, después pasaron a echarle un vistazo a la empacadora, la procesadora, lo hacían al menos una vez por semana.

Los niños hacían sus tareas mientras Gabi revisaba unos papeles.

A Valentina y José Miguel se les fue el tiempo verificando el funcionamiento de toda la hacienda, parecían una parejita de novios pues todo el tiempo estaban agarrados de la mano, cuando regresaron a la hacienda Horacio ya estaba por llevarse a su esposa e hija.

José Miguel: quédense a cenar.

Valentina: si! Iluminada va a hacer algo especial, voy a ver cómo va en la cocina.

Gabriela: yo voy contigo.

Horacio: de dónde vienen?

José Miguel: estuvimos en la nueva cabaña, la empacadora y la procesadora de lácteos.

Horacio: ya empezaron la cabaña?

José Miguel: si! Y va quedar tan hermosa como la de los niños.

Horacio: de eso no hay duda.

Gabriela Y Valentina sirvieron la mesa, mientras los 3 niños estaban deseoso de probar el postre de chocolate.

Después de la cena la visita se fue, y Valentina acompañó a sus hijos a la cama, mientras su esposo tomaba una ducha.

José Miguel se estaba relajando mientras el agua bajaba por todo su cuerpo, Valentina se cercioro que los niños estuvieran dormidos, entro a su habitación marital, le puso seguro y al llegar al baño pudo ver la silueta del cuerpo desnudo de su esposo, así que sin pensarlo, se desnudó y lo sorprendió en la ducha...