SOY TU DUEÑA 2

Capitulo 94

José Miguel: bueno, quisimos conocer los otros cenotes.

Jose Federico: y porque no nos llevaron con ustedes?

Valentina: porque estaban dormidos.

Cecilia Benita: nos hubieran despertado ehh.

José Miguel: corazón, no nos pareció correcto, dormían tranquilamente, pero les prometo que después los llevamos por ese lado.

Cecilia Benita: bueno, eso espero.

Los niños arrastraron a sus papás hacia donde estaba el resto, cuando llegaron Isabel no dudó en preguntarles.

Isabel: pues donde estaban? ya nos tenían con el pendiente.

Valentina: sólo fuimos a dar un paseo tía, queríamos conocer los Cenotes del otro lado del parque.

Gabriela: y que tal? son tan grandes como en el que estuvimos hace rato.

José Miguel: más o menos.

Horacio: cuantos más hay hacia el otro lado?

Valentina y José Miguel no tenían ni idea, pues sólo entraron a uno y no precisamente a nadar.

Gabriela: Valentina?? Cuantos más había?

Los dos se miraron algo confundidos.

José Miguel: la verdad no los contamos, eran varios, entramos a nadar a uno bien bonito.

Horacio: y cómo se llama?

Valentina: no lo recuerdo, creo que ni me fijé.

Cecilia Benita: podemos ir ya?

José Miguel: no hija, tenemos muchas cosas pendientes, recuerda que iremos a las pirámides.

Cecilia Benita: ashh pero ya fuimos el otro día.

Valentina: pero tus abuelas no, ni tus tíos.

Isabella: yo tampoco.

Valentina: lo ves? ahora iremos todos antes de regresar al depa.

Cecilia Benita: pero vendremos otro día verdad?

Valentina: sí.

José Miguel: creo que es hora de ir a cambiarnos.

Horacio: si es buena idea.

Después de casi media hora todos regresaron a la camioneta para dirigirse a las pirámides.

Martina insistía en encontrar a Valentina, pero mientras se llenaba de paciencia fue a uno de los mercados de la capital por una sustancia en un frasco negro.

Martina: esto me será de mucha utilidad, vamos a ver si José Miguel va a seguir contigo después de que tu belleza se eche a perder Valentina Villalba.

Después de dos espectaculares semanas los días de descanso parecían llegar a su fin; habían visitado todos los parques de la zona, Cenotes, pirámides, playas; mismo tiempo que Martina seguía buscando pistas en la capital sin tener suerte, pero estaba dispuesta a esperar el momento oportuno para acabar con la felicidad de Valentina; Alonso seguía sin responder a las llamadas de Analia, de hecho también había ignorado su último mensaje, se sentía muy decepcionado de ella.

En la hacienda Analia no podía concentrase en su trabajo, por un lado se sentía culpable de traicionar la confianza de Valentina de nuevo, y por el otro ese error había alejado a Alonso para siempre y para acabar de completar no sabía nada de Martina, tantas cosas rondaban su cabeza y no le permitían razonar  con claridad ni mucho menos tener paz.

Quiere un cafecito doctorcita?.. doctorcitaaa??

Analia se dio la vuelta.

Analia: ahh eres tú iluminada.

Iluminada: pos quien más? mis patrones siguen fuera.

Analia: y sabes cuándo regresan?

Iluminada: sepa, pero no creo que tarden mucho, no les gusta dejar de lado los negocios de la hacienda tanto tiempo, aunque ya llevan varios días .

Analia: pero veo que todo marcha perfectamente aunque no están.

Iluminada: pos si pero igual son ellos los que controlan todito y tiene marchando a sus hombres de confianza que tienen que rendirles cuentas apenitas lleguen además los niños tienen que regresar a la escuela.

Analia: es cierto.

Iluminada: entonces? le traigo el cafecito?

Analia: si! gracias.

El teléfono de Analia sonó, era un mensaje de Alonso.

"Analia, José Miguel está al tanto de todo, y quiere hablar contigo en cuanto regrese, no esperes una felicitación o una palmada de agradecimiento, cometiste un error así que mínimo da la cara, porque no querrás conocerlo a él y a Valentina enojados; sólo espero que no eches a perder tu vida con esas amistades, Alonso"

Analia: nunca me lo va a perdonar!!

Analia salió corriendo, para cuando Iluminada regresó con el café ella ya no estaba.

Iluminada: y ahora? pos pa donde se jaló?

En Cancún...

Horacio: estás seguro que Valentina no sospecha nada?

José Miguel: no y Gabi?

Horacio: tampoco.

Mientras tanto en la alberca...

Gabriela: no te parece que Horacio y José Miguel andan muy raros?

Valentina: desde hace un par de días andan muy sospechosos.

Gabriela: hay que investigar que se traen esos dos.