Capitulo 76

853 52 5
                                    

Mami, papi... mami... papiii

Valentina despertó de un solo brinco.

Valentina: mi cielo, mi cielo.

José Miguel seguía dormido

Valentina: despierta.

José Miguel abrió los ojos y al ver a su esposa le sonrió.

José Miguel: me encanta que seas lo primero en ver al abrir mis ojos cada mañana.

Valentina: a mi también, pero debemos apurarnos, los niños ya despertaron.

José miguel: que? Que hora es?

Valentina: van a dar las 8

José miguel: como pudimos dormir tanto??

Valentina: fue una noche larga.

José Miguel le sonrió y la besó.

José Miguel: Muy larga y atareada.

Cecilia Benita: mamita, ya estás despierta? tenemos hambre.

José Federico: papito despierta a mamita.

Buenos días niños, como durmieron?

Dijo Maria helena.

Cecilia Benita: tenemos hambre y nuestros papitos aun no despiertan.

José Federico: mira, la puerta tiene seguro.

Maria Helena: a lo mejor se les hizo tarde, que les parece si vamos a la cocina y les preparo lo que quieran para desayunar, estoy segura que sus papás no tardarán en despertar.

Los niños siguieron a la empleada mientras Valentina y José Miguel respiraron y al versen el uno al otro soltaron la carcajada.

Jose miguel: estuvo cerca.

Valentina: muy cerca, voy a darme un baño.

Jose Miguel: yo voy contigo.

Valentina: si entramos juntos tardaremos más en salir, lo sabes no?

José Miguel: es cierto, entonces mientras te duchas yo arreglo todo este tiradero.

Valentina: es una idea sensata, no tardo.

José Miguel: hey! olvidas algo.

Valentina: no nada.

José miguel: a mi me parece que me debes el beso de buenos días.

Valentina caminó hacia él y le dio un besote, después, se fue a dar un baño.

Mientras tomaba una  ducha Valentina se metió mucho en sus pensamientos que estaban realmente a flor de piel, después de todo lo que había sucedido semanas atrás en la que había sufrido mucho al fin  se sentía  plena por haber pasado una apasionante noche con el hombre que tanto amaba, sus lágrimas derramadas estaban teniendo su recompensa, estaba dispuesta a defender su amor a costa de lo que fuera.

José Miguel recogió todo de hecho se cruzó con una bolsita que parecía ser uno de sus preservativos que no estaba usada, así que la tomó y la guardo en su bolsillo.

Mientras el agua recorría por el esbelto cuerpo de Valentina sus recuerdos de horas antes la tenían en las nubes, se sentía como si hace "años" José Miguel no la hubiera amado de una manera tan apasionante, pero no era así, simplemente cada vez que estaban juntos era especial, porque entre los niños y sus respectivas responsabilidades en la hacienda el tiempo para estar a solar a veces se tornaba un poco difícil.

José Miguel entró al baño creyendo que ya su esposa había terminado de bañarse pero aún el agua caía sobre todo su cuerpo y no dudo en quedarse para contemplarla.

SOY TU DUEÑA 2Donde viven las historias. Descúbrelo ahora