SOY TU DUEÑA 2

Capitulo 33

Del auto se bajó un hombre blanco, de ojos claros, muy guapo que dejó a Valentina muda.

Valentina: Tú? Que haces aquí?

Fernando: te busque por semanas, me alegra haberte encontrado, por favor baja el arma no te voy a hacer nada.

Gabriela: que pasa Valentina? Quién es?

Gabriela quedó en shock al ver a Fernando.

Fernando: Hola Gabi!

Gabriela: pero, qué haces aquí? Y por qué nos seguías?

Fernando: Bueno es que quisiera hablar con Valentina.

Valentina: hablar? De que? Hace más de 15 años que te fuiste.

Fernando: lo sé! Fue un gran error haberte dejado así, pero regrese.

Gabriela: pues es muy tarde.

Fernando: lo que pasó hace años tiene una explicación, vengan conmigo, necesito que me escuchen, las sigo a donde sea.

Gabriela: que dices Valentina?

Valentina: está bien, pero solo unos minutos, necesito saber cuál es tu objetivo, además mis hijos me esperan.

Fernando:  tienes hijos?

Valentina asintió.

Fernando: entiendo, entonces las sigo.

Los 3 se subieron a sus autos y se regresaron unos metros.

Analia continuaba con su trabajo y vio muy nerviosa a Iluminada.

Analia: que tienes?

Iluminada: es que creo que algo le pasa a mis patrones.

Analia: porque lo dices?

Iluminada: es que ellos son bien cariñosos y desde ayer están muy distanciados, es más la patrona desapareció varias horas y anoche no durmió con el señor José Miguel, achis achis, sólo espero que no haya mano negra de nadie, han sufrido mucho.

Analia: si algo me platico Alonso.

Iluminada: y también le contó que él y la señora iban a casarse y el la dejó plantada?, mi patrona es bien buena gente, porque otra ni de amigo.

Analia: debió lastimarla mucho.

Iluminada: pos si, es más por eso mi patrona se vino de la capital a esta hacienda, pero que suerte que aquí se topó con el señor José Miguel.

Analia: me imagino, entonces ella lo perdonó?

Iluminada: al Alonso? Si, pero pues después, él le rogó retearto, pero pos cuando quiso reconquistarla ella ya se había enamorado de mi patrón.

José Miguel regresó con sus hijos.

Cecilia Benita: y mi mamita?

José Miguel: pensé que estaba aquí.

Cecilia Benita: no, papito, no la hemos visto desde la mañana.

José Federico: yo pensé que vendrías con ella.

José Miguel: que extraño, se supone que ella vendría para acá.

Leonor: en dónde estabas?

José Miguel: en la escuela.

Jose Miguel se llevó a su mamá para platicar más a gusto.

Leonor: arreglaste las cosas con tu esposa?