SOY TU DUEÑA 2

Capitulo 91

Martina: estás hablando en serio? Y desde cuando lo sabes? Donde están?

Analia: viajaron a la capital.

Martina:  Ya no sé si creerte, pudiste haberme mentido para quedar bien con tu patrona.

Analia: murió alguien cercano a ella y todos tuvieron que viajar de improvisto.

Martina: buscar a alguien en la capital es como buscar una aguja en un pajar.

Analia: lo sé, pero tienes el dinero para hacerlo no? Yo sólo cumplo con darte información como quedamos.

Martina: bien, pero te advierto que no veras un centavo hasta que compruebe que me dices la verdad.

Analia: bien, como quieras"

Mientras los niños y sus padres disfrutaban de una tarde en la alberca, Valentina y Gabriela se asoleaban en traje de baño mientras platicaban.

Gabriela: no puedo creer que voy a parecer una pelota de nuevo.

Valentina: porque lo dices?

Gabriela: por mi embarazo.

Valentina: y que esperabas? Que el bebé saliera como estás ahora? Jajajaja

Gabriela: jajajajajaja no pero es que a veces me da miedo.

Valentina: de qué?

Gabriela: que Horacio se fije en otras mujeres mientras yo engordo como globo.

Valentina: no pienses eso, es un proceso natural, podrás recuperar tu figura después de dar a luz y así como te acompañó cuando esperabas a Isabella lo hará esta vez, así es el milagro de la vida.

Gabriela: si tienes razón, soy una tonta, deben ser las hormonas que me ponen así de sensible y a pensar tonterías;a propósito no te gustaría tener otro bebé?

Valentina: no lo sé; José Miguel y yo somos muy felices con los gemelos.

Gabriela: si, pero un niño más corriendo por aquí, por la hacienda, sería estupendo criar de nuevo juntas.

Valentina: si, pero le dejo todo al destino, si Dios nos regala otro hijo será una gran alegría, sino, tenemos dos que nos vuelven locos y que amamos, además estaríamos tú y yo empatadas.

Gabriela: eso sí, dame esas 5 jajajaja,

Ambas chocaron sus manos.

Gabriela: ojala sea niño.

Valentina la observó un tanto extrañada.

Gabriela: no me veas así, sabes bien que Horacio es muy machista y muere por tener un varón.

Valentina. Si pero, el sexo de un bebé es lo de menos, tampoco puedes ponerte a tener como loca bebés hasta darle un varón si esta vez no lo logras.

Gabriela: lo sé pero esta aferrado a esa idea, ya hasta compró una pelota y un uniforme de su equipo favorito para el bebé, no quiero que se sienta defraudado.

Valentina: tú nunca has pensado así, tienes que hacerle entender que no está en tus manos, es lo que la misma naturaleza te permitió llevar dentro de ti, disfruta de tu embarazo y no pienses esas cosas, el tiempo dirá.

Gabriela: si! Vamos a darnos un chapuzón, no?

Las dos amigas se levantaron de su cómoda silla y se metieron lentamente en la alberca.

Disfrutaron junto a sus esposos e hijos de un buen rato.

Martina dudaba de Analia, pero había una manera de comprobarlo, y antes de salir al aeropuerto sacó su teléfono y buscó en los diarios de la capital las muertes sucedidas los últimos dos días; allí estaba un artículo que llamó su atención "Prestigioso abogado muere a causa de un infarto" al leerlo pudo notar el nombre de Valentina donde la mencionaban como una de las personas más cercanas y que había estado presente en su funeral.