XXV

2.2K 87 2
                                    

Narra Alba
Casi no pude dormir en toda la noche. No paraba de darle vueltas a la cabeza, a intentar buscar la manera correcta para no hacer daño a nadie, para hacerlo bien. Pero me di cuenta de que al fin y al cabo, hagas lo que hagas, siempre va a ver alguien a quien le parezca mal. Así que simplemente me limitaré a mirar por mi aunque suene un tanto egosita.

Y si, me da igual Miki, me da igual todo el mundo, quiero estar con Natalia, sin movidas, sin nadie de por medio, sólo ella y yo. No sabéis la de tiempo que llevo deseando eso.

Así que me levanté muy temprano ese día, arregle la maleta ya que a la tarde volveríamos a casa, me duche y me puse unos pantalones de pinza y un top de arriba.

Cuando acabe baje al salón aunque al ser las 9 de la mañana no había nadie, todos seguían durmiendo. Me preparé el desayuno y me senté en el sofá mientras leía unas revistas que había por allí.

De repente escuche un ruido que provenía de fuera aunque no le di mucha importancia, no hasta que alguien abrió la puerta de la casa.

Aunque mi mente y mi mirada estaban en la revista, sabía perfectamente de quien se trataba, ese olor, esa presencia, sólo podía ser ella. Levanté mi cabeza y mi mirada se posó en ella, estaba preciosa.

Vestía con ropa de deporte, un top y unos leggins, que ha decir verdad, le hacían un culo impresionante. Estaba sudando y jadeando, tanto que ni siquiera se dio cuenta de mi presencia, bueno por eso y porque llevaba auriculares.

Iba a cruzar el salón cuando se percató de mi presencia y se quedó inmóvil. Yo intuitivamente le sonreí, pero desvió la mirada y continuó su camino dejándome a mi con el corazón en un puño.

Sabia que lo había echo mal y que le había echo daño y aún más después de aquella noche. Parece que sólo quise jugar con ella.

Narra Natalia
Pase toda la noche sin pegar ojo. Me salía fuera a fumar, o simplemente intentaba hacer cualquier cosa para no pensar en nada, pero era prácticamente imposible.

¿Cómo puede comportarse así después de aquella noche? ¿Cómo puede evitarme de esa manera?

Miles de preguntas corrían por mi cabeza sin ninguna respuesta. Lo único que tenía claro es que todo esto me estaba superando, que no entendía nada y que la cague justo el día en el que me enamoré de ella, porque si no ahora mismo no estaría jodida, divagando por cada esquina.

Quizas todo es más simple que eso, pero para mi todo esto es nuevo. En realidad debería haber sido yo la que hubiera actuado como hizo ella, follando y luego pasando. Esa era yo, o quizás lo sigo siendo, pero no con ella.

Me agobie, me agobie muchísimo y salí a correr un rato para aislarme del mundo y lo conseguí hasta que llegue a casa y para mi mala suerte la única persona que estaba despierta era Alba, joder. Entre que ella pasaba de mi y yo no quería saber nada de ella, todo iba a resultar muy raro.

Pero me sonrió, y no entendí muy bien porque, pero algo dentro mi se sintió muy bien aunque por fuera sólo desprendiese rechazo, tanto que la ignore y seguí mi camino.

___________________

Ya estábamos todos en la mesa almorzando y la verdad es que aquella imagen de todos juntos era muy bonita.

-Chicos este viaje a sido increible, me lo he pasado genial, os quiero pechá illo-dijo Marta

-Ha sido de las mejores cosas que hemos vivido juntos-dijo Damion

-Ha servido para unirnos mas-dijo Julia mirando a Carlos con cara de enamorada

-O para separarnos más-dijo Alba mirándome discretamente con cara de pena

She knows she's toxic| AlbaliaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora