XLI

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Narra Alba
Unos rayos de luz traspasaban la ventana y golpeaban sin piedad contra mis ojos. Aunque hubiese deseado quedarme atada a esa cama durante toda mi vida, mi deber era levantarme.

Abrí mis ojos contemplando así el techo de la habitación de Natalia. Había pasado la mejor noche de mi vida y todavía no era consciente de ello. Natalia es increíble, y toda nuestra historia es de película. Ella es la típica chica dura que con el paso del tiempo se vuelve toda una romántica y yo simplemente me derrito por ella.

Pasee mi mano por mi cuerpo aún desnudo hasta llegar a mi cuello, encontrando la cadena del collar que me regaló Natalia. Segui bajando mis dedos hasta encontrar la luna, la cual encerre en mis manos con fuerza, como si quisiera protegerla.

Y sonreí, lo hice al recordar las palabras de Natalia anoche y es que mis ojos brillaran de otra manera cada noche, cuando mire la luna y piense en ella.

Absorta en mis pensamientos, me di cuenta de algo. Un vacío en la habitación, en la cama. Gire la vista hacia el otro lado de la cama y el desorden y las arrugas de estas me hicieron ver la ausencia de Natalia.

-Que le gusta madrugar-dije murmurando con una sonrisa.

Rode por la cama hasta llegar a la otra punta, donde ella noche había dormido Natalia. Y tanto, ese olor a vainilla es inconfundible.

Me levanté de la cama y fue ahí cuando sentí el cansancio provocado por la noche anterior. No se cuantas veces lo hicimos, lo único que se es que este dolor de piernas ayer sólo fueron gemido ahogados y se que podría acostumbrarme a levantarme así todas la mañanas.

Me di cuenta de que seguía desnuda por lo busque mis bragas por la habitación y abrí el armario para coger una camiseta larga de Natalia. Se que a ella le hubiera encantado verme sin ella, pero no creo que mi cuerpo hubiera aguantado sexo mañanero.

Salí de la habitación para llegar al salón donde todavía quedaban restos de pétalos. La casa estaba en absoluto silencio, no había ni rastro de Natalia.

Fui a la cocina despreocupada a prepararme el desayuno mientras ella volvia. Me preparé unas tostadas de aguacate y un zumo y salí al balcón a desayunar. El día no era demasiado bueno puesto que estaba bastante nublado, pero aún así era increíble sentir la brisa de Madrid nada más despertarse.

Acabe mi desayuno y entre para dentro de la casa. Natalia seguía sin aparecer.

-Donde se habrá metido-dije ya un tanto preocupada

Fui a la habitación a coger mi teléfono para llamarla pero me percaté de algo que se encontraba encima de la mesa, una nota.

Recordé el comienzo de nuestro tonteo, cuando pasamos la noche juntas y a la mañana siguiente me dejó un recorrido de notas por toda la casa y no pude evitar sonreír. Probablemente ese fue el comienzo de todo.

Abrí la nota con una sonrisa, pero más bien me di cuenta que era una carta y bastante larga, me temía lo peor.

Hola albi, probablemente cuando leas esto yo ya estaré a miles de kilómetros de ti, me he ido. Siento no tener el valor suficiente de decírtelo a la cara, pero es pensar en tener que hablar mirándote a los ojos y me acojona.

Siento mucho no poder darte la vida que te mereces. La vida a veces es injusta pero no podemos luchar contra ello.

Alba, eres la mejor persona que conozco y sin duda te mereces todo lo bueno de este mundo. Nunca dejes que nadie te haga pensar lo contrario.

Se feliz y encuentra a alguien que se levante cada mañana y se sienta orgulloso de tenerte a su lado. No llores, no sufras por mi, no me merezco ni una lágrima.

Gracias por todo lo que has echo por mi, me faltarían vidas para poder agradecertelo.

He dejado gran parte de mi dinero en la entrada, cogelo, es todo tuyo. Está casa también es para ti, yo la seguiré pagando desde aquí.

¿Tu ilusión siempre fue tener un lugar donde pintar sin preocupaciones, verdad?

Bueno me encantaría seguir escribiendote, pero tengo que marchar. Ojala las cosas hubieran sido de otra manera.

No me busques, no me llames, no pienses en mi pues, en mi nunca encontrarás lo que buscas, yo no podre dartelo.

Nunca dudes de mi amor por ti, te amo ahora y siempre.

It's always hard for me to stay.

Oye, gracias por hacerme feliz, te quiero.

Rota, así es como me sentía en ese momento. Las lagrimas habian comenzado a salir de mis ojos pero ni si quiera podia sentirlas.

No siento nada, no soy capaz de pensar. Se ha ido y se lo ha llevado todo. Estoy vacía y no le encuentro el sentido.

¿Qué hice mal Natalia? ¿No he sido suficiente para ti? ¿Por qué no has sido capaz de decirmelo a la cara? ¿Por qué me has roto?

Todo mi cuerpo me pesaba y por mi mente sólo aparecían recuerdos. Desearia arrancarme la cabeza para dejar de pensar en sus putos labios recorriendo mi piel. Quiero dejar de sentir su tacto en mi piel, quiero dejar de quererla.

¿Pero como? Si ella ha sido mi salvación. De no ser por ella ahora mismo estaría con un maltratador o quizas muerta. De no ser por ella no sabría realmente lo que es la felicidad, los buenos momentos y la magia.

Ella me lo ha dado todo y me lo acaba de quitar.

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Narra Natalia

En algún lugar del mundo
La temperatura era devastadora. Acababa de pisar tierra firme y es lo primero que pensé.

Pero... ¿Cómo te puedes estar muriendo de frío cuando todo tu interior está ardiendo?

Siempre he sido caotica, siempre he destruido todo lo que pasaba por mis manos y está vez no iba a ser menos.

He jodido lo único bueno que he tenido en mi vida y todo por no querer enfrentarme a todo lo que se me venía encima.

Pero ya no hay marcha atrás, las decisiones a veces son difíciles pero cuando tienes un cuchillo en el cuello tienes que decidir rapido antes de que este te decapite.

Busque la cafetería más cercana y entre para intentar buscar algo de calor. Encontré una mesa libre al fondo, asi que pedi un chocolate caliente y me senté.

Miles de recuerdos atormentaron mi mente. Todas las tardes tomando café, todas las charlas en el bar, todos los besos con sabor a cerveza. Mi alma quería gritar pero sabía que debía callar por lo que mis ojos lloraron en silencio.

Estaba rodeada de gente y ni si quiera se daban cuenta de que estaba llorando, pues lo que me merezco es esto.

La tristeza de estar rodeada de miles de personas y sentirse sola.

Cogi mi teléfono y llame.

-Ya estoy aqui-dije en un hilo de voz

-Has echo lo correcto-dijo una voz al otro lado del teléfono.

She knows she's toxic| AlbaliaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora